23

3.6K 266 8
                                    

Me notaba acalorada, por suerte Camila me hizo esperar lo suficiente como para enfriarme en su puerta.

Camila salió guapísima, juraría que era un partido de baloncesto no una gala de música.

-Perdón por tardar, estaba dándome unos últimos retoques- Me abrazó.

-No te preocupes, necesitaba tomar un poco de aire fresco- Mentí.

Entramos en el coche, el cambio de temperatura era notable, empecé a conducir cuando ambas teníamos el cinturón puesto.

-Si quieres enciende la radio- La miré de reojo.

Ella encendió la radio, empezó a buscar emisoras hasta que se empezó a escuchar a Rihanna.

-¿Rihanna? Muy buena elección- reí.

-Iba a ponerte mi disco pero no quería parecer muy egocéntrica.

-Tú disco ya lo tengo en casa, muchas gracias por cierto.

-Me alegro de que le haya gustado a tu compañera de piso.

-¿Desde cuándo te gusta el baloncesto?

-No es un deporte que practique pero me gusta- Hizo gesto de tirar a canasta.

-Vamos que no te veremos  saliendo en la segunda parte- reí.

-No creo y ¿tú?

-Me gusta, jugaba en el instituto.

-Entonces a ti te veremos saliendo en la segunda parte.

-Pues posiblemente, si el contrato lo dice tendré que salir.

Camila se dedicó a cantar todas las canciones que sonaron en la radio durante el trayecto.

Tuvimos que esperar demasiado tiempo, habían muchísimos coches en el estadio y ninguno podía pasar

-Maldición.

-Esto es una mierda.

-Si quieres puedes bajarte y cuando consiga aparcar os busco ¿quién tiene las entrada?

-Las entradas nos las dan ahí mismo, así que me quedo contigo hasta que puedas aparcar.

Conseguimos aparcar diez minutos después de dar vueltas, Camila salió contenta de mi coche, para no gustarle el baloncesto parecía bastante feliz.

Tuvimos que parar demasiadas veces, paraban a Camila cada dos pasos para tomarse fotos con la gente, yo me limité a observarla, nadie me pidió una foto a mi.

Entramos por nuestra puerta, teníamos entradas en primera fila, Camila y yo nos pusimos juntas, el estadio se llenaba poco a poco, los demás fueron llegando uno por uno, todos habían sido parados para tomarse fotos.

Intenté no darle importancia, aunque me molestó un poco que nadie se fijase en mi.

Barbara llegó la última, consiguió mover a todo el grupo para sentarse a mi lado.

Nos miramos cómplices, mientras nadie entendía nada.

Salieron los jugadores de baloncesto, nos limitamos a aplaudir, nunca había conseguido estar en primera fila y era una sensación que quería volver a repetir.

Barbara puso su mano en mi pierna durante todo el partido, intenté no caer en sus redes, estábamos en un lugar público, lleno de cámaras y en primera fila, no había peor lugar en todo el estadio.

-¿Te gusta?- me susurró al oído.

-¿El partido?- La miré.

-Sí, el partido.

•Barbara Palvin y tú• Famous in love•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora