Él se apartó. Dejándome nuevamente con las ganas de saber qué había pasado. Pero no quería insistirle, como he dicho antes, quiero que le nazca. Mi vista se concentró en la chimenea y me imaginé a mí con mi bebé, solas, sin problemas. La imagen se me hizo desagradable al analizar la palabra "solas". Sin Harry, nada sería lo mismo. Su mirada regresó a mí, mientras que lo miraba expectativa. Suspiré, fuertemente, y abrió sus labios lentamente.
-¿Dónde estabas? -preguntó.
-En casa de mi madre, Harry. Tú me dejaste allá.
-Cierto. -dijo.
-¿Me dirás por qué estabas tan enojado? -pregunté levantándome de el sofá.
-Estaba enojado porque...porque la chica que me atendió la cuenta era Emma.
Y eso me arruinó completamente. Mi mirada bajó al suelo, traté de no sacar las lágrimas, pero se me era casi imposible. Saber que Emma estaba de vuelta, saber que ella era perfecta, saber que ella se acostó con Harry, saber todo eso me arruinó completamente el corazón. Harry tomó mi barbilla y subió de ella para que lo mirara a los ojos. A esos ojos verdes, a esos ojos que me miraban con preocupación, esos ojos que me decían un "te amo"
-No te pongas así, ¿sí? -dijo.
-Harry, ahora tengo miedo. -respondí siendo muy sincera.
-¿Con miedo? ¿Por qué? -preguntó frunciendo el ceño.
-Tú y ella tuvieron...tuvieron un pasado. -dije.
-Sí, lo has dicho, "un pasado" pero ahora tú eres mi presente, y serás mi futuro. No quiero que ella nos arruine la vida, no ahora, cuando empieza a tener más sentido. -respondió, sobre mis labios.
Unió nuestros labios en un hermoso y sincero beso lleno de amor, pasión y deseo. Sentimientos cruzados, claro. Yo tomé su cuello y lo acerqué más a mí, para profundizar el beso. Nos separamos por falta de aire.
Lo miré a los ojos. Veía sinceridad pero a la vez miedo. ¿Miedo, pero por qué? No lo sé. Y algo me decía que no lo sabría por un largo tiempo.
Los dos subimos a nuestra habitación. Yo estaba muriendo de sueño. Me cambié de ropa y me puse mi linda pijama de Minnie. Harry me sonrió y se quitó su camisa y se puso un buzo gris, todo un Adonis. Los dos nos acostamos en la cama y quedamos en un profundo y para mí muy deseado sueño.
H's Pov
Recordaba todas las cosas que me dijo Emma en manera lenta y seductora. No puedo creer que haya vuelto sólo para empeorar mi relación con Richelle después de cinco años de no saber dónde estaba. Ella fue solo un horrible error, sólo eso. No quería saber nada de ella, no quería verla ni en retrato y ahora se aparece así de repente, arruinando mi día y el de Richelle. Esto fue lo que pasó cuando pagué la cuenta.