take a breath || Aidan Gallagher

🌙 Feelings 🌙

Llegamos a una casa color beige, bajamos del auto escuchando a su madre hablar.

— Vengo por ustedes dentro de unas dos horas, igual me avisas cuando se quieran ir — avisó.

— Sí mamá, gracias — contestó Jaeden cerrando la puerta.

Me despedí con la mano.

— En fin, ¿entramos? — puso su mano en mi hombro.

— ¿Crees que les agrade? — pregunté ansiosa.

— Estoy seguro que sí, tú tranquila — me dió una sonrisa tranquilizadora.

Tocó el timbre de la casa color crema, observé a detalle.

El pasto verde se veía recién apodado, había una patineta tirada en la entrada de la cochera, me distraje escuchando el ruido de la puerta.

— Hasta que llegas, te estábamos esperando — dijo el pelinegro.

Dios.

Mío.

Agárrenme.

— Lo siento, había algo de tráfico — rió. — Mira, ella es ________ Clifford — me presentó.

Me sonrió acercándose, mi garganta se secó.

— Un gusto — besó mi mejilla.

¡MAMÁ, FINN WOLFHARD ACABA DE BESARME!

¡AAAHHHH!

— El gusto es mío — dije con mucho esfuerzo.

Nos invitó a pasar, se escuchaba mucho bullicio en la sala.

Me alegro de haberme arreglado, no todos los días conoces a Finn.

Abrí ligeramente los labios de impresión, Noah estaba platicando con Sadie, Millie hablaba con alguien por teléfono e Iris escuchaba lo que los demás decían.

— Ya llegó Jaeden, ahora sí ya podemos iniciar con el maratón — avisó Wolfhard llamando la atención de todos.

— Wyatt me avisó que no iba a poder venir, tuvo un asunto familiar — murmuró Jaeden, pero dejé de escucharlos por mis nervios.

Les sonreí tímida, Noah se levantó saludando con su mano.

— Noah — dijo con voz suave.

— _______ — contesté estrechando su mano.

— Ella es Iris, la pelirroja es Sadie, y Millie está ahí — señaló Jaeden.

— Es un gusto — murmuré tímida bajo la mirada de todos.

— Creo que tú y yo seremos buenas amigas, otra británica — dijo Millie corriendo hacia mí, me dió un abrazo corto.

Todos m integraron muy bien a su grupo, estuvimos platicando todo el rato sobre mí, lo cual me puso un poco incómoda, aún no me acostumbro a tener tanta atención.

En todo el rato, Jaeden jamás dejó de sonreírme.

— ¿Y cuánto tiempo llevan de novios? — preguntó Iris abrazando a Wolfhard de la cintura, el pelinegro acarició su cabello.

Millie tenía su cabeza recostada en el regazo de Noah.

— No somos novios — respondí antes de que Jaeden dijera algo que me pusiera contra la espada y la pared. — Solo somos amigos.