capitulo 22

66 7 0
                                    

Luego de la cena y una sobre mesa con café, entre charlas y risas la noche a avanzado tranquila. 
Bromas por demás de parte de Cristhian que aprovecha la presencia de Isa para contar nuestras anécdotas de la universidad...
Son gratos momentos compartidos, de los que Isa y Vero ríen relajadas.
Cada cinco minutos la mirada de Isa de topa con la mía observándola, es que no puedo dejar de hacerlo.  Esta faceta suya riendo así jamás la vi antes. Tampoco es que hemos compartido tanto tiempo juntos fuera del trabajo,  alguna que otra cena de celebración de cumpleaños de empleados o las reuniones sociales de la empresa.  Donde ella siempre escoltada por su ex prometido sonreía con simpleza. Pero jamás como ríe hoy. 

- Chicos, si nos disculpan nosotros nos retiramos a dormir... 

Dice Cristhian poniéndose de pie y tomando la mano de su mujer para luego rodear su cintura.
Conozco esa mirada que trae, y sé que lo que menos quiere es dormir. 
Se ha pasado la noche con discreción tocando a su esposa con deseo, y robando cada tanto algún beso de ella. 

- Si como no,  vallan a "dormir" tortolitos.

Digo riendo. 

- Buenas noches. 
- Descansen... 

Dice Vero dándome un beso y un abrazo a Isa...

Cuando por fin quedamos solos con Isabella nos miramos en silencio,  no creo que quiera dormir... 
Y yo lo que menos puedo hacer es pensar en ir a dormir sabiendola en la alcoba contigua a la mía... 

- Será mejor que yo también  valla a dormir... 

Dice poniéndose de pie y observándome... 
Me paro frente a ella con las manos en los bolsillos al responder. 

- Si supongo que haré lo mismo.  Te acompaño?

Pregunto, sé que ella no ha visto en que alcoba dormirá... 

- Gracias... 

Caminamos en silencio y nos detenemos frente a la puerta de la alcoba que Verónica preparó para ella. 
Nos observamos unos minutos en silencio sin poder o no querer decir buenas noches. 
Cargo los pulmones de aire y llevo la mano al cuello apartando la mirada de la suya... 
Es que si sigo mirándola voy a perder el poco control que poseo de mi mismo. 

- Que descanses Isabella... 

Digo besando su mejilla.

- Buenas noches Iván...  Descansa.

Responde como desilusionada?  Adentrándose en la alcoba y cerrando la puerta tras de si.
Giro sobre mis pies y voy a mi alcoba con las manos en los bolsillos, niego con la cabeza y sonrío resignado. 
El deseo que me provoca esa mujer es indescriptible.
Me meto en la ducha en un intento de contenerme de ir a dónde dormirá y volver a hacerla mía...
Al salir me coloco un bóxer limpio y el pantalón del pijama.
Me encanta la seda para dormir. 
Miro el reloj de pared y apenas son las dos de la madrugada. 
Con el cambio de horario si bien estoy algo cansado no lo suficiente para caer dormido enseguida... 
Hago el intento y luego de veinte minutos me rindo levantándome suspirando de la cama. 
A lo mejor una taza de te me relaje lo suficiente para conciliar el sueño y descansar algunas horas...
Salgo decidido rumbo a la cocina para encontrarme con las luces encendidas... 
Eso me alerta de la presencia de alguien ahí... 
Camino lento hasta ampliar mi campo visual que se fija una vez distingo a una Verónica  cocinando frenética algo en la estufa...

- Muñeca,  estás bien? 

Pregunto al ver su actitud. Es como si no fuera la misma mujer que hace algunas horas... 
Recorrí el lugar intentando localizar la presencia de Cristhian pero es claro que no esta aquí... 
Un murmuro constante sale de los labios de Verónica que parece poseída revolviendo algo desquiciada. 
Comienzo a acercarme hasta ella pero la voz de Cristhian me detiene...

Tus ojos Mis Grilletes...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora