Por Ti [Yoonnie]

Video

Jennie llegó el lunes a primera hora a su clase de natación. Tal vez un poco de su deporte favorito le haría olvidar todo el incidente del fin de semana, pero al ver las miradas de parte de su entrenador y mejor amiga, supo que su día no sería tranquilo.

—Vamos, Jennie, ponte a calentar. Practicaremos estilo mariposa hoy – dijo Bobby.

—Si.

Jennie se colocó sus lentes protectores y se zambulló en el liquido elemento, hizo unas tres vueltas perfectas y Bobby la felicitó.

—Has mejorado mucho, pequeña. Bien, ¡JungKook, es tu turno!

Su atleta amigo, también le dio una pequeña mirada antes de introducirse al agua. Pero bueno, ¿Qué tenían todos hoy con ella?

—¡Jennie, Jennie! – SinB, una de sus compañeras del club se acercó —¿Es verdad que sales con Min Yoongi? Wow, eres tan afortunada.

—¡Felicidades, Jennie! – le dijo Yerin, otra compañera más.

—¿De qué hablan?

—Ah, no te hagas – le respondió juguetona —¡Del beso que le diste!

Jennie abrió los ojos, sintiéndose atrapada.

—¿Cómo saben eso?

—Por el video que circula en línea – añadió JungKook —¿Acaso no lo viste?

Su amigo le muestra el video, el cual muestra el momento exacto en el que Jennie toma de la chaqueta a Yoongi y le besa.

—Es una pareja inusual, pero es bonita – aseguró SinB.

—¡Una chica pobre con un chico rico! Esto solo sucede en los doramas —Habló Yerin.

Usualmente Jennie aclararía todo el asunto de una vez, pero con las pruebas que tenía en sus manos, no había ni cómo crear una mentira. Ante los ojos de todo el mundo, Yoongi era su novio.

«Que desgracia»

—Chicas, no les obligaré que me crean, solo diré, que todo esto es un inmenso malentendido.

Jennie tomó su toalla y salió de allí, rumbo a los vestidores. Yoongi debía estar festejando seguramente. Se prometió no tomar alcohol nunca más, oh, empezaba a angustiarse, ella no quería ganarse la reputación de "chica besadora".

—No les hagas caso, Jen – le animó JiSoo —Pasarán los días y olvidarán esto.

—Pero yo no soy novia de él – dijo Jennie con los ojos llorosos —No quiero verme así ante el mundo.

—Pues no lo seas. Lo que diga la gente no debe importarte. Eres fuerte, y sé que esto no será suficiente para derrumbarte.

Jennie sorbió su nariz y asintió.

—Tienes razón. Debo afrontar esto. Solo me importa que mis amigos me crean.

—En eso tienes razón, pequeña – dijo JungKook entrando al vestidor de mujeres, bueno, en este momento no había nadie más que ellos tres. —No debes dejar que esto te derrote, pasará como una anécdota.

—¿De verdad lo besé?

—Sí, muy a tu pesar, si – dijo JungKook —Pero si para ti no significó nada, debes hacérselo saber.

Jennie asintió y dejó el lugar. Tendría un par de clases y luego iría a casa a almorzar.

Un auto la abordó cuando intentaba cruzar la pista luego de finalizar sus clases. Jennie iba a gritarle unas cuantas groserías, pero ya conocía de quien se trataba, le tocó la ventana del conductor y la persona que vio le saludó con la cabeza.

—Sube, necesitamos hablar de algo importante.

—¿Algo cómo qué?

—El video.

Jennie rápidamente rodeó el auto y se colocó en el asiento copiloto.

—De acuerdo, que pasa.

—Imagino que ya lo viste, no sé quién haya sido el chistoso de colgar eso en las redes, pero no te preocupes, en menos de 24 horas no volverá a ser reproducido.

—¿Eh? ¿A qué te refieres?

—Me ocuparé de eso.

—Yo... ¿Por qué lo haces?

—No me gusta que la imagen de mi futura novia esté circulando por las redes como una ebria que anda besando tipos.

Jenie decidió pasar por alto cómo la había llamado porque sintió un peso menos.

—¿Tú... te encargarás de eliminar el video?

—Si. Ya te lo dije, no me gusta repetir las-

/Beso/

Yoongi siente su mejilla derecha caliente. ¿Acaso Jennie lo había besado?

—Es mi pago por hacer esto. Sé que te gusta que te besen cuando ofreces cosas.

—No me gusta que me besen, es más detesto el contacto ajeno, pero no sé en qué idioma decirte que me gustas, y como tal, tus labios son los únicos que quiero sobre mí.

Jennie se encogió en su asiento. De nuevo esa sensación en su estómago. ¿O eran ganas de ir al baño?

—Yo, uhm... tengo que irme.

—Espera. Aún no he acabo. Si quieres pagarme... ven a ver una película conmigo.

—Supongo que no tengo problema con ello.

—Pero en mi casa. Tengo un cine privado.

—¡¿Un cine privado?! Wow, ¿Con aire acondicionado, asientos súper cómodos, bebidas ricas y bocaditos?

—Si...

—¿Gratis?

—Si.

—¡Acepto!

—Te enviaré un mensaje para acordar la hora y el lugar.

—Okay, ahora sí, ¡me voy!

Yoongi no entendía a Jennie, era feliz con cosas tan simples.

En verdad había estado feliz cuando la vio sonreír de nuevo y lo miró con esos ojos esperanzados. Era como Yoongi quería que lo viese siempre, como su salvador y apoyo para cualquier cosa que necesite.