Confesiones de un corazón juvenil

Fingir

El título es muy diciente, depende de quien lo lea. Porque desde la perspectiva de que lo haga dependerá el significado que tenga.

Yo voy a explicar los más importantes.

Para empezar, quiero disculparme con todos los que me han visto fingir. Fingir que tengo todo arreglado, que todo está bien, que soy la calificación más alta e incluso superior a esa. Nunca fue intencional, o no con la intención de engañar a nadie, es solo que siempre fue más fácil que lidiar con lo que pasaba en ese momento. Siempre fue más sencillo que pensar en sobre que pasaba y más aún, en como enfrentarlo.
Tampoco quise hacerles crees que era algo superior, que era un 11 cuando realmente soy más un 8.5, pero es que si yo no creo que soy algo, ¿Quien más lo va a pensar?

Perdón por fingir que no me importa cuando me mata por dentro, realmente no quería ser una carga, ni ser más intensa, ya es suficiente.

Y si, ahora debo seguir fingiendo.
Por mí bien y por el de todos, o al menos por mi tranquilidad y la de la mayoría, pues descubrí que la gente está mejor cuando tú estás bien.
Tengo que fingir que no me importa, que la expectativa que me dió después no duele, que ser su amiga es un placer y no una cruz, que me vuelve loca con solo escribir y no tiene ni idea, que entiendo su proceso y que no espero que me entienda o sea dulce o de un día a otro descubra que soy lo que quiere en su vida y yo siga disponible para hacer parte de esto.

Lo único que no tengo que fingir realmente es que finjo todo el tiempo.