DongHyuck pasó todo el rato pensando acerca de la sorpresa de Mark, quizá porque era un ansioso de primera y no le gustaba que lo hicieran esperar. Aunque tenía que admitir que lo que RenJun había cocinado, era delicioso, su mente estaba más ocupada en otra cosa. Así que lo miraba intensamente cada vez que podía, pero el canadiense fingía demencia mientras se codeaba con YukHei y más desesperado se ponía.
Así que el almuerzo pasó tan lentamente, que solo la repentina llegada de ChenLe y JiSung, seguidos muy de cerca por los hyungs que todos conocían, salvó el momento e hizo que la espera de todos fuera mucho más amena. Aunque parecía que definitivamente la presencia de YoonOh había inquietado un poco a un par de los presentes.
DongHyuck estaba abstraído en la conversación que mantenían JungWoo y Johnny, que apenas notó cuando Mark le hizo un gesto de la cabeza; aprovechando el repentino tumulto de personas, era un buen momento para salir de allí sin tener esa gran cantidad de pares de ojos encima de ellos.
Cuando se deslizaron fuera de la cabaña, comenzaron a caminar el uno muy junto al otro. Hasta que sus brazos casi se estaban rozando, sin embargo, aunque habían habido un montón de jugueteos entre ellos, en ese momento DongHyuck pudo sentir que quizá todavía necesitaban hablar de muchas cosas.
Pero la silenciosa caminata fue cómoda, sorprendentemente cómoda.
Mark se sintió asfixiado por sus sentimientos, ¿cómo podía sentir tantas cosas si ni siquiera lo estaba tocando? Entre las muchas cosas que había hecho, se había acostumbrado a las emociones fáciles. Esas que explotan con sabor a mucho y duran poco, porque, al final del día, MinHyung seguía sintiéndose solo.
Pero ahora sentía que estaba haciendo las cosas bien. Tenía un par de amigos, que aunque no eran demasiados, podía confiar en ellos. Trabajar le dejaba la sensación de estar ganando dinero por sí mismo, viviendo por él mismo, manteniéndose; era algo que lo hacía sentirse orgulloso de sí mismo. Y, luego estaba el muchachito que caminaba a su lado, quien podía hacerle sentir maripositas con solo mirarlo.
Sin embargo, DongHyuck no estaba tan tranquilo.
Así que de pronto clavó sus ojos en él.
Mark soltó una carcajada ante la ansiedad del menor.
— Ven, vamos a meternos al mar.
— ¿Qué?
— ¡Vamos!
— No quiero que me pique un aguaviva.
— ¡Por Dios! ¿Creciste en Jeju y nunca te metiste al mar?
— ¡Jeju no es tan pequeño como parece! Puedes vivir tranquilamente toda tu vida sin ver el mar.
— Me dijiste que tu casa estaba sobre la orilla.
DongHyuck hizo un pataleta, pero siguió de mala gana al mayor. Secretamente le gustaba nadar, pero en esos momentos quería más saber acerca de la sorpresa, que de llenarse de agua salada.
Aunque, más que nadar, se sumergieron un poco y luego empezaron a tirarse agua por la cara, riéndose cuando alguno era tomado desprevenido por el oleaje y tragaban agua. Eso era no tan divertido para el desafortunado.
Entre las carcajadas de DongHyuck, Mark tomó su mano y deslizó un anillo sobre su dedo índice.
DongHyuck tardó un par de segundos en notarlo, luego mirando como el canadiense sacudía su mano frente a él a modo de saludo, mostrándole que él también llevaba el mismo anillo puesto.
— No sé si lo sabes pero la gente generalmente se pone de novia primero antes de pedir matrimonio— se burló el menor.
— Eish, no seas tonto. No es un anillo de compromiso.
— ¿Entonces qué es?
— Lealtad, un anillo en el dedo índice simboliza lealtad.
DongHyuck observó sus manos, tambaleándose por el continuo y lento golpeteo de las olas contra ambos.
— Probablemente ya lo sabes, pero esto significa que siempre estaré aquí para ti, así como estoy plenamente seguro de que tú estás aquí para mí.
— ¿D-de dónde sacaste tanta seguridad de pronto, Makkuri?
— ¿Acaso no es cierto?
DongHyuck pensó que hasta ese año él había estado solo. Y pensó que Mark también había estado solo hasta ese momento. No era como su únicamente se tuvieran el uno al otro, pero había algo especial en la forma en la que sus vidas habían coincidido. En el momento y en el lugar indicados.
— Creo que... deberíamos ser novios o algo así.
La confianza de Mark desapareció de pronto, volviéndose un lío rojo y tembloroso ante la repentina propuesta del menor.
— Está bien, seamos novios o algo así.
— No te burles de mí o me retractaré.
Mark buscó suavemente su mirada, guardándose la sonrisa que era casi imposible esconder cada vez que estaban juntos. Pero lo hizo por una causa mayor, murmuró un "Hey" para que el menor levantara la cabeza y, en cuanto lo hizo, juntó sus labios en el primer beso que él le dio.
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se mira y no se toca
FanfictionPor más que le guste muchísimo Lee DongHyuck, Mark Lee sabe que no pueden estar juntos. Y no es sólo por la amenaza de Johnny, su madre lo mandaría de regreso a Canadá si se entera que le gusta un chico... al que le gusta vestirse de chica. ❥ nct...