Tres Son Multitud (+18) [Kookmin]

Capítulo 9

-Dime que quieres sargento Jimin–Jin se dio por vencido.

-Que hables con Namjoon y le digas que si quiere una rebaja de pena debe darme nombres de los mandos altos que trabajaban para y con él–Dijo Jimin serio.

-¿Que pasa si no lo hago?–Preguntó Jin.

-Solo puedo decir que él no durará mucho en la cárcel, tu pararias ahí y nunca ninguno de los dos conocerian a su hijo–Solto Jimin en un tono amargo y doliente.

Jin trago grueso, eso no se lo esperaba.

-No tienes pruebas de que yo...

-Oh claro que las tengo Jin, que no las utilicé es cosa diferente sólo por el lazo que nos une pero si tú y Namjoon quieren guerra la tendremos–Le dijo Jimin sin mostrar una pizca de debilidad.

-No puedo ir a verlo.. lo tienen aislado–Dijo Jin sin quitarle la vista de encima.

-Te consigo permiso para verlo, el director me debe un favor...

-¿Quien en esta ciudad no te deben algo?–Preguntó Jin con un pesado suspiro.

-El abogado que tiene no quiere que hablé, dile que tendrá un hijo y veras como todos saldremos ganando–Jimin miro por la ventana dejando todo en silencio.

Los dos parecían en mundos diferentes, pensando en que dirían para no terminar odiandose.

-Esta bien–Se rindió Jin. -Veo que nunca podré ganarte–Jin sonrió negando.

-Eso lo sabemos–Jimin se levantó y Jin lo miro. -Y sobre lo de Jeon hoy lo descubrí, gracias por estas fotos–Tomo el sobre y estiró la mano.

-Solo quería...

-Esta bien Jin, nos vemos más adelante y llámame.. en verdad no quiero llevarte preso, no soy tan maldito como crees.

Extrecharon manos con un fuerte apretón y se dispusieron con una pequeña sonrisa.

Jimin se subió al auto y guardo el sobre en la guantera.

Dio su última mirada hacia el restaurante donde vio a Jin pensando serio y se fue, ya no quería seguir ahí.

En el camino no pudo evitar soltar unas lágrimas.. el dolor lo consumía a cada segundo, era como una bomba de tiempo que no dudaría mucho.

Jimin llegó otra vez al presinto y regaño fuertemente a los detectives que habían seguido a Jin.

-Sargento, tenemos la orden de allanamiento y captura–Aviso Beak.

-Pues todos iremos, bajen a alistarse–Dijo serio y fue a la oficina.

Los derectives lo veían serio, nadie lo reconocía.. ese no era su tierno, dulce atractivo y mando sargento.. ahora sólo veían un hombre serío, rudo y molesto.

Jimin bajo después de unos minutos y vio como todos los detectives de su equipo se alistaban para salir.. Lisa le ayudó a colocarse el chaleco antibalas.

-Gracias Lisa–Agradeció Jimin.

-No hay de que, sólo cuídese y vuelva bien para que me siga mandando–Dijo ella con una dulce risa.

-¡Lisa ven y ayúdame a mi!–Pidio Taemin con una risa.

-En tus sueños–Le dijo Baek. -Ella sólo puede verme a mi–Comentó.

-Se juntó tu ganado querida–Le bromeó Jimin.

Todos soltaron una risita tonta viendo el sonrojo de Lisa por los comentarios.

-Sube y vete a casa–Ordeno Jimin.

-Espérame cariño, te llevaré a cenar cuando vuelva–Le dijo Baek y ella negó subiendo al elevador.

-Idiota la asustaste–Le dijo Taemin golpeandole el hombro.

-Basta de juegos, escuchen muy bien.. no se separen y tampoco apaguen sus radios... Y regresemos todos con vida–Jimin tomó su arma y los demás asintieron mas serios.

Y así todos se subieron a sus autos y fueron hacer lo mejor que saben hacer.. patear traseros.

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-¿Papá mi papi vendra?–Preguntó Hye triste.

-No se mi amor, tiene mucho trabajo.. mejor vamos a cenar–Respondió Jungkook sin ánimos.

-¿Y si lo esperamos?–Preguntó curiosa.

-No mi amor, debes cenar temprano para que vayas a dormir que mañana tienes escuela–Jungkook con la cabeza un lío puso los platos sobre la mesa.

-Yo no quiero comer sin mi papi... quiero a mi papi–Shin Hye empezó con un berrinche que su padre no tenía cabeza para soportarlo.

-Shin Hye cariño, no empieces con tu rebeldía, sólo come o tu papi se pondrá bravo contigo por que no cenaste–Hablo sin ánimos viendo su plato y pensando en que estaría SU Jimin en ese momento.

-No quiero comer–Le dijo su hija cruzándose de brazos, frunciendo el ceño y haciendo un puchero.

Jungkook no estaba de ánimos par los berrinches de su hija, así que le quitó el plato y suspiró.

-Sin televisión.. directo a tu habitación para que duermas–Le dijo Jeon serio y su hija se fue del mismo modo pero extrañando a su papi Jimin.

Jungkook estaba pensando en cómo seria Jimin de ahora en adelante. En que le haría a él y a Taehyung. Nadie más que él sabía cómo se colocaba Jimin cuando se colocaba de mal humor.

No se puede decir que es afortunado pero si había podido ver todas las facetas de su esposo, ni siquiera sus suegros lo conocían así de bien.

Jungkook retiro el plato del frente y suspiró pesado, miro hacia la pared y el reloj marcaba las "8:46pm".

La espera sería larga y tortuosa pero lo esperaría por su bien.