•Barbara Palvin y tú• Famous in love•

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Me sentía relajada gracias a la pastilla pero por otra parte me sentía muy mal por lo de anoche esa bailarina me tuvo que hacer algo, yo no soy así.

Aunque pensándolo bien, no me lo he pasado tan mal.

Sonreí.

La estilista tenía muchas ganas de preguntarme a qué se debía mi sonrisa pero no podía por el contrato, esperaba que esta noche terminara ya, no eran ni las 8 de la noche y ya sabía que llegaba tarde, Barbara no me había vuelto a llamar y era algo que agradecía, no sé como voy a mirarla a la cara.

Me quedé mirando las 6 llamadas perdidas suyas ¿debería llamarla?

Al que debería llamar tendría que ser a mi manager, maldito desgraciado.

La estilista terminó, yo me quedé sentada en aquel sillón de ese hotel, mi manager me había mandado a una habitación de hotel porque en mi casa no entran bien todos los estilista y demás.

Mañana mismo empezaré a buscarme una casa para mi y un coche nuevo, quiero el estilo de vida de Pablo, sin duda un gran descubrimiento.

Después de varias fotos promocionales me dejaron irme de aquella habitación, un coche me estaba esperando abajo para llevarme al evento pero antes teníamos que recoger a mi querida novia Diana Silvers.

En verdad estaba nerviosa por volver a ver a Diana, ella no tenía la culpa de que la obliguen a salir con una impresentable como yo.

El camino hacia el evento con Diana fue silencioso, ella me daba la mano buscando amor y yo sólo quería acostarme a recuperar mis horas de sueño.

-¿Estás bien?

-Sí, estoy muy cansada por el viaje.

-A la próxima me voy contigo, duermes muy poco.

-No sé si habrá una próxima pero a la siguiente te podrías venir- besé su mano.

Diana se quedó más tranquila después de ese beso.

Mis pulsaciones iban a mil, la pastilla ya no me hacía efecto y yo iba a ver a Barbara y se me iba a romper el corazón, le había vuelto a fallar.

Solté la mano de Diana hasta que me di cuenta hacia dónde iba y volví a cogérsela.

El coche se paró y nos miramos.

-Ya sabes el plan- la besé.

Diana y yo salimos cogidas de la mano mientras varios fotógrafos nos acechaban con los flashes, teníamos que fingir que éramos un noviazgo feliz.

Diana me besó delante de las cámaras, los fotógrafos habían pedido un beso más y se lo volvimos a dar.

Barbara apareció detrás de nosotras, no pude evitar sonreír al verla, estaba tan guapa como ese vestido negro ajustado.

Tenía pensamientos impuros con esa mujer.

Diana me estiró la mano y me llevó hacia los periodistas, juraría que ese no era el plan.

-Buenas noches, tenemos a una de las parejas de moda ¿qué tal?- nos acercó el micro.

Diana y yo nos miramos, dejé que Diana hablase por las dos.

-Buenas noches, estamos muy bien muy enamoradas- me besó.

-Acabáis de subir la temperatura con ese beso, _____ ¿cómo llevas grabar famous in love? ¿es muy duro?

-Buenas, grabar famous in love es un placer y todos los días estoy agradecida por haber conseguido ese maravilloso papel.

-Nos encantaría saber de quienes vais vestidas.

Barbara se acercó para saludarnos, nos abrazamos, la periodista se sorprendido al ver que Diana y Barbara también se abrazaban, los cámaras se giraron para fotografiar aquel momento.

-Me encanta que tanto la novia como la ex se lleven bien- sonreía la periodista ante la cámara.

Barbara y mi manager ya habían conseguido su objetivo, yo ya podía irme de ahí.

Había pocos momentos más incómodos que aquel, Diana me había hecho un gran favor al abrazarse con Barbara y a posar para la foto.

Decidimos acabar la entrevista y entramos las tres al maldito evento, estaba repleto de gente, todos tomándose fotos para Instagram.

Diana no me soltaba la mano y Barbara esperaba una explicación.

-Cariño ¿vamos a tomar algo?- me besó.

Barbara puso los ojos en blanco ante ese acto.

-Podrías ir a por dos bebidas mientras yo hablo con mi amiga- señalé a Barbara.

Diana resopló y se fue hacia la barra.

-Nena, anoche no me dio tiempo a coger el avión, lo siento muchísimo, te quise llamar pero sé que estabas modelando y no quería interrumpirte ni amargarte la noche.

-No te preocupes, la única que me amarga la noche es tu novia trastornada ¿qué hace besándote?

-Según ella es todo promoción.

-Tu novia es imbécil, se ha montado bien la película- se cruzó de brazos.

-Estás muy guapa cuando te pones así.

Quise besarla pero sabía que Diana nos estaba viendo desde lo lejos, si pudiese acercarse sin que nos enteraremos, se acercaría.

Diana regresó con dos copas y Barbara decidió irse, no sin antes decirme de vernos en el baño en media hora.

Miré el reloj de reojo mientras admirada su trasero, Diana se dio cuenta porque empezó a toser.

Me quedé mirándola.

-¿Se puede saber que mirabas?

-Mi reloj- señalé mi muñeca.

-No sabía que tu reloj procedía de Hungría.

Solté una carcajada mientras Diana se enervaba.

-Mi amor, ya sabes que Barbara y yo somos amigas- la besé.

-Bueno, ya está no hablemos más de esa ¿qué tal San Francisco? ¿Qué hiciste?

-Trabajar- tosí.

-¿Trabajaste todo el día?

-Sí, salí a correr un poco hasta que unas fans me reconocieron y tuve que salir corriendo y luego grabé el anuncio y me fui a descansar a mi hotel para el evento.

-Eso lo vi en tu instagram, se me hizo muy raro que no publicases nada durante más de 10 horas.

-Estaba durmiendo, pero ya dejemos de hablar de mi.

Diana se quedó más tranquila pero no se separó de mi en todo el evento, le dije que me iría pronto a casa porque mañana tenía que grabar y necesitaba descansar y gran parte de la historia era verdad.

Vi que era la hora de verme con Barbara, me escaqueé como pude y me fui al baño a ver a mi modelo favorita, Barbara tardó unos minutos en llegar pero no me importo.

Esperamos a quedarnos solas en aquel baño para abrazarnos, sus abrazos eran lo mejor de este mundo.

Nos dimos un beso corto y nos volvimos a abrazar.

-Diana es un infierno, yo te quiero a ti- la pegué a mi.

-Este mundo es una mierda, por eso no me quería fijar en ti- susurró.

-Ambas necesitamos una conversación real y no tiene que ser en un baño- señalé alrededor.