W I N E

15.

Daniel me tomó del brazo para sacarme fuera del bar, reaccioné hasta que estaba afuera, hasta que el viento golpeó mi cara para sacarme del pequeño transe en el que me encontraba.

-_______ yo ... -miró al rededor.- yo ya no se que hacer yo...-suspiró.
-creí que yo...
-oh, eres guapísima, no hay duda pero...
-¿por qué no me habías dicho que eras gay?
-no quería que nadie lo supiera yo...aún temo lo que la gente dirá sobre mí
-¿por qué me invitabas tanto a salir? O ¿por qué me celas demasiado?
-te invitaba a salir porque eres su asistente y yo quería que te fijaras en alguien más que no fuera él y en realidad al que celaba era a Yoongi...-suspiró con desgano.
-Daniel, no me hubiera enojado esta situación en absoluto, porque te tengo cariño, pero me duele más la idea que tenias de enamorarme solamente para no fijarme en la persona que te gusta a ti eso es muy egoísta, se supone que eres mi amigo
-soy tu amigo -dio un paso hacia mí mientras se señalaba con su dedo índice.
-no, eso no hacen los amigos

Se quedó quieto, bajo esa cara triste yo no notaba arrepentimiento alguno y eso fue lo que estrujó más mi corazón. Entré al bar ignorando la idea de que Daniel viniera tras de mí.
Tomé mi bolso que dejé justo en la mesa donde estaban todos, incluyendo a Yoongi que me miraba con los ojos bien abiertos, supongo que notó mi rostro rojo y mi mueca de disgusto. Odiaba que me miraran como si fuese el centro de atención.

-_______...
-no  -aparte a Daniel que estaba justo a un lado de mí.
-por favor...
-basta. Lulú, no bebas demasiado, me tengo que ir -me despedí

Di la media vuelta dejando ahora si al cabizbajo de Daniel. Salí del bar mientras me cobijaba con mis brazos. No contaba que esto pasaría, no traje suéter por qué creí que Daniel me llevaría de vuelta a casa; ahora me las tenía que arreglar para volver a casa pues los taxis por ahí eran casi escasos y cuando pasaban iban ocupados.

-¡maldición!
-¿por qué maldices?

La voz de Yoongi me hizo dar un salto y cerrar los ojos. Ese hombre iba a terminar matándome enserio.

-¡no me asustes así!
-¿por qué maldices?
-¡por qué tengo frío!
-y ¿por eso estás enojada?
-por muchas cosas -trate de serenarme.
-¿tu novio te hizo enojar? -sonrío.

Lo miré casi para asesinarlo con la mirada. Ya, estoy harta, me iré caminando. Me di la media vuelta para avanzar pero la mano de Yoongi me detuvo.

-¿a dónde vas?
-a mi departamento -conteste con cara de fastidio.
-caminando llegarás hasta mañana y mañana tienes que trabajar
- JA
- Hablo enserio. Vamos, yo te llevo
- Ah, ¿tú me llevas?
- Si, ¿estas sorda?        

Yoongi comenzó a avanzar frente de mí hasta llegar a su auto color negro.

-Yoongi, no yo...iré en taxi
-solo sube