Bienvenida a la universidad

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—¡Me rindo! No sirvo para las maquetas. – Jennie suspiró estirando sus brazos mientras sus amigos la veían cansados.

—¿Entonces prefieres avanzar con el proyecto? – preguntó JungKook.

—Nah, tampoco.

—¡Kim Jennie! – bramó. —Has algo productivo, ¿Quieres?

—¡Ya sé! Iré a comprar algunos materiales que faltan. ¡Ya vengo!

Jennie se encaminó hacia la librería más cercana, a decir verdad, ella era más práctica que hacer trabajos manuales en los cuales no tenia pulso para pegar cajitas.

Pasó por el gimnasio, entonces escuchó unos aplausos. Oh, hoy día era la bienvenida a los chicos de primer año, entre ellos, su hermana Rose, se asomó por la puerta con cuidado de no perturbar, pero entonces, toda su seriedad fue rota cuando vio a los chicos jugar a la "gallinita ciega", tratando de identificarse uno con el otro.

De repente, sus ojos encuentran a alguien conocido.

—¿Jaebum-ah?

Y éste también se encuentra con los de ella.

—¿Jennie?... ¡Jennie! Que sorpresa encontrarte aquí.

—Mn, ahora que recuerdo, dijiste que dentro de unos días estarías aquí.

—Sí, ahora pertenezco a este club de música. – sonrió —¿Por qué estás aquí?

—Vine a ver a mi hermana.

—¿Tu hermana?

—Si. Es la de allá.

Jennie señaló en dirección a una chica castaña, quien estiraba los brazos para encontrarse con un compañero.

—Supongo que nos veremos más seguido, JaeBum-ah.

—Sí, ¿Estás libre esta tarde? ¿Puedo invitarte un helado?

—¡Claro! No tengo planes.

—Genial. Nos vemos a las dos, entonces.

—Va.

Jennie se despidió de JaeBum, justo cuando Rose se quitaba la cinta de los ojos, viendo a su hermana, alzó su brazo para saludarla, pero, en cuanto la vio conversando amenamente con JaeuBum, decidió no interrumpir.

Ya era la hora de salida del primer día Rose, escuchó su nombre siendo gritado desde lejos.

—¡Rose! ¿Qué tal tu primer día? - preguntó Jennie.

—Bastante bueno, mis superiores son amables y estamos en proceso de conocernos mejor con mis compañeros.

—Que bien. ¿Vamos a casa juntas?

—Sí – le sonrió su hermana menor.

—¡Jennie!

Jaebum trota en dirección a ellas.

—Oh. Jaebum-ah, ¿Aún estás aquí?

—Claro, acordé con cierta personita tomar un helado, ¿lo recuerdas?

—Oh, cierto, cierto, perdón, lo olvide – le sonrió Jennie —Bien, vamos por unos. ¿Vamos, Rose?

—No, no, no quiero interrumpirlos.

—Para nada – dijo JaeBum —Eres la hermana de Jennie, ¿no es así?

—S-Si... Me llamo Kim Rose.

—Okay, Rose, ¿vamos por unos helados?

La sonrisa de JaeBum deslumbró a Rose, se sintió tímida de repente. Pero Jennie...

—¡Conozco un buen lugar para ir! ¡Vamos, JaeBum-ah!

Lo tomó del brazo y lo arrastró hasta una heladería cercana. Rose observaba con que facilidad su hermana se acercaba a JaeBum, era seguro que se conocían desde antes. ¿Jaebum sabría acerca de su relación con Min Yoongi? ¿Estaba bien con eso?

Al final, JaeBum las llevó devuelta a casa en su auto.

—Gracias por traernos, JaeBum-ah. – dijo Jennie.

—No es nada. ¿Te gustó el helado?

—Estuvo delicioso.

—Qué bueno, tal vez en otra oportunidad podamos ir a una pastelería.

Jennie asintió sonriéndoles.

Rose no pudo seguir viendo las sonrisitas entre los dos, por lo que bajó del auto antes. Jennie, algo extrañada por el comportamiento de su hermana, la siguió, luego de despedirse de JaeBum.

—¡Rose! ¿Qué pasa? ¿Por qué te fuiste tan rápido?

—¿Acaso no te das cuenta, unnie?

—Qué cosa.

—Le gustas a JaeBum-sshi.

—Le gustas a JaeBum-sshi

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Por Ti [Yoonnie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora