DongHyuck se colocó el gorro navideño y luego colocó otro sobre la cabeza de YoonOh, el muchacho lo miró con sus labios hechos una línea mientras Chittaphon reía y les tomaba una foto.
El timbre sonó de pronto, así que DongHyuck saltó y fue a abrir la puerta mientras cantaba un villancico. Estaba seguro que debía ser su amigo. Pero cuando abrió la puerta, la visión le hizo asustarse.
JaeNo estaba parado, con una sonrisa apenada, pero su rostro guapo estaba cubierto de moretones y había una cortadora sobre el puente de su nariz y sobre su labio. RenJun estaba parado a su lado, con la misma sonrisa apenada.
— ¿Qué rayos te pasó? ¡Feliz Navidad a ambos! Pero, ¿qué les pasó?
—Tuve que encargarme de unos asuntos familiares— se encogió de hombros. Cojeaba ligeramente todavía.
Chittaphon y YoonOh lo miraron horrorizados. Pero rápidamente les hicieron lugar en la mesa a ambos. Ellos también escucharon atentamente la historia muy superficial de lo que le había pasado al muchacho, así que todos se miraron entre sí con suspicacia.
—Hace demasiado frío para salir, así que invitamos a unos amigos aquí, espero que no les moleste — dijo Chittaphon, los muchachos asintieron. — Por ser Navidad no diré nada si toman algo — guiñó un ojo.
— MinGyu, MingHao, JungKook, Yugyeom y BamBam vendrán — informó YoonOh. — Aunque seguro vendrá más gente luego.
— Yo invité a Sorn y a Lalisa, además obvio, a Yuta, él dijo que vendría con Yuto, Kenta y Takuya. Lo bueno es que ese conejo desgraciado no vendrá.
Alguien se aclaró la garganta, DongYoung cerró la puerta, Chittaphon se hundió en su asiento. YoonOh soltó una carcajada. Los muchachos también se rieron, el otro chico se acercó, haciendo una reverencia mientras tomaba asiento al lado del estudiante de leyes.
— Mucho gusto, muchachos, soy el amigo de YoonOh, me llamo Kim DongYoung.
— No tenemos cinco años, hyung — dijo divertido DongHyuck.
Los dos muchachos le miraron con mala cara mientras Chittaphon reía a carcajadas. Todos cenaron tranquilamente, aunque DongHyuck les puso adornos navideños a todos, incluso al joven lastimado quien se acomodó con unos cuernitos de reno. RenJun se puso una diadema llena de hojas y frutos de muérdago.
Oblicuamente todos habían notado que YoonOh y DongYoung eran bastante más que amigos, incluso si solo estaban mirando el especial navideño para esperar mientras llegaban los demás, era bastante divertido. DongYoung puso mala cara cuando vibró su teléfono.
— ¿Es el niño del que me hablaste? — preguntó YoonOh. Chittaphon soltó un bufido.
— "Niño" le dice y tiene nuestra edad — le contó a los más jóvenes.
— Cállate. Es un mocoso.
— ¿De quién hablan? — preguntó JaeNo.
— DongYoung tiene un admirador desde secundaria — comienza YoonOh.
— Es un chico precioso al que adoro, pero no me gusta del mismo modo — DongYoung mostró un atisbo de tristeza. — Se llama JungWoo y es un tesoro, él dice que ya no le gusto, pero no sé.
— Debería conocer a alguien más, total, seguro te olvida fácil — Chittaphon le sacó la lengua. DongYoung hizo un amague de golpearle.
— Debe ser muy difícil que le guste alguien y que no le corresponda — suspiró RenJun, abrazando sus rodillas con timidez.
JaeNo lo miró cuidadosamente.
— Supongo que sí, cuando iba a secundaria me gustó una chica llamada SeJeong pero no me daba ni la hora — admitió entre risas. — ¿A ustedes les pasó?
— A mí me gustó un amigo que teníamos todos en común, TaeYong, pero no resultó — admitió Chittaphon. DongHyuck lo observó, recordando lo que había pasado en la boda de su hermano.
— Ustedes tres son muy chiquitos para haber gustado de varias personas — YoonOh habló, señalándolos acusadoramente.
Entonces el timbre sonó y la gente comenzó a llegar. De pronto, la casa estaba llenísima de personas, parecían muchas más de las que ellos habían mencionado y los más jóvenes se deslizaron a la habitación de Johnny. DongHyuck ni loco, ni ebrio, les dejaría entrar a su habitación. Pero intentó que eso no fuera muy obvio.
Trajeron papas fritas y tomaron un par de refrescos de la heladera. A los dos le habían dejado pasar la noche ahí, pero estaban seguros que no era el mejor momento para andar tomando a lo tonto.
— Hey, muchachos — sonrió Johnny, entrando a su habitación mientras se quitaba el abrigo. Los chicos comenzaron a moverse. — Oh, no. Quédense aquí, no hay problema — les sonrió a todos. — Solo venía a dejar mi abrigo.
Cuando abrió la puerta, TaeIl lo estaba esperando fuera, el muchacho les sonrió cálidamente, sacudiendo su mano, un gesto que todos respondieron. La pareja desapareció tras la puerta cerrada, haciendo que la música permaneciera un poco apagada.
— ¿Ellos dos son novios? — preguntó RenJun, sonriendo tiernamente.
— Sí, lo son hace poco pero llevan saliendo como mil meses. Igual parece que están casados de toda la vida — DongHyuck contó, ciertamente enternecido.
— Qué lindo, espero alguna vez en la vida tener una relación así — pensó JaeNo.
— ¡Chicos, no les quiero asustar pero Mark Lee está aquí con el chico más guapo que vi en toda mi vida! — gritó JaeMin, entrando de pronto.
— ¿Tú qué haces aquí? — preguntó DongHyuck entre risas.
— Se supone que estoy durmiendo en mi casita, pero ssssshhh — JaeMin llevó su dedo índice a sus labios.
— ¿Qué es lo que hacen aquí, aburridos? ¡Vamos a bailar! — exclamó, tomando las manos de DongHyuck y de RenJun.
— Yo paso — JaeNo habló, luciendo una sonrisa apenada. — Apenas me muevo.
— Me quedaré con JaeNo — susurró RenJun.
JaeMin los miró de hito en hito.
— ¡Ustedes se lo pierden! — tomó del brazo a DongHyuck.
JaeMin sonrió de forma impresionante mientras arrastraba a DongHyuck a bailar y le extendía un vaso rojo lleno de cerveza. El mayor lo dudó dos segundos, pero después se encogió de hombros y tomó el contenido espeso, así como se puso a bailar con Nana casi en medio de la sala.

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se mira y no se toca
FanfictionPor más que le guste muchísimo Lee DongHyuck, Mark Lee sabe que no pueden estar juntos. Y no es sólo por la amenaza de Johnny, su madre lo mandaría de regreso a Canadá si se entera que le gusta un chico... al que le gusta vestirse de chica. ❥ nct...