Cuando los vio a los ojos no reflejaban la mirada de un niño, parecían muertos por dentro. Fue la primera vez que se rebeló en contra de su marido cuando este le prohibió que los volviera a contactar. Si alguna vez habían peleado no lo sabía, lo que a ella le importaba era el bienestar de los chicos. Escarina no dejó que Adam la tocara hasta que le permitiera visitarlos y hablar con ellos. Lentamente se ganó su confianza y se horrorizó cuando descubrió que apenas y sabían leer.Estaba consciente de que esos niños eran soldados y que la milicia de zaibach generalmente compraba los niños a los padres que no podían mantener, acogían niños abandonados, huérfanos y de la calle. Pero el que fueran niños no deseados no significaba que no mereciera nunca trato digno.
Fue la primera batalla que ganó y una rara Victoria contra su egoísta marido el cual no cambiaría los métodos inhumanos.
Lo triste era que eran muchos más niños cuando los vio por primera vez, ni siquiera jerjez le respondía cuando preguntaba por los niños faltantes… pero ella sabía que no volvería a ver a esos muchachitos. Al final solo quedaban 16… y notó que le faltaba 1. Se preocupó de inmediato.
- ¿Dónde está Miguel?- le preguntó escarina a jerjez el perro le dedicó una falsa sonrisa tranquilizadora.
- me pareció raro que no preguntara… Se lastimó el brazo entrenando esta mañana, le dije que las espadas no eran un juguete pero no hizo caso… si lo busca sigue en la enfermería.- escarina le agradeció y se levantó de la silla, sin ceremonias se despidió de los chicos con un grito diciéndoles adiós y Chester le siguió el paso mientras salían de el gimnasio.
Los chicos parecieron aflojar en el entrenamiento y jerjez les gritó una sarta de groserías haciendo que los chicos recuperarán el nivel de esfuerzo.
Escarina casi corrió por el estrecho pasillo, la rubia de ojos verdes odiaba ese pasillo porque sabía la cantidad de cuartos y lo que se escondía detrás de ellos. Sabía que el vone no era un buen lugar, también sabía que estaba atrapada en ese lugar. Tragándose los nervios llegó a la supuesta enfermería y abrió la puerta. Era un enorme corredor con mínimo 20 camas vacías con una cortina blanca que separaba una cama de otra. años atrás estaban ocupadas por muchos niños que se desvanecieron en el viento. Adam negaba que esos chicos existieran pero ella misma los cargo y les contó historias antes de dormir, a estas alturas a veces pensaba que estaba loca ya que incluso Kuaru la miraba con lastima y la trataban de convencer de que lo había imaginado. El hombre al que llamaban hechicero se inclinó sobre ella y le susurró a su oído.
“Mi señora… le pido que se olvide de ellos, es por su propio bien…” kuaru nunca bromeaba y de los 4 hechiceros era el más humano y humanista de todos ellos… incluso más que Adam quien ni siquiera trataba a esos muchachos cómo humanos.
Escarina camino por el centro de el pasillo y miró cama por cama hasta que al final de el pasillo encontró a quien buscaba. Miraba la pared con los mismos ojos muertos de la primera vez que lo vio. “Desesperanza” pensó escarina.
- ... Miguel- el muchacho pareció estremecerse al escuchar su nombre y reconocer la voz. El chico se giró a verla y sus ojos volvieron a brillar con vida.
- Mi señora… pensé que ya no la volvería a ver.- escarina se paró a su lado y peino su cabello alborotado y lo reviso, tenía el brazo muy mal vendado y tenía manchas de sangre, no llevaba una bata limpia sino el uniforme de entrenamiento azul que todos usaban y olía a sudor rancio.
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"LOS HIJOS DE LA LUNA"
Fantasy¿fue todo un sueño o una ilusión?, a veces quisiera que así fuera, pero cada vez que miro hacia atrás me doy cuenta de lo egoísta e inmadura que fui. lo extraño y en "él" veo siempre su reflejo, pero tome mi decisión... y la de ellos. ...