se mira y no se toca

09

DongHyuck nunca en su vida miró con tanta intensidad una puerta. JaeMin estaba riendo entre dientes, él se sentía casi ofendido, ¿cómo es que Nana estaba tan despreocupado con respecto a la situación? Claro, porque no sabía a qué familia pertenecía JaeNo. Había estado toda la noche mirando las noticias acerca de los crímenes de su familia.

Era incluso peor de lo que pensó.

Pero, mientras estaba distraído asustándose, JaeNo y RenJun aparecieron, los dos muy juntos. Demasiado juntos. Sospechoso.

JaeNo caminaba con su brazo posado casualmente sobre los hombros del chino, mientras éste lo abrazaba por su espalda. Si DongHyuck no fuera tan tonto, hubiera notado que RenJun estaba lejos de estar asustado. Pero no lo hizo.

— Oye, Hyuck, lo siento si soné un poco siniestro anoche — se disculpó, sentándose frente a él muy seguido del mayor de los cuatro. — Sólo que me estresa que alguien haga preguntas sobre mi intimidad a otras personas.

— Oh... Sí, no hay problema. Igual lo tuyo es con Makku, no conmigo.

— ¡Sabía que te acostaste con Mark Lee! — gritó JaeMin, JaeNo le dio un golpe con su cartuchera.

— ¿Qué le dijiste sobre Mark? — preguntó RenJun.

— Le dije a Hyuck que le dijera a Mark que no se metiera en mis asuntos. Ahora que lo pienso soné como esos mafiosos de las películas yankees — bromeó y aunque los otros se rieron, DongHyuck no.

— Creo que DongHyuck está celoso de que te hayas...

— ¡Que no lo hice, Nana! — exclamó JaeNo.

— Ya, ya. Si no me quieren decir... — llevó su mano a su frente dramáticamente.

— Aunque mejor, la próxima vez nos juntamos a estudiar en la casa de Nana — propuso RenJun, todos asintieron terriblemente de acuerdo.

— ¿Entonces estudiaron para el examen?

— Johnny me explicó todo, tiene pasta para ser profesor. Si él fuera nuestro profesor de inglés, no la pasaría tan mal — contó DongHyuck.

— ¿Johnny es el alto con el cabello genial? — preguntó JaeMin.

DongHyuck asintió.

— Oh, vaya que sí. No faltaría nunca — DongHyuck le dio un golpe con su propia cartuchera.

— ¡Todos están agresivos conmigo!— exclamó dramáticamente. 

Las clases comenzaron con normalidad, JaeMin estaba sentado a su lado burlándose de sus profesores como siempre, pero DongHyuck estaba más callado de lo usual. Frente a ellos, estaban sentados JaeNo y RenJun. Quienes no paraba de echarse miradas esporádicas.

— ¡Creí que nunca llegaría la hora del almuerzo! ¡Muero de hambre! — exclamó JaeNo, frotando su estómago.

— ¡Vamos a la cafetería antes de que compren toda la pizza! — gritó JaeMin. Así que los dos muchachos desparecieron pronto.

DongHyuck estaba por levantarse luego de buscar el tupper con su almuerzo, cuando la mano fría de RenJun se instaló sobre su muñeca. Dio un pequeño respondo.

— Hyuck, t-tengo que decirte algo — su rostro rojo, sus palabras temblorosas. DongHyuck asintió. RenJun miró hacia todos lados y comenzó a arrastrarlo.

El extranjero lo llevó hasta un pasillo más vacío de personas, lo cual en el almuerzo era un logro bastante grande.

DongHyuck lo miró con anticipación, RenJun respiró profundo un par de veces. El menor tenía miedo de lo que el extranjero fuera a decirle. ¿Y si tenía que ver con lo sucedido el día anterior? ¿Y si le había pasado algo malo?

— DongHyuck... Creo que me gusta JaeNo—espetó al fin. 

— Qué. 

— ¡Qué! 

— Oh... ¡Creí que me ibas a decir que te había hecho algo malo!— chilló el chico. 

RenJun lo miró atónito.

— ¿No me mirarás con asco porque me gusta un chico?— preguntó, con cuidado notorio en su voz.  — E-es decir, la gente bromea mucho con todo eso, pero luego cuando es en serio suelen mostrarse un poco reacios. 

DongHyuck sonrió ampliamente. Si RenJun supiera... 

¿Debería decirle? 

No, no era buena idea. 

Una cosa es que te gusten los chicos, y otra totalmente distinta es que te guste vertirte como chica en secreto. 

No, no iba a decírselo a nadie más jamás. 

— ¡Claro que no, tonto! ¡Somos amigos y no hay nada de malo en que te guste un chico!— le dio una fuerte palmada en la espalda. 

Entonces, se acordó de lo que YoonOh y Chittaphon habían dicho. ¿Qué haría JaeNo si se enteraba que un chico gustaba de él? O peor aún, ¿qué haría su padre si se enteraba que el chico que estuvo a solas con su hijo en su habitación gustaba de él? Su expresión decayó rápidamente, pero, por suerte, ya estaban camino al comedor. Así que impostó la mejor sonrisa que pudo. 

— ¿Planeas confesarte?— preguntó DongHyuck antes de que llegaran al comedor. 

— ¡C-claro que no! ¡Apenas y lo descubrí! Prefiero morir antes que decirlo— RenJun intentó bromear.