•Barbara Palvin y tú• Famous in love•

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Estuvimos una hora practicando la melodía, Camila parecía fascinada viéndome tocar el piano, cualquiera diría que ella no sabe tocarlo.

-Lo haces estupendamente- Me miraba con una gran sonrisa.

-Todo es gracias a ti.

Decidí parar de tocar, las manos me dolían y ya había practicado demasiado, Camila decidió hacer un directo en instagram, empezó a llenarse ya que había más de quince mil personas queriendo saber lo que Camila hacía.

Me quedé mirando a Camila mientras ella leía los mensajes que le escribían, me tocaba mandar saludos a sus fans ya que ellas querían que yo las saludase  también.

-Nos están pidiendo que cantemos algo- Camila me miró.

-Yo puedo sujetar el móvil para que te vean cantar mejor.

Ella rió.

-Tú también saldrás en el live, agarra la guitarra.

-¿Estás segura de lo que haces? ¿Quieres perder fans.

-Sí, estoy segura de lo que hago, tú tocas la guitarra y yo canto.

Sabía que Camila iba a conseguir de mi lo que quisiera, me dirigí a coger la guitarra y me coloqué en el sofá al lado de Camila, Camila y yo nos miramos  antes de comenzara con su actuación.

Agradecí haber dado clases de guitarra en el colegio, me limité a seguir la partitura mientras Camila cantaba.

Cada minuto que pasaba habían dos mil personas más conectadas, Camila conseguía cosas increíbles.

Camila decidió cantar dos  canciones más y acabó el live, la gente le pedía que se quedase pero Camila se quedaba sin batería.

-Es la primera vez que estoy en un live con tanta gente.

-Nos han visto sesenta mil personas, choca- chocó su mano con la mía.

-Definidamente tienes un club de fans muy grande- Mi móvil empezó a llenarse de notificaciones, había muchísimas fans de Camila siguiéndome ahora a mi.

-Tus fans me están acosando- Le mostré el móvil.

Camila me quitó el móvil para hacernos un selfie, lo subió a instagram.

-Ya me lo agradecerás.

-Sí, ya te lo agradezco muchísimo.

Camila y yo nos mirábamos sin saber qué decir, por suerte recibimos un mensaje a la vez y tuvimos excusa para dejar de mirarnos, recibimos el mismo mensaje.

-Partido de baloncesto- me miró.

-Esta noche- Me quedé mirando el mensaje.

-¿Irás?- Me miró.

-Supongo que sí, ya acabamos aquí ¿no?

-Sí, claro aquí ya hemos acabado.

-¿Nos vemos en el partido?

-Claro, tengo que arreglarme pero sí, nos vemos en el partido.

Me levanté para recoger las fotos firmadas y el cd que Camila me había dado.

-¿Paso a recogerte?- La miré.

-Claro, claro que sí- tartamudeaba.

-Bueno, avísame a qué hora vengo a recogerte- me acerqué para darle un beso en forma de despedida.

-¿Podrás venir en dos horas a recogerme?

Asentí.

-Muchas gracias por todo, me ha encantado el directo de Instagram.

-Espera que te acompaño a la puerta.

Camila me llevó hasta el garaje, nos despedimos con un abrazo y salí en mi coche de aquella gigantesca casa.

Camila me había regalado su disco, puse su música en el coche y fui cantando las pocas canciones que me sabía a todo pulmón.

Cualquiera que me viese se pensaría que necesito ayuda psicológica o algo, pero ¿hay algo mejor que la cantante de moda sea tu compañera de trabajo? No, no lo hay.

Entré por la puerta, esperaba ver a alguien pero no ¿por qué nunca están en casa? Tenía la ilusión de ver la cara de Lily cuando viese que le había conseguido el disco con dedicatoria.

Decidí llenar la bañera, me lo había ganado, había practicado la melodía y había hecho las paces con Barbara ¿Ella irá al partido?

Me propuse  no pensar en Barbara, fui al baño a calentar la bañera, mientras caía el agua caliente me puse a buscar las sales de baño, no encontraba en mi armario ¿Nathan tendrá? Sí, Nathan tendrá.

Cerré con seguro y me empecé a desnudar, sólo se oía el agua chocando contra la superficie, me apetecía muchísimo meterme en la bañera y no salir de ahí durante horas, cuando la bañera estaba casi por la mitad decidí echar las sales de baño y meterme.

El agua estaba demasiado caliente, solté algún que otro gemido debido al agua ardiente, cerré el agua caliente y abrí el grifo azul, el agua se fue poniendo mejor en cuestión de segundos.

Aquí estaba y de aquí no me quería mover.

Eché la cabeza para atrás mientras disfrutaba de aquel baño, es difícil estar sola en esta casa, siempre está llena de gente, si no es para estudiar es porque están de fiesta.

Decidí agarrar el móvil, empecé a mirar las historias de instagram, quería saber dónde estaban metidos mis amigos, de una historia a otra  pasé a la de Barbara, Barbara estaba ahora mismo con una amiga, estoy casi segura de que no la veré.

Decidí ver sus fotos en instagram, la mayoría eran fotos ligera de ropa, no pude evitar sonrojarme al ver una foto de Barbara sin apenas ropa ¿cuánto le pagaran por tomarse fotos así?

Conforme iba bajando por su perfil, subía mi temperatura ¿debería dejar de mirar sus fotos o debería seguir mirándolas? Opté por lo segundo.

Cada foto era mejor que la anterior ¿esa chica me había besado? ¿De verdad que esto no es un sueño? Si es un sueño no me quiero despertar.

Solté un leve suspiro de alivio o de deseo.

Sentía una electricidad recorriendo por todo mi cuerpo cada vez que recordaba que Barbara me había besado.

Mi mano libre empezó a tocar todo mi cuerpo, el agua ayudaba demasiado, me quedé mirando fijamente la puerta ¿me escuchará alguien?intenté que no se me escuchase demasiado, no debería pero lo necesito.