Capítulo 48

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(POV Val):

Kiara se mantuvo unos segundos quieta en donde estaba, pero poco después comenzó a acercarse lentamente.

Con el rabillo del ojo observé las reacciones de Axel y Max. Ambos mantenían una expresión neutra en sus rostros, lo que en cierta forma me alivió.

—¿Acaso sabes dónde está mi hija? —preguntó Sara luego de un rato de silencio. La pelimorado asintió.

—Sé donde está ella y las demás —contestó, a lo que la entrenadora suspiró aliviada—. Pero para poder sacarlas de ahí tendrán que seguir todas mis indicaciones.

—¿Es esto otra trampa? —le preguntó Axel manteniendo la distancia. La chica le sostuvo la mirada durante unos segundos para luego contestar:

—No, esta vez deben creerme.

—¿Cómo podemos volver a creer en ti si ya nos mentiste? —le replicó el pelicrema con cierto enojo en su tono de voz. Al parecer esto le ha afectado más de lo que creí, pero todavía veo cierto sentimiento reflejado en sus marrones ojos. Por lo menos no la ha llamado traidora... Ella quedaría muy afectada si escuchara esa palabra salir de la boca del chico.

—Estoy diciendo la verdad, yo...

—Es cierto lo que dice, puedo percibirlo —dije, a lo que mi hermana me miró agradecida—. Eso sí, hay que escuchar sus indicaciones para ver si las seguimos o no —a pesar de saber que ella no mentía, no podía permitirme creerle al 100%.

—Habla, nosotros te escuchamos —dijo el entrenador Travis.

—Bien, ellas están en la sede de la AFFI —comenzó—. Dudo que puedan salir de ahí sin ayuda, por lo que necesito que ustedes hagan presencia en la sede mañana por la mañana...

—¿Y por qué no ahora? —preguntó Mark.

—Porque ya es muy tarde y el lugar está cerrado. Si llegan a ir ahora podría resultar sospechoso —le contestó con neutralidad—. Lo mejor es que vayan todos juntos, puede que se logre mejor resultado a que si va una sola persona. Ahí tan sólo deben preguntar por las jugadoras y las recepcionistas estarán obligadas a darles información...

—¿Es otro plan de nuestra madre? —le pregunté. Sabía que ella quería llevar a cabo un plan para llevarse a todas las jugadoras pertenecientes a la AFF a Austria, donde podría realizar sus experimentos alejada de la policía japonesa.

—Sí, pero ese no es el punto —dijo mirando de soslayo—. Cuiden sus palabras cuando estén allá, que una mala jugada puede terminar muy mal, y procuren preguntar lo justo y necesario, no de más ni de menos. Todo esto puede llevar a que liberen a las chicas...

—¿A caso están en una especie de cautiverio? —preguntó Nathan. Kiara asintió.

—Si siguen estos pasos obtendrán buenos resultados —luego, antes de irse, agregó—: Ah, y no digan que yo les hablé sobre todo esto.

—Espera —Max la detuvo—. ¿Vas a volver con nosotros? —la chica se giró una vez más, con sus ojos brillando de tristeza y luego se fue rápidamente, sin contestar la pregunta que el rubio le había hecho.

—Mañana por la mañana... —murmuré observando por donde mi hermana se había ido.

—¿Están seguros de esto? Porque si no, tan sólo podemos esperar a que las chicas vuelvan por sí solas —dijo Caleb mientras se estiraba.

—Dudo que vuelvan por sí solas —le dije observándolo. Ni se inmutó al escuchar todas las bombas que fueron lanzadas hoy, pero supongo que no le debe de importar si actúa así—. Creo conocer el plan de mi madre, pero me extraña que no haya solicitado mi presencia... 

Unidos Jamás Seremos Vencidos - (Inazuma Eleven)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora