Cayendo en el Deseo

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"Al descubierto"

La tortilla esta riquisima, Héctor come igual de animado que yo, ambos absortos en nuestros pensamientos, mientras que contesta algunos correos bebe de su café.

-Bueno...- comenta posando sus ojos en mi - ¿vas a contarme porque creen que eres una infiltrada?

-Todo el mundo es sospechoso - me encojo de hombros quitándole importancia, ayer no debí hablar con él, no debería decir lo que pasa en la oficina y me fui de bocazas.

-Dulzura - a pesar de la palabra suena brusco - no soy un imbécil, se que fue algo fuerte para que estuvieras así, si no quieres contarme nada de la oficina, esta bien, pero cuentame ¿como se atrevió a acusarte? Para ello debe tener pruebas.

¡Maldición! Es demasiado perspicaz, cualquier detalle es de suma importancia, cualquier mujer estaría contenta de que su hombre analice misculosamente todo lo que le pasa, pero hoy es la excepción conmigo.

-Se que le das vueltas para no contarme, dilo ya - ordena. Sus ojos se entornan irritados.

Doy un largo suspiro, puedo hacerlo sin hablar de más.

-Ha visto una foto de nosotros dos en una revista - suelto bruscamente, frunce el ceño - en las mini vacaciones en nevada nos han fotografiado varias veces, de la mano, besando, tu sabes - me encojo de hombros, la he tomado de la oficina de Cromwell, mi compañero lo noto, no dijo nada.

-¿Porque no te delato?

-No sé, tal vez no sabia a que venia mi desesperación - soy un sorbo a mi zumo - espero que me fuera para urgar en mi oficina, descubrió la revista y la guardo, no se porque, me confronto y me acuso de conspiración.

-Entiendo - pasa su mano por su barbilla pensativo - ¿con que te chantajeo?

-¡Disculpa!

-Deja de hacerte la inocente, si no le ha dicho a Cromwell es porque no prende hacerlo...aún, pero te lo ha dicho a ti, ¿porque lo ha hecho? No creo que sea solo para asustarte, busca algo, Katia.

¡Maldita seas! Odio que se fije en detalles mínimos, lo odio.

-Nada, solo me lo ha dicho - finjo inocencia.

-No te creo, lo siento, pero ese cuento no me lo trago.

-No lo hagas - le dedico una mirada furiosa.

No puedo contarle que se acuesta con la novia de Crowell es demasiado....personal.

-Katia, no me ocultes nada - murmura serio.

-No ha pedido nada - suelto irritada - me he defendido y punto.

-Aún no pide nada - gruñe - pero estoy seguro que pedirá, y seguramente ya sabes.

-¿Saber? ¿De que estas hablando?

¿Que ronda en su cabeza?

-Pense que tenias mas intuición - masculla. Pasa su mano por su rostro. Esta molesto y ni siquiera sé ¿porque? - quiere acostarse contigo.

De mi boca brota una risita incrédula.

-Ríe todo lo que quieras, lo hará.

-¿Estas celoso? - canturreo en burla.

Rueda los ojos, una pequeña sonrisa asoma sus labios.

-Si, algo así.

Ya no esta molesto, más bien divertido. Su semblante cambia y se pone serio, su ojos oscuros me miran fijamente, su mano se alarga aferrándose a mi nuca, me da un beso fugaz.