•Barbara Palvin y tú• Famous in love•

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No paraba de mirarme en el espejo, tengo que ir arreglada pero tampoco tengo que ir tanto.

¿Debería quitarme la chaqueta? ¿Debería cambiármela? Me estaba poniendo de los nervios por una pizza con Barbara.

Me miré por penúltima vez en el espejo y decidí salir a pedir ayuda a mis compañeros de piso, un Nathan estudioso me miraba sorprendido.

-Estás muy guapa ¿dónde vas a ir?

-Se supone que tengo una cena.

-¿Cena formal? ¿Informal?

-Una pizza.

-¿Pizza formar o informal?- soltó una carcajada.

-Una pizza con Barbara Palvin.

-Vaya, yo también estaría así, si tuviese una cena con Barbara Palvin ¿qué te habrá visto?

Me acerqué a golpearle por lo que acababa de decir y él se defendió con un libro.

-Sigo sin saber que te vio Barbara Palvin.

-Nos estamos conociendo.

-Claro, claro.

-Bueno entonces ¿voy bien?

Nathan me echó un último vistazo.

-Estás espectacular.

-Muchas gracias.

Me despedí de Nathan, le mandé un mensaje a Barbara y salí a buscarla en mi coche.

El camino fue inquietante, odio ponerme tan nerviosa, sólo vamos a comer una pizza y ya.

Barbara me hizo entrar al parking de su hotel para que no la viesen entrando en mi coche ¿de verdad a alguien le interesa quien se sube a mi coche?

Barbara me dio un beso en la mejilla cuando me vio.

-Perdón si te he hecho esperar- Se colocaba el cinturón de seguridad mientras miraba al frente.

-No te preocupes, nunca había hecho esto y estoy emocionada de raptarte- reí.

-Esto es más normal de lo que crees, somos el centro de atención, tenemos que jugar con el despiste.

Yo asentí mientras me dirigía a la salida del parking.

-Por cierto estás guapísima- intentaba mirarla de reojo mientras seguía las indicaciones del gps.

-Tú también estás muy bien, me encanta tu chaqueta ¿de qué diseñador es?

-No es de ningún diseñador- La miré.

-En unas semanas estarás llevando ropa de versace, como yo- se señaló su vestido.

-Adoró tu vestido de versace, pero no creo que pueda entrar en ese vestido y mucho menos comprarlo.

-Prácticamente nada de lo que tengo es comprado, me lo dan las marcas para promocionarlo.

-Mañana mismo iré a versace a que me den ropa para promocionarla en mi instagram.

Reímos.

-Yo te puedo llevar a un evento de moda para darte a conocer.

-¿De verdad?

-Sí, pero no es aquí, es en Milán.

-¿Milán?

Barbara asentía.

-Milán ¿Italia?

-Claro ¿has estado en Italia?