•Barbara Palvin y tú• Famous in love•

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No sabía si estaba en el cielo o en el infierno, cada gemido de ella era morir y no saber dónde había llegado a parar, demasiado sucio para ser el cielo y demasiado bueno para ser el infierno.

¿Me estaré muriendo y Dios me habrá hecho este favor?

Eché la cabeza para atrás mientras intentaba recuperar el aliento, tenía la garganta seca.

Tragué saliva mientras miraba el techo, es la primera vez que veía el techo del hotel, no era lo que me interesaba ahora mismo pero necesitaba recuperarme.

-¿Quieres agua?- Barbara me miraba mientras soltaba una carcajada.

-Por favor- solté desganada.

Barbara salió del jacuzzi llena de espuma, vi como agarraba la toalla blanca del hotel y se secaba, no quería mojar el suelo de la habitación y fue algo que agradecí.

Apareció con dos botellas del minibar.

-Muchas gracias- Agarré una botella.

Barbara me miraba desde el borde del jacuzzi, ella también tomaba agua pero no estaba tan cansada como yo.

¿Es normal cansarse tanto?

-¿Crees que vivirás?- soltaba divertida.

-Sí, dame unos minutos y me recupero- Me bebí toda la botella.

Barbara me ofreció de la suya y terminé por acabármela.

Barbara se quitó la toalla y volvió a meterse al jacuzzi.

-Hace frío ahí fuera- Barbara se abrazó para entrar en calor.

Notaba el frío, mi cuerpo estaba cansado de tanta espuma pero no quería decirlo.

-¿Cuándo es tu desfile?

-Desfilo mañana a las 8 de la noche, te pondré en la lista de invitados para la fiesta de después.

-¿Fiesta de después?

-Después del desfile hacen una fiesta para celebrarlo.

-Vamos, más promoción.

-Exacto, normalmente tengo un evento una vez a la semana ¿te pongo en la lista?

-Sí, me vendrá bien conocer gente europea.

-La mayoría son americanos que vienen al desfile.

-Vamos más idiotas de Hollywood.

-Sí, más idiotas de Hollywood- rió.

Barbara se colocó a mi lado, apoyó su cabeza en mi hombro.

-¿Por qué no te gusta Hollywood?

-¿A ti te gusta?- La intenté mirar.

-No, pero disimulo mejor que tú- Me besó.

-Este mundo está bien, es lo que sueña la mayoría ¿no?

-¿Pero?

-Pero la gente me persigue, todo el mundo quiere ser mi amigo y recibo propuestas indecentes todos los días.

-Bienvenida a mi mundo.

Le agarré la mano por debajo del agua, me sentía bien estando con ella, era difícil tener una conexión con alguien en tan pocas semanas pero ¿quién no tendría una conexión con Barbara Palvin?

-¿En que piensas?- Me dio un beso en el cuello.

-En la hora que será en USA.

-El cambio de hora es horrible eh.