Los cristales rotos cayendo al suelo son solo la primera parte de los sonidos desastrosos de la trágica sinfonía compuesta por Ian Laurent, borracho hasta los huesos lleno de y celos contra Caleb Blacke bolsa de huesos de sinceridad que aún se recupera tendido en una hostil cama de pequeños trozos de vidrios que, quiero creer, están incrustados en su finísimo traje.
Todo es tan de pronto que me cuesta reaccionar. La situación toma un giro que me cuesta admitir se me hace familiar. Caos, peligro y destrucción un clásico y repetitivo primer inicio de una pelea entre Caleb e Ian.
Pero ¡Hey! Yo quise ser parte de todo esto y es bastante tarde para dar marcha atrás y huir como hubiese hecho en el pasado. Así que Gia Steel afrontarlo con ovarios.
Voy hasta Caleb, me siento junto a él e inspeccionó su rostro en busca de alguna herida o corte grave pero solo encuentro un minúsculo rasguño a un lado de su ceja del que se desprende un pequeño hilo de sangre. Está aturdido, es la primera vez que lo siento débil, estoy segura que algo anda mal con él porque es fuerte y nunca se había demorado tanto en recuperarse de los violentos ataques de Ian.
Oh Ian.
Justo ahora me ves pero al hacerlo no encuentro nada en ti que se me haga familiar, es como si nuestra maravillosa conexión se hubiese roto justo en el instante que decidiste comportarte como un idiota.
-¿Qué te pasa Ian?-Encaro con furia sin despegarme de Caleb que balbucea las mil maneras de muerte que tiene planeadas para Ian después de esto. Me hago creer que solo está delirando por el alcohol en su sistema.
Ian por su lado me ignora y a los diez o veinte espectadores alrededor murmurando sobre nuestro show.
-¡Responde Ian!-Exijo. Y en lugar de escuchar una respuesta, escucho de nuevo el sonido de los trocitos de vidrio moviéndose es Caleb que ha logrado reincorporarse sobre sus brazos. Al verme junto a él, pone su mano sobre la mía.
-Eso es Steel.-Susurra presionando mi mano.-Pero se defenderme solo.-Aclara y se pone de pie tambaleándose. Me levanto con el cuidando que no caiga.-¡¿Y ustedes qué miran?!-Grita y tira un vaso que explota contra el piso ahuyentando a algunos de los curiosos. Los más valientes retroceden pero se quedan a observar el nuevo escándalo de los niños problemáticos de la escuela, porque ¿Que sería de los estudiantes de Wolftein sin la comidilla del pueblo? Les temen pero los necesitan.
Entre los mirones trato de encontrar a Nathan, Luke, Liam, Tayler o Ayden pero ningún rostro conocido está presente y solo ellos son los únicos capaces de interceder.
-¿Qué quieres ahora Laurent?-Caleb se suelta de mi agarre y camina lo suficiente para estar cerca de Ian.
-Matarte.-Cierra los puños y enfrenta a Caleb cara a cara.
-He oído eso antes...-Hace una pausa.-De hecho muchas veces.-Reta Caleb pero esto solo irrita a Ian que lo toma por la camisa y lo acerca lo suficiente a él.
-Hagámoslo realidad.-Lo suelta con desprecio, Caleb retrocede un poco pero al volver impacta a Ian con un derechazo que cae en su mejilla haciendo que pierda el control de su cuerpo y caiga. Ian a diferencia de Caleb sólo tarda segundos en recuperarse y lanzarse contra Caleb a golpearlo, es como si su ira superará el dolor.
Desesperada me acerco hasta Ian y trato de detenerlo pero no funciona está ciego y sordo, no es él. Y Caleb luce tan débil y frágil con cada golpe comienzo a tener miedo de que el siguiente sea el definitivo. Rápidamente el pánico vuelve a mí, me acerco a los que miran con lágrimas en los ojos rogando ayuda para detenerlos o Ian terminará matandolo a golpes pero nadie me hace caso, todos observan y retroceden con expresiones de horror y no hacen nada para detenerlos.
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El pacto del amor y el poder
FantasyEn un pequeño pueblo casi perdido en el mapa viven dos familias dueños de una eterna rivalidad; los Blacke y los Laurent, familias respetadas en el pueblo con solo una cosa en común los Petterson, la familia más misteriosa según los habitantes. ¿So...