Narra Niall:
Ese martes por la mañana, salí de casa para irme sin mamá quien no paraba de llorar junto a Dan.
Antes de salir por la puerta de casa, la abracé fuertemente y quedamos así por minutos, pero tuve que empujarla.-Te llamaré- dije- Todas las noches…- dije soltándola ya que si no, no me soltaría nunca más.
-Lo siento- dijo llorando- Nunca quise esto solo… Solo quería que acabaras con esa etapa- dijo llorando y me encogí de hombros.
-Volveré- le dije besando su frente y me agache para quedar a la altura de Dan quien me abrazó.
-No quiero que te vayas- dijo sin soltarme- Tienes que enseñarme muchas cosas- dijo y asentí.
-Te las enseñaré tonto- dije sacudiendo su cabello mientras me levantaba.
Salí caminando por la puerta de casa, con el corazón partido en dos, con mis cómodos pantalones de batalla verdes y esas botas pesadas junto a una remera blanca de algodón y un bolso colgando de mi hombro derecho. Tomé un taxi al cuartel principal donde allí, estaban todos mis compañeros y sus familiares. Faltaban diez minutos para que despegue el avión y allí, también estaba ________ junto a su familia quien al verme, corrió a abrazarme colgándose de mi cuello.
-No te vayas- pidió mientras yo acurrucaba mi nariz en su blusa, inhalando ese delicioso aroma suyo, tan característico que me hacía sentir cómodo.
-Volveré- dije en un hilo de voz- Te amo- reiteré besando su cuello- Te amo, te amo, te amo…- dije y me separé un poco de ella, mirando que llevaba ese collar de estrellas.
-No digas eso- dijo tomando mis labios con sus manos- Si dices eso, es como un adiós y tu no te irás…- dijo llorando y me partía en dos, ver su rostro arrugado de llorar y sus ojos hinchados de soltar lágrimas- Podría esperar para siempre- dijo volviendo a abrazarme, como si pudiese atravesarme. Luego, una vez que nos soltamos, fui a saludar a su familia quienes me miraban apenados.
-Hola- dije con una sonrisa y le tendí la mano al predicador quien me dio un fuerte apretón en gesto de respeto, luego, me diriguí a su madre quien enseguida me abrazó y le contesté el abrazo.
-Niall- dijo mirándome desde su altura- No eres como mi marido dijo una vez- dijo soltando lágrimas- aun puedo ver a ese niño que salía corriendo junto a Fred en tus ojos- dijo tomando mi rostro y metió su mano en su bolsillo- Que la paz esté contigo… Dios te bendiga hijo- dijo poniéndome un collar rosario en mi cuello- Es de plata…- dijo mientras lo miraba- Iba a ser para _____ cuando se case pero…- dijo riendo con lágrimas en los ojos- Tu quédatela…
-Gracias- dije con una sonrisa ya que no sabía que más decir. Luego, miré a Fred quien había estado llorando y me sonrió dándome un abrazó.
-No olvidaré que fuiste mi mejor amigo- dijo en el abrazo cuando un silbato sonó.
-¡Todos al avión! ¡Ahora!- gritó el coronel del equipo así que me separé de él y me dirigí a ________ a quién abracé y besé sin importarme que su familia esté ahí, sin importarme que tan desesperado parecía intentando de nunca separar nuestros labios, sin importarme nada, yo no quería perderla.
-Niall- dijo separándose de mi mientras yo caminaba hacia el avión- Espera- dijo y me tendió un pañuelo de tela- Para que me recuerdes- dijo.
-Intentaré llamarte- dije mientras le sonreí y besé su frente para luego salir corriendo al avión junto a Tim quien me estaba esperando.
Una vez arriba, estábamos sentados enfrentados, unos con otros esperando a llegar al destino, pues aún teníamos unas largas horas y yo me senté junto a Tim y conversamos al principio pero luego, comencé a pensar y cerré mis ojos para descansar un poco pero era imposible, lo único que venía a mi mente, eran las miles de cosas malas que hice pero luego, intenté de no pensar en eso y apareció la imagen de aquel día que iba a disculparme con ________ y lanzaron una piedra de afuera, observándola como salió del baño molesta con sus ojos llenos de lágrimas, luego, las detenciones, sus respuestas tan infantiles e inteligentes a la vez… Aquel primer beso suyo que tanto me dolió ya que me mordió la lengua. Luego, vino a mi mente Dan, su risa, nosotros dos jugando al baloncesto, riendo… Todas esas imágenes venían a mi como flashes, sus sonrisas, sus regaños, sus enfados, de ambos. Luego, miré a Tim y recordé todas esas bromas, sus esfuerzos y esos ratos libros de risa… Pues a decir verdad, desde que apareció _________ en mi vida, solo tengo recuerdos de sonrisas, como si mi corazón pudiese explotar de amor y nostalgia pero ahora, miraba a mis compañeros, todos con sus rostros apagados, conversando algunos, otros llorando, otros rezando y otros mirando fotos de sus familiares lo que me deprimía y más repetía en mi mente que estaba caminando hacia mi muerte.
Cuando estábamos por llegar, fue la comandante quien llegó y comenzó a hablar.
-Chicos- dijo- Gracias por haber venido- dijo apenada- Odio esta parte pero, debo decirles las reglas y el plan…- dijo juntando sus manos- Su objetivo- dijo mirando a mi lado que eran los novatos- Es cuidar la base, el lugar donde nos estaremos quedando y ustedes muchachos… Ir en busca de gente para quitarlas y salvarlas de las explosiones…- dijo firme- Sus uniformes están aquí, en un rato se los daré… Tendrán acceso a todas las armas que quieran pero tendrán que pedir permiso antes de disparar cuando tengan rehenes, aunque, nosotros no queremos matar a nadie…- dijo firme- Tendrán su uniforme y sus alimentos… Deben estar atentos a los ataques porque al parecer, descubrieron nuestra base pero no han llegado…- dijo y tragué fuertemente asustado, mirando a Tim- Además…- dijo- tenemos reglas… No pueden hacer llamadas a no ser que sean desde el teléfono de la base pero somos muchos así que nos turnaremos, esto es por la señal, si rastrean algo pueden encontrarnos y tampoco chicos, por favor, no peleen entre ustedes…
Luego de una media hora, nos dieron la orden de prepararnos para salir y yo estaba poniéndome el resto de mi uniforme junto a Tim.
-Tengo miedo- dije abrochándome el chaleco antibalas mientras arriba me ponía un casco que enganché en mi mentón.
-Niall- dijo Tim a quien le sobraba el espacio en el casco- SI muere alguno de nosotros dos… Seré yo- dijo firme- Mirame…- se señaló- Soy un delgaducho…
-Pero eres mi mejor amigo- dije tomando una metralleta que pesaba bastante y la colgué en mi espalda- Solo somos niños, imagina que es un videojuego…- dije y negó.
-No, porque aquí no hay un reiniciar partida…- dijo y me miró.
-Tu, de nosotros dos siempre fuiste el más fuerte- dije tomándolo de los hombros- Es decir… Toda esa esperanza Tim…- dije y me sonrió.
-¿Juntos?- preguntó dándome su puño y lo choqué.
-Juntos- afirmé y volvimos a sentarnos mientras aterrizábamos. Al llegar, tenía mi corazón en la garganta mientras esas puertas se abrían y antes de salir, caminé detrás de Tim hacia la puerta donde al llegar, la comandante me detuvo.
-vendrá un avión en setiembre en busca de ustedes- dijo mirándome a los ojos- Por favor Niall, no quiero tener que ir a casa de tu madre y luego de tu novia a darles malas noticias- dijo y asentí mientras me bajaba para llegar a ese desiertico lugar.
-¡Tenemos que caminar veinte kilómetros!- gritó el comandante- ¡Si no podrían ver el avión!- dijo- ¡Síganme todos!- dijo y comenzamos a caminar en ese desierto.
Yo iba junto a Tim quien de a poco se cansaba pero lo soportaba.
-Esto es genial- dijo la voz de Chuck desde atrás de nosotros; ese grandulón molesto- mataremos gente- dijo emocionado- ¿Saben con cuantas chicas me acostaré cuando llegue?- dijo riendo.
-Idiota- dije en un murmullo y Tim rió.
-Que se acueste con cuantas quiera, mientras pueda dormir después de esto- dijo Tim y asentí.
Caminamos un par minutos más y cuando íbamos unos diez kilómetros, comenzó a sentirse un terrible olor a podrido, descompuso a alguno de los compañeros que vomitaron mientras yo, tapaba mi boca y nariz con mi remera blanca que llevaba abajo.
-Aquí fue donde mataron al resto del otro equipo- dijo y miré a mi alrededor.
-¿Dónde están los cuerpos?- pregunté a Tim.
-La arena los tapó- dijo y señaló a un lugar donde pude ver la espalda de un cuerpo que llevaba nuestro uniforme.
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Mil y una estrellas (N.H)
Random"Y por eso tenemos la adolescencia... Porque aquí soñamos, deseamos, bailamos, reímos, nos equivocamos para luego reírnos de nosotros mismos"