Cambio de vida por un mordisco

#21.

     " Capitulo anterior "

     

     Rex - Mira Logan... una noria. Quiero subir...

     

     " Continúa... "

     "Pov ____"

     Tras desayunar con mi hermano, mis amigos y yo subimos en el coche de Kendall para ir a pasar un día como auténticos niños pequeños... ¡Al parque de atracciones! gritábamos los cuatro. Llegamos enseguida y tras aparcar y entrar decidimos subir a la noria. En la cola que había vi delante nuestro a alguien que se me hizo conocido aunque no sabía de que. Llegó nuestro turno y Kendo subió conmigo y Carlos insistió en subir con Hazel. El tonto de Kendall empezó a mover la cesta lo que me dio bastante miedo... siempre me he preguntado ¿qué demonios hago yo con estos dos temerarios si soy una persona tan asustadiza? pero supongo que será el destino. Me agarré como pude en uno de los palos de hierro que rodeaba la atracción, me hubiera puesto a chillar como una posesa pero sabía que eso llamaría demasiado la atención y yo prefería pasar desapercibida. Carlos y Hazel copiaron el acto de mi acompañante y aquello se movía sin parar, parecía que íbamos a caer al vacío... entonces lo vi... varias cápsulas adelante estaba él, el chico con el que soñé esa noche. Sin poder evitarlo grité su nombre ¡Logan! y él se giró y me miró con esa dulce sonrisa que me había deslumbrado la noche anterior. Ya todo el trayecto estuvimos los dos con la mirada fija uno en el otro, ya ni la broma de Kendall de mover la cesta me afectaba. Aquella profunda mirada parecía que me atravesara, como si pudiera averiguar lo que estaba pensando sonrió y así dio por finalizada la atracción. Desapareció de repente de mi vista ¿cómo podía ser así? sólo aparté mi mirada para desabrocharme el cinturón de seguridad y no había rastro de él... ¿habría sido mi imaginación que me jugó una mala pasada? Estaba tan absorta con mis pensamientos que no me percaté que Kendo me hablaba, hasta que gritó mi nombre.

     Kendall - ¡____! ¿se puede saber dónde estaba tu mente que no me escuchas?

     - Ay perdona Kendo, creo que aún estoy asustada por el viaje que me diste... - en cierta manera no mentía, pero mi mente estaba junto a mi vista buscando al chico de mi sueño.

     Kendall - Ya ya... claro... ¿y seguro que no tiene nada que ver el chico al que llamaste con un grito allí arriba verdad? - así que no fue mi imaginación, en realidad si estuvo allí lo que había desaparecido como por arte de magia - ¿quién era? te conozco prácticamente desde siempre y yo a él no lo conozco... ¿acaso tienes una vida secreta que Hazel y yo desconocemos?

     - No digas tonterías Kendo, creo que el viaje en noria te afectó más que nada... - intenté eludir la pregunta y hacer como si fueran imaginaciones suyas - ¡venga chicos! ¿dónde vamos ahora?

     Hazel - Yo quiero subir al tren de los enamorados - dijo ruborizada mirando de reojo a Carlos que la miraba de igual manera, ambos algo ruborizados.

     Kendall - ____, creo que la perdimos para siempre - me susurró al oído de manera divertida.

     - Jajaj, me parece bien... pero yo no pienso subir a esa atracción con Kendo. Si os parece bien os esperamos fuera...