Había un repartidor en frente de nuestra casa, con un ramo de rosas y un peluche gigantesco. ¿Qué carajos?
-¿Richelle Leen? -preguntó el repartido, asentí sin entender- Le han mandado esto. -dijo, entregándome las cosas- Firme aquí por favor.
De una manera a otra firmé el documento y me despedí de él. Entré a la casa y miré a Harry, quién me observaba con un rostro apacible, que después se convirtió a una mirada asesina.
-¿Quién te ha enviado eso? -preguntó, apretando los puños.
-No lo sé. -dije.
-¿No tiene tarjeta? -preguntó.
-Espera... sí.
Leí el papel y decía lo siguiente:
"Perdóname, por todo,
Trevor"
¿Qué mierda? ¿Qué mierda? ¿Qué mierda?
¿Por qué mierda mi propio primo me manda unas rosas y un peluche gigantesco?
Harry me mira, esperando una respuesta. Lo miró, con la mirada sorprendida.
-¿Trevor, cierto? -preguntó, yo asentí- ¡Mierda! -exclamó, golpeando la pared.
-Harry, tranquilo...
-¿Cómo quieres que me tranquilice, amor? Si tú primo te anda enviando regalitos muy pasados de nivel.
-Es un simple peluche.
-Y unas simples rosas. -calló- Te he dicho que eres solamente mía. Te he dicho que no te puedo compartir con nadie más.
Me quedé callada por unos minutos. Amaba cuando Harry se convertía en "Harry el novio posesivo"
Él notó mi silencio y siguió hablando.
-Sé lo que pasó entre ustedes dos, y no quiero que se vuelva a repetir, nunca. Sé que son familia, sé que se quieren pero, por favor, no dejes que te vuelva a mandar nada más. Eres mía. -dijo, agarrándome de la cintura.
-Sé que soy tuya, amor. Me encanta cuando te conviertes en "mi novio el posesivo".
-Me convertiré en "mi novio el posesivo" cada vez que haya un idiota que quiera robarte el corazón.
-Sabes que tienes mi corazón en una caja fuerte, nadie lo puede abrir, ni el más listo ladrón.
-Eso lo tengo muy claro, cariño. -dijo y besó mis labios.
La bipolaridad de Harry era extremadamente extraña. Nos volvimos a sentar en el sillón mientras veíamos televisión. Yo aún seguía pensando, ¿a qué se refería Trevor en "perdóname, por favor"? ¿Qué hizo para necesitar mi perdón? Harry se levantó del sofá para contestar una llamada, aproveché para mandarle un mensaje a Trevor. Cuando vi la pantalla de mí teléfono ya había un mensaje de él que decía: