él volco mi vida

por fin el viaje

Por fin eran las 6 de la mañana y me tenia que levantar, pero como no había dormido en toda la noche de emoción estaba muy cansada pero aun así me levante, me duche con agua un poco fría para despejarme y me vestí. Mi madre me acompañaría al aeropuerto, de mi abuela, mi padre y mi hermano me había despedido antes de irnos a la cama y también de mi pequeño Pelayo que lo echaría mucho de menos. Recogimos a Enma y a su madre que iría también hasta el aeropuerto y allí nos despediríamos de ellas.

- (t/n) ¿llevas todo verdad?- mi madre como todas las demás madres en esta situación estaba preocupándose de todo, aun que hayamos repasado todo unas cinco veces.

- que siii mamá lo cogí todo y lo hemos revisado cinco veces... tranquila ma,  estaré bien.-intenté tranquilizarla.

- ¿ cogiste la tarjeta de crédito? ¿y el pasaporte?- de nuevo con las preguntas.

- si y si mamá, he cogido todo...- miré a Enma y a su madre y parecía que estaban como nosotras y de repente sonó una voz por los altavoces; " señores pasajeros con destino los Ángeles embarquen por la puerta 6 gracias"- ése es el nuestro mama,- la abracé- te llamaré todos los días y hablaremos por whatsapp todo lo que pueda, prometido.- le sonreí y ella asintió aun que las dos sabíamos que no lo iba a cumplir.

- vale esta bien... y estudia ¿vale mi niña? y pórtate bien y si tienes algún problema me llamas y te vuelves rápido ¿vale?

-por dios mama, que sii - le di unos cuantos besos y abrazos mas- me voy ya...- cogí mi maleta- ¿nos vamos Enma?

- ¡si! vamos, adiós mama te llamo ¿vale?- la abrazó y se besaron, era una imagen muy tierna-

-¡adiós! 

-¡nos vemos a la vuelta!- le gritamos Enma y yo, cruzando la puerta de embarque.

-¡adiós  y portaros bien!

-¡y llamar!.- la madre de Enma sabia igual de bien que la mía que no las íbamos a llamar todos los días por mucho que lo hubiéramos prometido.

Los gemelos  nos habían comprado billetes de primera clase, y allí estábamos Enma y yo que nunca habíamos viajado en avión, viajando en primera clase y con trece horas de viajé por delante, ambas esperábamos que no hubiera muchas turbulencias era el único miedo que teníamos.

Yo me pasé casi todo el viaje durmiendo y Enma no sé,  luego comimos algo durante el vuelo y vimos un par de pelis, el viaje era realmente largo.

Cuando aterrizamos eran las dos de la tarde y mientras recogimos las maletas de la cinta y buscamos un taxi y nos llevó a casa de los gemelos, se nos hicieron las 6 de la tarde y como no les habíamos dicho nada a los chicos no sabíamos si estaban en casa y estábamos muy cansadas para andar de allá para acá como para pensar en otro plan si no estaban en casa.

- mas les vale estar en casa porque estoy reventada y si no, te mato.- me miró con cara asesina y yo me reí

- tranquila que si no están, les esperamos y si no llegan los llamamos y ya está, no es tan complicado...- la miré rodando los ojos, Enma siempre tenia que tener todo controlado y cuando no era así se pone muy nerviosa y se vuelve loca.

- esta bien, entonces los mataré a ellos por hacernos esperar,- yo me reí y Enma se encogió de hombros.- necesito matar a alguien.

- ¡esta es la casa!¡pare!- le grité al taxista y paró, le pagamos y nos bajamos; la casa era genial, increíble. - es aquí...

- ¿a que esperas? vamos a entrar, tengo muchas ganas de ver a Bill...- Enma se puso a andar hacia la puerta pero yo la agarré del brazo y la frené.

-que te parece si tocamos el timbre y nos escondemos y cuando salgan, si están claro... aparecemos de repente y gritamos ¡sorpresa! ¿lo hacemos?- Enma me miraba no muy convencida

- esta bien...- ahora estaba aun menos convencida pero lo hicimos, nos escondimos con las maletas detrás de un arbusto, Enma tocó el timbre y volvió corriendo detrás del arbusto.

- ¡ves! no están...-tardaban mucho en abrí, igual de verdad que no estaban y estábamos haciendo el idiota.

- que ansias eres... espera un poco igual están ocup...- en ese momento escuchamos la puerta abrirse y nos callamos.

- ¿hola?? ¿hay alguien ahí?

- una, dos, y.... tres- contamos las dos a la vez con los dedos y salimos de  detrás del arbusto.

-¡SORPRESA!- dijimos las dos a la vez, era Bill quien abrió la puerta pero al pobre en vez de una sorpresa le habíamos dado un susto

- aaaaaaaaaaaaaah- cayó al suelo del susto.

- ¡BILL!- corrió a levantarlo y yo no me paraba de reír- ¿estas bien?.

- ¡enma!- la abrazó y le dio un gran beso en los labios-ahora mucho mejor...- la volvió a besar, sin percatarse de mi presencia.

- a ver... ¡chicos!.- pasaban de mi.- que yo también quiero mi beso de bienvenida...¡Bill! ¿donde esta Tom?- sin apartarla vista de Enma me respondió.

- arriba en su cuarto subes las escaleras y la tercera puerta a la izquierda...

-  cuando entréis no os olvidéis de las maletas ¿ok?.- los dos asintieron sin mirarme y yo entré mirando lo bonita que era esa casa,seguramente abría sido decorada por Bill;  por fin llegue a la puerta de la habitación de Tom, iba a entrar pero le escuché  hablar con alguien y sé que escuchar las conversaciones ajenas es de mala educación pero no lo pude evitar.

- ¡que me dejes en paz!  que ya estoy con alguien.....puff que pesada eres... ¡no! no quiero verte ni para hablar ni para nada... ¡adiós!- se le notaba muy enfadado, no se si seria muy buena idea entrar ahora pero tenia muchas ganas de verlo y no me pude resistir y toqué a la puerta.

- Bill puedes entrar ¿porqué llamas a la puerta si tú nunca llamas?

- y si no soy Bill ¿puedo entrar igual? - estaba recogiendo su ropa y no se percató de mi presencia y eso me molesto.

- todas las chicas pueden entrar a mi cuarto así que pasa...- cerré la puerta con un pequeño portazo para que me mirara

- así que...¿todas no?- sonreí cuando me miró.

- ¡(T/N)! -  fui corriendo hacía él y lo tiré al suelo y lo besé con muchas ganas- veo que te alegras de verme...

- y yo veo que tu a mi no mucho por lo que oí antes de entrar- y le volví a besar porqué en ese momento me daba igual con quien estuviera hablando solo quería besarle.

- no era nadie para mí... y me alegro mucho de que estés aquí- me besó- pero podías haber avisado- me besó de nuevo.

-ya me da igual quien era porque ahora estoy yo aquí - ahora fui yo quien le besé- y no avisamos por que era una sorpresa- noté algo debajo de mi.

-  ¿ves como me alegró de verte?- 

- tom no te lo tomes mal pero estoy muy cansada del viaje...- me miró triste- lo siento tom pero si no fuera por las ganas que tenía de verte ya estuviera durmiendo en cualquier lado...- nos reímos.

-tom: está bien...- me quitó de encima- pero mañana no te libras de mi- me ayudó a levantarme. -me alegra mucho que estés aquí te echaba mucho de menos...- esta vez me abrazó apretándome contra su pecho.

-(t/n): yo también peque.- lo abracé, tenia muchas ganas de abrazarlo y besarle y de estar con él...