W I N E

70.

No sé cómo, pero yo ya me encontraba en el taxi con una tormenta en mi interior. El camino se me hizo eterno y las luces nocturnas desfilaban frente a mí, me pregunté si esto era lo correcto, pero la preocupación es mayor al recordar la voz de Jimin, alterada y preocupada ¿con qué voy a lidiar?

Bajo del taxi y miro el edificio frente a mis ojos; ese que alguna vez fue mi hogar.
El elevador es un trance y trato de tranquilizar mis nervios, llevo una semana y un día que no miro a Yoongi para nada, ni siquiera una llamada ni un mensaje, nada. De pronto las puertas se abren y salgo rápido; dudo en tocar y un estruendo me hace retroceder un paso.
Algo en mi interior me hace enloquecer, el pensar que le habrá pasado a Yoongi que lo puso así...

Los ladridos de Minholly también me estremecen, tal vez sería buena idea llamar a Jinyoung y...
La puerta se abre de golpe y un Jinyoung enojado y herido se queda en shock frente a mí, nuestras respiraciones suben y bajan a un mismo compás; mi mirada baja a su labio inferior y noto que está sangrando.

-Jinyoung...

Me ignora para pasarme de largo e irse lo más rápido posible, lo miro alejarse, sus pasos son largos y temo que deje de hablarme para siempre.

-_______

La voz de Jimin me hace verlo, en su rostro puedo notar ojeras y cansancio.

-qué bueno que has venido

Minholly corre a mis pies moviendo la cola y tirando ladridos, sonrío con nostalgia y lo tomo en mis brazos para adentrarme al departamento. De nuevo hay cosas tiradas en el suelo, cosas rotas...oh, Min Yoongi.

-está en su habitación, Jinyoung y él se volvieron locos hace un rato, perdón, no supe a quien más llamar para que lo tranquilizara
-está bien, ¿puedes cuidarme a Minholly?

Lo tomó en sus brazos y yo caminé a paso lento hasta la habitación, estaba cerrada. Tomo el pomo y giro lentamente hasta abrir la puerta por completo. Su espalda desnuda es lo que veo, está despeinado y parece buscar algo en su pequeño mueble, se gira al instante a verme.

-________

Un dolor en mi pecho se incrementa al ver sus heridas, tiene sangre en el labio inferior al igual que en el puente de la nariz y pómulo.

-¿qué pasa? -pregunté.

Se pone de pie en su lugar, estático , yo cierro la puerta tras de mí.

-¿por qué tu sala está hecha un desastre y tú estás sangrando?
-no te interesa

El silencio aparece en la habitación entre ambos, sabía que no duraría mucho tiempo sin soltar al verdadero él.
Baje la mirada hacia mis zapatos, no sé porque de repente me intimido su mirada.

-Jinyoung y yo tuvimos problemas-habló al fin.
-lo vi salir

Lo miré de nuevo con más confianza. Me debilitaba por completo este hombre, lo quiero demasiado pero no estamos bien.
Su cercanía me ponía más débil de lo normal, siempre lo he aclarado pero esta vez es diferente, es una debilidad aún más fuerte.
Sus brazos rodean mi cuerpo pequeño y me hacen pararme de puntitas, mis brazos lentamente abrazan su torso desnudo, estoy perdida y de repente siento que vuelvo a respirar.
Nos soltamos apenados segundos después que me parecieron eternos. Yoongi sonríe un poco al ver mi timidez, pero parece entenderme; entonces levanto la mirada y le toco su labio inferior con la yema de los dedos.

-¿te duele?

Asintió levemente y yo casi lloro de felicidad al verlo tan cerca de mí aunque soy consiente que es peligroso.

-vamos, voy a limpiarte

Abro la puerta y camino fuera de la habitación con Yoongi detrás. Jimin está sentado en el sofá con su celular y Minholly en su regazo

-Jimin, si quieres puedes irte, yo me encargo -dije amable.

Jimin mira a Yoongi y se levanta del sofá. Camina hacia la puerta y nos vuelve a lanzar una última mirada.

-_______, ¿quieres que te espere abajo para llevarte a casa?
-yo voy a llevarla, gracias por ofrecerte -Yoongi suena un tanto molesto.

Se fulminan con la mirada y Jimin vuelve a mirarme mientras yo asiento levemente.

Estamos solos en el cuarto de baño, Yoongi está sentado en la tapa del retrete mirándome atentamente mientras yo preparo la gasa con el alcohol.

-te va a arder un poco
-ya lo sé

Llevo la gasa a su labio inferior y lo veo hacer gestos de dolor, por instinto su mano sujeta mi brazo, sé que eso le ayuda a calmar el dolor; sus ojos vuelven a mirarme con anhelo, sus ojos tiernos de nuevo están sobre los míos y esa sensación de amor sobre mi pecho.

-te necesito conmigo otra vez