Peter
Había pasado cuatro días desde que Adhara había echo la broma a Sirius, sin duda alguna ella era espectacular, era una muy buena bromista y siempre hacía reir a todos.
Sin embargo, se que oculta algo, siempre e sido muy observador, con solo ver las acciones podía descubrir como son esas personas en realidad, y con solo ver a Adhara, se que ella no quiso madurar, la obligaron a hacerlo.
Me encaminaba hacía la biblioteca para encontrarme con Remus, según el me iva a ayudar en algunos temas. Aunque se que nunca podre superarlo o por lo menos igualarlo, al igual que James y Sirius, ellos dos aprueban sin estudiar, como me encantaría tener esas capacidades.
Con un ultimo suspiro entre a la biblioteca, y no me sorprendí al encontrarme con la escena de que Remus y Paula se encotraban en la misma mesa riendo bajo, era una escena sin duda alguna muy eternecedora y mi corazón se alegro por ellos, se notaba a leguas que se querían.
— Hey tortolos, ya llegue – anuncie mientras que me sentaba enfrente de ellos.
Al instante se sonrojaron un poco por el apodo, no se porque son tan tercos y no se dicen lo que sienten.
— ¡Peter! – me reprendió Remus mientras se sonrojaba más, yo solo sonreí con inocencia.
— Dejalo estar Rem, yo me tengo que ir para juntarme con Lily, la pelirroja necesita de mí. Hasta luego Peter, adios Rem – dijo y beso la mejilla de Remus quien se sonrojo y se despidio de mi con la mano.
— ¡Hay Rem! No sabes cuanto te amo. Mua, mua, mua – escuche una voz intentar imitar a la de Paula para despues escuchar una risa singular.
Remus nego con la cabeza mientras que resoplaba, y el pequeño sonrojo volvio a atacar.
— Hay veces en las que me pregunto como pude volverme tu amigo, Ad
— Me ofendes Remus – La pelinegra se llevo una mano a su pecho pareciendo indignada.
— Ad
— ¿Si?
— El corazon esta en el otro lado – señalo mientras que sonreía burlón.
Al instante me reí junto con Remus al ver como Adhara lo intentaba fulminar con la mirada. Pero luego se rindió y se nos unio a la risa.
— ¡SILENCIO! – ordeno la señora Pince, y al instante nos callamos.
— Bueno Remus, ¿Hoy me ivas a enseñar Historia de la magia, no? – le pregunte y el asintió.
— ¿Historia de la magia? Si quieres yo los puedo ayudar – se ofreció con una sonrisa la pelinegra.
— Entre más mejor, pero nada de bromas ni chistes, ¿Entendido? – prengunto como si fuera un padre, Remus.
— Entendido – e hizo un saludo militar – ¿Eres Peter, no? – me pregunto
Me sorprendió un poco que supiera mi nombre, puesto que para la mayoría de las personas soy invicible, excepto a los que me molestan. Asenti aún conmocionado porque ella conociera mi nombre.
— Bueno Pet, yo soy Adhara, aunque de seguro ya lo sabes, pero si quieres me puedes decir Ad o Adha – y me brindo una sonrisa... ¿Maternal? Sentí como sonreí sin darme cuenta.
— Mucho gusto, Dara – me oí decir.
Ella sonrío, y se puso pensativa, fue ahí donde caí en cuenta que le había puesto un mote.
— Dara... Me gusta, entonces... Yo te llamare... Mmm... Pet-bo, ¡es que eres tan pequeño y adorable! – dijo e instintivamente me sonroje y senti como ella me abrazaba.
— Ad... Sueltalo – ordeno Remus
— Ño – nego como una niña pequeña
— Adhara... – hablo amanezante
— Ok, esta bien – y me solto mientras me guiñaba un ojo y se sentaba.
Sin duda alguna, hoy iva a ser una tarde muy divertida.
(...)
La mayoría de la tutoría Dara y yo nos poniamos a imitar a Remus cuando el no se daba cuenta, y cabe aclarar que cuando lo hiso se marcho un tanto molesto. No le hice caso porque estaba en sus días y sabía que iva a regresar, siempre lo hace, palabras de Dara no mías.
Despue de una hora en la cual me la pase entablando más mi lazo de amistad con Dara, nos concentramos en estudiar y tengo que admitir que Dara si que sabe mucho de este tema y es muy buena profesora, en menos de lo que canta un hipogrifo me pude aprender la mayoría de los temas.
Cuando acabamos de estudiar nos dirigimos a caminar y pasear por ahí, hasta que nos encontramos con James, Sirius, Remus y Paula, asi que nos decidimos dirigirnos debajo del arbol en el que siempre nos sentabamos.
Las risaz, chistes, burlas, no hicieron falta, todos estabamos muy felizes y alegres, aparte de que yo me sentía por primera vez incrementado en el grupo puesto que Dara siempre me metía en algún chiste o tema. Naturalemnte siempre soy el que apoya y me emociono con lo que James y Sirius dicen, pero con Dara... Con ella puedo sentirme parte del grupo porque ella me integra al grupo.
No me sentí para nada excluido.
Al anochecer Dara empezó a decir que sus amigos serpientes iban a tener celos de que se la pasó todo el día con Leones que con ellos, por lo cual se despidió de nosotros y se dirigió hacía su sala común.
Despues de ello todos, excepto yo, optaron por ir a la sala común. Despidiendome de ellos me diriji a la torre de astronomía, donde normalmente me iva a pensar.
Al llegar pude observar las estrellas que se encontraban, eran sin duda alguna hermosas.
La primera estrella que localize fue la adhara , que se encontraba en la contelacion del Canis Major.
Me puse a pensar en la pelinegra que me había acompañado el día de hoy, y sin siquiera desearlo la imagen de ella sonriendome de forma maternal apareció en mi mente.
Ella... Ella... ¿Es mi nueva amiga?
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Blood Traitors (Sirius y tú) Blood Saga #1
Fanfic- Eres peligrosa... - razonó él pero, antes de que ella hablara, añadió - un amor prohibido no creo que sea del todo malo - sonrió acercándose a ella - ¿Crees que olvidaré todo lo que hemos vivido y me alejaré? - ella no podía emitir ni una palabra...