›«¿No es cierto? Para nada»‹

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Narrador omnisciente

El rumor de que Black y Jones eran amigos recorrió por todo Hogwarts, ocacionando que varios se sorprendieran, y que otros no lo creyeran, pero al fin de algunos días, aceptaron que aquello era cierto.

Él merodeador más codiciado y una de las gemelas Slyffindor habían iniciado una particular amistad.

Pero, ¿A eso se le consideraba amistad?

Por parte de ambos, o por lo menos, por parte de uno de ellos, existía un sentimiento que podría echar todo a perder o todo mejorar. Sin embargo, mientras que no se revelaran aquellos sentimientos que poseen, la amistad iba a perdurar mientras que otro tipo de relación se iba a acortar.

Al principio, sus amigos no disfrutaban de la idea que estos dos fueran amigos, puesto que pensaban que como "enemigos" eran más divertidos y "congeniaban" más. Con el paso del tiempo, sus ideas cambiaron hasta tal punto que les fascinaba aquella amistas, Sirius y Adhara como amigos era mejor que como enemigos, se notaba la conexión entre ellos y también el gran apoyo que se daban y como, a pesar de ser casi iguales, se complementaban.

Para mala suerte de nuestros bromistas, y buena para nuestros queridos profesores, la temporada escolar acababá justo ese día.

Los Merodeadores y las Gemelas Slyffindor quedaron en que iban a visitar a la casa del Miope, y que se iban a reunir para que así, las vacaciones pasaran más rápidas entre amigos.

Por otro lado, James experimentaba una nueva sensación respecto a la gran amistad que su mejor amigo tenía con Adha, no sabía el porqué, pero estaba seguro que cada vez que él intentaba hablar con Sirius este se encontraba con su nueva mejor amiga, ignorando lo que él le decía y dejándolo de lado. Se sentía excluido por su propio hermano y se enfurecía cada vez que notaba como aquella amistad crecía.

¿Para qué negarlo? James Potter estaba celoso de una Slytherin y aterrorizado con la idea de que ésta pueda quitarle a su hermano de otra sangre, claro está, que nunca aceptaría lo segundo.

Y a raíz de esos sentimientos decidió que aquel día, iba a tener una charla muy seria con cierta chica, no iba a dejar que "apartarán" a un ser querido de él, o eso pensaba que Adhara estaba intentando.

Cuando todos llegaron al Gran Comedor para su ultima cena de aquella temporada escolar, James junto con sus amigos se sentaron en el mismo lugar de siempre, con la diferencia que Paula los acompañaba. Adhara se encontraba en su mesa, junto con todos sus amigos, con los cuales se estaban riendo y charlando animadamente. Sirius no pudo evitar fruncir el ceño, aceptaba y a la vez no que Adhara quedara en Slytherin. Le molestaba el hecho de que no quedò en la misma casa que él, a pesar que ya había pasado considerable tiempo.

- Un año acaba y otro viene - empezó Dumbledore - Este año hemos aprendido variedad de cosas, como también hemos hecho más amistades y bromas - guiño un ojo hacia los merodeadores y Gemelas Slyffindor, los cuales le sonrieron -para los que volverán el próximo año: ¡Que tengan unas estupendas vacaciones! Los esperaremos con ansias. Y para los que ya acaban su vida escolar, recuerden que Hogwarts siempre los recibirá, y que se les va a extrañar - algunos alumnos de séptimo año se pusieron melancólicos, aquella iba a ser su ultima cena en el castillo, aquel lugar que fue su hogar durante 7 años.

- Y ahora, el momento que esperaban - prosiguió Dumbledore - Como sabéis, el ganador de la copa de Quidditch fue Gryffindor - los nombrados aplaudieron - Sin embargo, me complace anunciar, que este año, las copas de las casas es para - el director se tomo la paciencia de mirar cada una de las mesas, para después anunciar - ¡Slytherin!

La mesa mencionada empezó a saltar y gritar de emoción, se pudo observar como todos lanzaron sus gorros al mismo tiempo, como.si se hubiesen puesto de acuerdo, el gran comedor fue decorado con los típicos colores de Slytherin, verde y plateado.

Ravenclaw y Hufflepuff aplaudían sin ganas, mientras que Gryffindor solo se quejaban. Tuvo que pasar varios minutos para que la mesa ganadora se calmara, y después prosiguieron con la cena, al final, todo el mundo empezó a dirigirse a su sala común, el día siguiente partirían hacia sus respectivos hogares.

Cuando Adhara ya iba hacia su habitación, pudo observar a un merodeador y como este le dió una mirada significativa, para después darse media vuelta y caminar, ella se despidió de sus amigos algo extrañada, para después seguir al merodeador, un tanto confusa por sus acciones.

Lo empezó a seguir hasta que lo perdió de vista. No entendía porque tanto misterio de parte de él y esperaba que no fuera nada malo.

En un movimiento alguien intento acorralarla, sin embargo, Adhara dió a salir sus dotes de Slytherin y al final, fue James quién quedó acorralado.

- ¿Para qué tanto misterio? - preguntó curiosa.

El merodeador no pudo resistir su mirada, por lo que la desvío.

- ¿Por qué siento que estás aislando a Sirius de sus verdaderos amigos? - preguntó.

Adhara se sorprendió con aquella acusación, analizó con su mirada a James para luego alejarse de él y apoyarse a la otra pared, el susodicho solo la observaba.

- ¿Por qué crees que Sirius te va a cambiar por mi? - preguntó, pero no de una manera hostil, como James imaginaba, si no como si lo... Comprendiera.

James parpadeo perplejo. En aquel momento Adhara tenía sus ojos celestes caunsando que se notaran como nunca antes, al estar en la oscuridad.

- ¿No es cierto? - le preguntó algo confundido y aliviado.

Ella negó con la cabeza.

- Para nada - le dio una sonrisa tranquila - Tal vez es cierto que Sirius a estado un tanto a alejado de ti, pero, no te has puesto a pensar que solo fue para ¿Ponerse al día de los ultimos tres años? - cuestionó, James se sintió un estúpido, al fin y al cabo, ellos dos tenían que hablar sobre muchas cosas, más de lo que él desearía.

Adhara se acerco a él y lo abrazo.

- Sirius nunca te cambiaría, lo conozco tan bien, y sé que a puesto a varias personas por encima de ti, hasta a su propia familia - le susurro. Luego se alejo y le guiño el ojo - Nos vemos en vacaciones, Míster Ego - se despidió.

El susodicho se quedo pensando en lo que dijo Adhara, y cuando alzo la mirada para reclamarle por el apodo, ella ya no estaba.

Negó con la cabeza, nadie podría superar a Adhara con sus salidas tan misteriosas y especiales.

Más calmado, y ahora sin aquellos pensamientos perturbandole la cabeza, se encaminó hacia la habitación que compartía con sus hermanos de otra familia.

Podría acostumbrarse al apodo que Adhara le había dado, al fin de cuentas, era único, como todos en esta vida.

Editado el
30/01/2019

Blood Traitors (Sirius y tú) Blood Saga #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora