26

3.7K 253 27
                                    

Después de que Barbara me echase de su habitación de hotel y me cancelase la comida, decidí mandarle un mensaje a Michelle, mi manager no me había dicho nada más pero sé que es bueno que nos vean juntas.

Decidí invitarla al restaurante donde me quería llevar a Barbara, Michelle no tardó en venir, se notaba que necesitaba mi ayuda para promocionarse, definitivamente te tenías que tirar a alguien para que te hagan caso en este mundo.

Salí del coche cuando vi a Michelle llegar al restaurante, iba muy guapa, a Michelle le quedaba todo bien, a las modelos les quedaba todo bien.

-Hola, pensé que no me llamarías- Me dio un beso en la mejilla.

Michelle se me acercó bastante diría yo.

-Quería comer fuera y digo voy a preguntarle si quiere comer conmigo- Mentí.

Michelle y yo decidimos entrar al restaurante, Michelle tenía su móvil fuera, estaba grabando la entrada del restaurante y me estaba grabando a mi, yo intentaba aparentar normalidad mientras ella me miraba con una sonrisa.

-Mi  manager no me había dicho nada pero me alegro que me hayas invitado a comer.

El camarero nos llevó a nuestra mesa, tenía el cartel de reservado, juraría no haber reservado pero supongo que me habrán reconocido de los carteles que hay por toda la ciudad con mi cara.

-Me pareces encantadora, comería contigo todos los días si fuese posible- sonreí.

Nos sentamos cada una en un lado de la mesa y nos quedamos mirando nerviosas sin saber qué decir.

-Eres un amor- Michelle rozó tímidamente sus dedos con mi mano derecha.

El camarero nos estaba mirando y no nos habíamos fijado, nos atendió todo lo rápido que pudo, lo bueno de ir a sitios tan caros es que la atención es rápida, lo malo es que te cuesta un ojo de la cara.

-¿En qué piensas?- Me miraba curiosa.

-En nada- Mentí.

-Mientes muy mal, por favor.

-Estaba pensando en los rápidos que son los camareros.

-¿De verdad?

-Sí- asentí con una sonrisa.

-¿Cómo llevas famous in love?

-Pues bastante bien, hoy he grabado otra vez, vamos nada nuevo y ¿tú? ¿Haces algo?

-Tuve una sesión de fotos el otro día, deberías darle like, esta en instagram.

-Me lo apunto- saqué el móvil para darle el like que ella quería.

-Oye ¿te gustaría venirte conmigo a un evento?

-¿Yo? ¿A un evento?

-Es un evento de moda, nos tomamos fotos las subimos a instagram, hacemos contactos y nos emborrachamos.

-Suena bastante bien.

Reímos.

El camarero nos trajo el primer plato y decidimos dejar de hablar para degustar el mangar de dioses que nos habían dado.

-Esta comida está tan deliciosa, me quiero casar con ella- señalé el plato.

Michelle se me quedó mirando mientras comía.

-¿Cuento contigo?- Me miró antes de meterse un ravioli a la boca.

-No sé qué día será pero sí, cuenta conmigo.

-Genial, te enviaré la dirección y todo lo demás en un mensaje.

Seguimos comiendo sin decir mucho más, la comida estaba tan rica que lo último en lo que pensaba era en hablar.

Hablé cuando la vi, Barbara estaba a nuestro lado mirándonos.

-¿Ya me has buscado sustituta?- Se acercó y elevó demasiado la voz.

Me limité a disfrutar de la escena de celos.

Michelle no sabía lo que pasaba pero estaba emocionada de tener a un ángel de victoria secrect's a su lado.

-Bárbara ¿no habías quedado?

-Sí, pero pensé que comerías sola, no que vendrías con la promoción hasta este restaurante- susurró

-Estamos promocionándonos ¿quieres?- le ofrecí un asiento.

Barbara me miró por última vez y decidió irse a la mesa del fondo, resulta que la estaban esperando para firmar un contrato y me había reconocido.

Michelle y yo nos miramos.

-No sabía que estabas saliendo con Barbara Palvin.

-Técnicamente no estamos saliendo, pero te voy a dar un consejo, nunca salgas con ella.

Reímos.

-No creo que tenga oportunidad.

Decidí agarrar mi copa para hacer un brindis con Michelle por el numerito que había hecho Barbara.

¿Estará celosa? ¿Por qué estará celosa? ¿Le gustaré? Me besa y me echa, normal no es.

Michelle se acabó yendo y yo decidí darle un último repaso a Barbara antes de irme al baño, el baño estaba tan limpio, tan perfecto.

Me quedé mirándome fijamente al espejo, abrí el grifo de agua fría y decidí lavarme las manos.

Vi por el reflejo del cristal como se abría la puerta y era nada más y nada menos que Barbara Palvin.

Intenté aguantarme la risa pero fue imposible.

-¿Tanto te costaba comer sola?

-Quería venir a este restaurante, tú me dijiste que no y yo necesito promoción.

-Esa parte lo entiendo y la veo bien, pero ¿por qué te tiene que mirar así?- Barbara se cruzó de brazos.

-No me mira de ninguna forma, te estás montando películas.

-Hazme caso, no te mira normal.

-Te haré caso, pero según tú ni Camila ni Michelle me miran normal, de verdad esas chicas son el mismísimo  demonio- Dije con ironía.

-Eres idiota- rió resignada.

-Soy lo que tú quieras ¿Quieres cenar?- La miré.

-Pizza estaría bien- se retocó los labios frente al espejo.

-¿Pizza? Las modelos coméis pizza.

-Sí, las modelos comemos pizza.

Me di un último repaso en el espejo y me acerqué a darle un beso, Barbara estaba más sorprendida que yo.

-Luego te veo, disfruta de tu reunión de negocios.

Salí de aquel baño sin mirarla, me quedé pensando en la puerta de aquel restaurante.

¿Será una cita? ¿Debería pedirle una cita? ¿Ella querrá una cita conmigo?

•Barbara Palvin y tú• Famous in love•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora