Juguemos a ser heteros (2)

~Capítulo 5~

Ben escuchaba como el sonido del reloj retumbaba por toda la habitación.

Tic, tac.

Echó un pequeño vistazo de reojo.

Liam estaba en su cama, leyendo algún libro.

—Espero que ya hayas terminado las frases.

Ben se estremeció. Y volvió la vista al bolígrafo que hacía girar encima de sus dedos.

<Tiene ojos en la frente>

El moreno miró el cuaderno.

Ya había traducido cuatro frases. Pero la cosa se iba complicando.

Suspiró.

—¿Necesitas ayuda?

Ben se encogió. Liam había hablado  demasiado cerca de su oído.

—Si, bueno.

Liam miró el cuaderno. Ben tenía una letra horrible.

—Se dice que la letra se parece a sus dueños.—Comentó el rubio girándose al chico.

Estaban demasiado cerca. Liam se sorprendió. Ben se ruborizó.

<¿Que ha sido eso? ¿Por que me avergüenzo?> Ben miró también el cuaderno.

Liam se aclaró la voz.

—Bueno. Me he fijado. Tienes problemas con los verbos y un poco con vocabulario.— el rubio dejó de apoyarse en la mesa y se levantó mirando su reloj.

—Te voy a dejar algo de teoría. Léela, mañana te explicaré. Y estudia algo de vocabulario.

Se dirigió a la puerta.

Ben giró en su silla observando al mayor.

—Hasta mañana.—Se despidió el menor.

—Por desgracia.—Liam sonrió cerrando la puerta tras de sí.

Ben sonrió igual. Si...Por lo menos era algo mutuo. Liam no quería enseñarle y él no quería que él le enseñase.

Miró las dos hojas que Liam le había dejado.

Había teoría, como había dicho anteriormente el rubio. Y vocabulario.

Se acostó en la cama, donde se había sentado su ¿profesor particular?

Se quedó mirando las palabras escritas. Estaban a mano. Liam tenía una letra bonita, delicada.

<La letra se parece a sus dueños>

Ben rió.

Que irónico.

Ben se dio la vuelta y echó una siesta.