Incomodidad

620 88 18
                                    

Para cuando Jennie sonrió, se le cayó un trozo de bocadillo al suelo, pero esto pareció no importarle al recién llegado.

—Qué agradable coincidencia. Permítame presentarme, soy Im JaeBum.

—Ahm, yo... soy Jennie, Kim Jennie.

—No pensé que estabas relacionada con la familia Min, digo, reconozco a todos mis compañeros de educación primaria, pero tú... definitivamente no eres uno de ellos.

—Bueno, lo que pasa es que yo vine porque soy...

—Oh, permíteme un momento – dijo JaeBum contestando una llamada.

Cuando éste se alejó, Jennie suspiró más tranquilamente.

«¡¿Pero que hace este chico aquí?! Ah, definitivamente la vida me odia.»

—¿Jennie?

—¡Ah! ¿Yoongi?

—¿Te encuentras bien? parece que hubieses visto a un fantasma.

—Ah... er... ¡Yoongi! Mi guapo esposo – se abrazó de su cintura mientras restregaba su cabeza con su pecho. —Invítame un trago ¿sí?

Yoongi estaba ya lo suficientemente avergonzado por estar parado allí soportando algunas curiosas miradas como para seguir allí un minuto más.

—¡Bien! pero deja de ser tan hostigosa, normalmente no eres así, ¿Estás intentando marcar territorio?

Aunque a Jennie no le gustaba ser demasiado posesiva con las personas que ama, tuvo que exagerar en ese momento.

—¡Si! ¡Estoy cuidando lo que es mío! ¿Algún problema?

Yoongi sintió una satisfacción en el pecho. Acunó su mejilla.

—Ninguna.

La tomó de la mano y la llevó hacia la barra. Justo cuando pensaban tener un momento a solas, una suave voz aterciopelada se escuchó.

—Yoongi.

Yoongi volteó en su dirección, sorprendido al verla.

—Jieun.

—Feliz cumpleaños. – le sonrió.

Éste le sonrió en respuesta.

—Gracias por venir, pensé que sería difícil para ti.

—Afortunadamente conseguí un vuelo ayer mismo y pude viajar. Estoy feliz de verte de nuevo.

Jennie sintió que estaba fuera de lugar, sabía que era la amiga de la infancia de Yoongi, pero ahora mismo, lucían tan perfectos juntos. De repente, su ropa pareció molestarle, cayó en cuenta que no pertenecía a ese mundo.

—Oh, te quiero presentar a alguien. Jennie, ella es Jieun.

—Ahm, hola Jieun-sshi.

—Es tan bonita – ella le miró con cariño. —Cuídalo mucho, ¿sí?

Jennie se sintió aún más pequeña, ¿Por qué le decía eso?

—Yah, Jieun, no es como si me fuera a morir.

—Pero es la chica que elegiste – le respondió ella con firmeza. —Vamos, no seas tímido, para una chica es apropiado que la presenten por lo que es, en este caso, tu novia.

Jennie se relamió los labios, bien, quería que alguien la sacara de allí.

—Ah, Yoongi debo hablar con JungKook de algo. Creo que ustedes dos tienen mucho de qué hablar, así que los dejo.

Con un asentimiento, Jennie se fue de allí, prácticamente huyendo. De repente toda su fortaleza pareció flaquear, por primera vez vivió en carne propia el sentimiento de inferioridad.

Y no podía ocurrir un mejor momento que ese para que JaeBum retornara a su encuentro.

—Jennie-sshi.

—Jaebum-sshi.

—¿Podemos retomar nuestra charla? Si no le molesta claro.

Jennie miró de reojo más allá, donde su novio y su amiga de la infancia compartían una copa.

—No creo que sea apropiado. No me encuentro de ánimos.

Jaebum se extrañó.

—Hace unos momentos lucia tan radiante, ahora es como si hubiese recibido una mala noticia.

Jennie no sabía cómo no ser grosera con Jaebum y pedirle que la dejara sola, pero por otro lado, tampoco quería ir dando pena a todo el mundo.

—Jennie-sshi, ¿Puedo obtener su número?

—Perdónenme, pero no me conoce lo suficiente ni yo a usted, así que, no me siento cómoda dándoselo.

—Oh, entiendo... Lo siento. Sé que soy un extraño para usted, pero solo quería invitarla a salir.

—Jaebum-sshi... No soy lo que parezco. Tras estas bonitas ropas solo existe una chica común y de clase baja que ama las costillas de cerdo de un puesto ambulatorio.

El rostro de Jaebum se quedó pensativo mientras la miraba.

—Le agradezco que sea sincera conmigo. Y está bien que nuestras clases sociales sean distintas, pero se lo pido con toda la buena voluntad del mundo, déjeme conocerla, permítame que nos conozcamos.

Jennie se sintió incómoda. No tenía el ánimo para rechazar a un chico por segunda vez, y ahora tenía que hacerlo.

—Lo siento... Pero estoy con alguien más.

 Pero estoy con alguien más

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Por Ti [Yoonnie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora