Tú eres mi religión

Capítulo 1

Amira. 1 de Octubre a las 8.30am.
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Coloco mi velo cubriendo mi cabello, la bebé comienza a llorar suplicandome el biberón y camino veloz hacia ella.
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-Ya mi pequeña. -digo poniendo su chupete.
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Ella pasa de llorar gritando a lloriquear levemente, le doy su biberón y la acuesto en su lujosa cuna.
Voy hacia la cocina, mi esposo sonrie al verme y agarra mis manos observandome.
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-Eres hermosa. -alaga.
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Sonrio, me besa y desliza sus manos por mi cuerpo.
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-Más le vale a tu jefe tratarte bien, se las verá conmigo y tú lo vas a pagar. -amenaza.
-No pasará nada, habibi. -digo segura.
-Debo trabajar todo el día en la comisaría. -anuncia.
-De acuerdo. -digo.
-Espero que a tu jefe no se le ocurra nada fuera de lo normal. -dice nervioso.
-No, tranquilo. -digo.
-Cuidado con lo que le haces a Nasira. -amenaza.
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Agarra mi brazo muy fuerte, aparto la mirada dolorida y me empuja levemente.
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-Venga, corre a trabajar. -dice serio.
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Salgo de ahí, camino hacia la lujosa casa del señor, la brisa del mar choca con mi rostro moviendo mi velo junto mi vestuario, miro hacia el horizonte frenandome un instante y recuerdo las palabras de mi madre "te casas con él porque mereces la buena vida que tu padre me dió y él te la va a dar"
Abro la puerta ya que soy la única persona ajena con llaves, cierro lentamente para no hacer ruido y comienzo a hacerle el desayuno de cada mañana.
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-Necesito que tenga todo el exterior impoluto antes de irse. -ordena entrando en la cocina.
-Si. -digo tímida.
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Acabo su desayuno, se lo llevo a la mesa sin mirarle mientras él ve la televisión, salgo al jardín y suspiro al ver todo lo que debo recoger.
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-¿Qué le habrá pasado para que quiera esto tan limpio? -pienso murmurando...