Amira. 15 de Noviembre a las 10.00am
°
Aira me abraza muy fuerte, nos sentamos en la terraza de la cafetería y tras pedir agarra mis manos.
~
-¿Todo se solucionó? -pregunta.
-Sí. -bajo la cabeza.
-Estas así porque no te gusta ese trabajo. -supone.
-No me gusta, pero mi miedo es que le suceda algo. -digo.
-Jesus sabe cuidarse, lleva años en esto y Daniel trabaja en la policía, lo encubrirá tanto como pueda pues pese a todo es su hermano. -dice intentando relajarme.
~
Me ponen el café, bebo de este y suspiro con un leve dolor de cabeza.
~
-Parece que te llevas bien con Eva. -rie ella.
-No le entra en la cabeza que sea musulmana. -comento.
-No eres la única, cuando Daniel me presentó se creia que era prostituta, casi me arrasta a mi ginecólogo. -dice haciendome reir.
~
Acabamos de desayunar, compramos varias cosas tanto de ropa como frutas y verduras. Conduce hasta su casa, entramos y nos sentamos en su sofá.
~
-Te noto extraña. -toca mi frente.
-No, fiebre no tengo pero nose, me siento mal, unas nauseas y un mareo que no son normales. -digo.
-Tranquila, llevas mucho estrés encima, la cena, el trabajo de Jesús, la pequeña.... -dice acariciando mi cabello.
~
La puerta se abre dejando ver a Jesus y Daniel riendo, ambos sonrien al vernos juntas y mi hombre me besa de una manera lenta.
~
-¿Reconciliación de hermanos? -pregunta Aira.
-Calla nena. -rie Daniel besandola.
~
Jesus se sienta junto a mi pasando su brazo por mi hombro a la vez que Daniel se sienta en un sillón y comenzamos a hablar animadamente.
~
-Mamá tampoco me habla. -dice Dani.
-¿Tampoco? -pregunto.
-Volvemos a lo mismo, no quiere ver a sus hijos con mujeres, conmigo estaba segura que era prostituta y a ti te tiene fichada al ser musulmana. -explica.
-Nena, es mi madre. -dice Daniel.
-No la he insultado pero Daniel. -reimos.
~
Un mensaje llega a mi telefono haciendo que todo se vuelva negro "soy el abogado de su padre, ha fallecido y debe venir a firmar la herencia"...
ESTÁS LEYENDO
Tú eres mi religión
FanficUna sencilla mujer musulmana con mucho peso en su espalda ya que tuvo que aceptar las decisiones que su madre dió. Casada con un hombre que la odia pues ama a su otra esposa, cuidando de un bebé que no es suyo... Bebé que siente como suyo y, para co...