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Harry me miraba fijamente mientras yo solo admirando el cielo oscuro y el mar azul.

-¿Te gusta? -preguntó.

-Me encanta -respondí sonriendo.

-Mi madre me hablaba de este lugar, ella había venido junto con mi padre antes de casarse. -dijo.

-¿Quisiste hacer lo mismo, qué lo mismo sucediera? -pregunté.

-No quiero que lo misme pase. -admitió, lo miré extrañada.

-¿Por qué? -pregunté.

-Veras, mis padres se separaron cuando yo solo tenía 7 años de edad, no quiero que nos suceda lo mismo. Hay miles de malos sentimientos, y no quiero que ninguno de ellos los sienta mis hijos. -dijo mirándome fijamente, un brilló apareció en mis ojos.

-Harry, te amo. -dije mirándolo, él me miró sonriendo.

-Y yo te amo más. -dijo, acercándose a mí lentamente.

Al sentir sus labios sobre los míos una corriente eléctrica atacó mi cuerpo entero, de pies a cabeza. El beso se hizo más apasionado y salvaje.

Me acostó sobre la arena y se subió encima mío no dejando todo su peso sobre mí. Sus besos descendieron hasta mi cuello el cual empezó a morder, chupar y besar. Me estaba volviendo loca. De repente ambos sentimos como una ola nos cae encima, haciéndonos separar bruscamente para después reír a carcajadas, nos miramos avergonzados y nos levantamos de la arena, nos quitamos toda la arena de la ropa y entrelazamos nuestras manos. Agarré mis zapatos y empezamos a caminar de vuelta a el hotel.

Al llegar a nuestra habitación cerramos la puerta y nos miramos a los ojos que estaban llenos de pasión y deseo. Sin pensarlo dos veces unimos nuestros labios, esta vez para nunca parar. Me tiró sobre la cama fuertemente, pero solo causando más excitación en mí. Quitó mi vestido rápidamente mientras yo le quitaba su saco y su camisa. Cuando ya los dos nos quedamos completamente desnudos la excitación aumentó. Harry rozaba su pene contra mi feminidad haciéndome soltar miles de gemidos. Sentí su pene entrar en mi feminidad, solté un gemido. Sus movimientos se hicieron más constantes y rápidos, causándome placer al extremo. Cuando los dos llegamos al orgasmo nos acostamos en la cama. Yo posé mi cabeza sobre su torso mientras sentía como su respiración se regulaba cada vez más. Él, sin embargo, miraba al techo como en busca de la respuesta de un millón de preguntas. No evité mirarlo con la ceja levantada, abrí mi boca lentamente pero después decidí no preguntar nada, no quería ser entrometida. Miré nuestros pies, los cuáles estaban entrelazados al igual que nuestras manos.

-¿Tienes hambre amor? -preguntó Harry mirándome.

-Un poco. -admití, sí tenía hambre.

-¿Pido algo? -preguntó.

-Si quieres. -dije, él se levantó cuidadosamente de la cama, agarró el teléfono y se volvió a acostar, marcó el número de servicio a habitación- Buenas noches, ¿servicio a la habitación? Sí bueno...¿qué quieres amor? -dijo apartando el celular.

-Pizza y soda amor y unas fresas con chocolate. -dije simplemente.

-Wow, bueno, me trae por favor 5 trozos de pizza, soda, fresas con chocolate y 3 hamburguesas de carne con 2 sodas grandes y papas fritas, ajá, por favor, gracias. -colgó.

-¿Estás embarazado? -pregunté sonriendo, él me miró y sonrió a carcajadas.

-¿Por qué preguntas? -preguntó.

-¿3 hamburguesas, dos sodas grandes y papas fritas? Me hubieses dicho y pido el restaurante entero. -dije sonriendo.

-Tengo hambre, tal vez esté embarazado. -dijo sonriendo, yo lo golpee levemente.

Nos quedamos ahí acostados hasta que alguien tocó la puerta fuertemente.

Adolescentes II (Harry Styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora