Tres Son Multitud (+18) [Kookmin]

Capítulo 23

-¡Sargento que hace aquí?!–Preguntó Lisa parándose de su silla.

-Aqui trabajo–Jimin le sonrió y siguió de largo hacia su oficina.

-¡¿Y tu que haces aquí?!–Volvió a preguntar Lisa alarmada.

-Pues aquí trabajo Lalisa–Kai rodó los ojos y se sentó en su escritorio.

-¡Debes estar descansando, te hirieron ayer!–Le reclamo Lisa. -¡Vete a casa, ese hombre te da una semana de incapacidad!.

Kai sonrió y negó.

-Primero deja de gritar Lalisa..

-No me digas así–Bufó Lisa.

-Segundo, no fue el hombre ese que me dejo así...

-¿Ah no?–Preguntó Jennie confundida.

-Nop, fue el sargento.. él no detuvo la bala y yo si, es injusto..

En un segundo se escuchó la risa de los demás detectives.

-Nuestro sargento es como de seda por que bala lo atravesó como si nada.. ya quisiera ser así–Comentó Lee y se sentó en su lugar.

-Pues yo si las...

-Los chismes para su descanso–Dijó Jimin serio. -Kai has el reporte de ayer, Lee y Park entreguen los cuerpos de la morgue a sus familiares, caso resuelto.. y Byun has un inventario de lo de ayer, todos a trabajar.

Los presentes no supieron ni donde quedaron... su jefe hoy no estaba de buen genio.

-¿Señor que hace?–Preguntó Lisa mirando a Jimin.

-Necesito unos viejos archivos, pero esta mierda no me deja hacer mucho–Jimin suspiró pesado y se tocó la herida de su costado.

Lisa se mordió el labio y ayudó a Jimin con la caja que quería. Él agradeció y ella se fue dejando a un Jimin con el ceño fruncido.

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-Nam quiere un trato por escrito–Dijó Jin serío y le mostró una hoja a Jimin. -Esto es acto de buena fe.

-¿Que es?–Preguntó Jimin curioso y dejó los cubiertos sobre el plato.

-Nombres... 9 políticos.. 12 del poder judicial.. 25 nombres de policías corruptos... y falta un montón, esto sólo es una gota de esa jarra–Jin lo miraba serio.

-¿Y que pide tu esposito adorado?–Preguntó Jimin volviendo a comer.

-Que nos saque del país con nuevas identidades y que nos den algo del dinero que él tiene para vivir un tiempo–Jin habló firme.. no queriendo ceder ante su hermano.

-¿Quieren una casa en florida, con piscina, cuatro empleadas, autos, lujos por montón y que más?–Preguntó Jimin. -Tu sólo pide hermanito que cumplo todos tus caprichos.

Jin apretó la mandíbula y las manos... estaba indignado con el tono de sarcasmo que le habló Jimin.

-Es enserio lo que digo–Le dijó Jin. -No lo tomes como burla...

-Entonces no me jodan–Jimin soltó con fuerza los cubiertos llamando la atención de los presentes. -Los que se burlan de mi son ustedes.

-Es lo justo.. él te dirá el nombre de todas esas ratas del gobierno–Le reclamó Jin en un susurró pero enojado.

-Pues le salí a deber al criminal–Jimin río sin gracia.

-Deja de llamarlo criminal Jimin, es Nam... es como si llamara a tu esposo "el infiel" todo el tiempo...

-Llámalo como se te de la gana–Jimin se inclinó sobre la mesa. -Aqui el asunto es que piden mucho...

-¿Que nos darás a cambio de la información?–Preguntó Jin en un susurro.

-Entraran al programa de protección de testigos... cambiaremos sus nombres, su aspecto un poco, los sacaremos del país o él continente si es necesario, una pequeña casa y no más...

-¿Y dinero?–Preguntó Jin preocupado.

-De unos 5mil a 8mil dólares, y eso es mucho para ustedes dos...

-Jimin no nos das nada de dinero, no volveré a ser pobre–Le dijó Jin muy enojado.

-Nunca has sido pobre, con el dinero que te enviaba mamá y el señor Jung era suficiente para que vivieras como un rey... nunca debiste mover un dedo para nada, así que no te des de la víctima–Jimin suspiró y se tomó un gran trago de agua.

-¿Y mi dinero?–Jin se cruzó de brazos. -El que obtuve como modelo.

-Dinero limpio.. se pasará a tu cuenta–Jimin suspiró pesado, se sentía cansado.

-¿Que hicieron con todo el dinero de mi Namminie?.

-Lo tengo debajo de mi colchón–Jimin le sonrió con ironía. -Tambien tengo un poco en el refrigerador, en el compartimento secreto de mi auto y...

-Ya, deja de burlarte de mi–Jin le pegó por debajo de la mesa. -Idiota.

Jimin se hiba a levantar y le dio un mareo que lo volvió a sentar.

-¿Que te pasó?–Preguntó Jin un poquito preocupado.

-Un mareo.. mucho bicodin–Jimin cerró los ojos unos segundos.

-¿Eres adicto o algo te duele?.

-Ayer me dispararon, la bala me atravesó y creo que el hoyo de mi cuerpo duele–Jimin tomó un trago de agua.

-Pero estas bien?–Jin se mordió el labio.

-Si, me disparan todos los días, y me acostumbré–Jimin le sonrió y esta vez sí se levantó bien. -Dejame hablar con el fiscal y veré qué hago.

-Bien, llámame cualquier cosa–Jin le estiró la hoja. -Buena fe.. confiamos en ti.

-¿Nunca te dijeron que no confíes en el que finge ser oveja?–Preguntó Jimin. -Puede sorprenderte y salir siendo un lindo lobito.

Jimin salió del restaurante con un poco de dolor, mareos, náuseas.. aun no se acostumbraba a los efectos secundarios del medicamento.

Se subió al auto y conectó el celular con el auto para llamar.

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-¿Si?–Contestó el hombre.

-Soy yo, Jimin–Éste sonrió.
-¿No tienes guardado mi
número?.

-Perdon ni miré el celular,
y eso a que llamas.

-Debo verte Hobi, llama
a tu padre y que vaya a
tú oficina.. nos vemos
haya.

-¿Es de él?–Presentó
Hobi serío.

-Sip, debo decirles que
ya llegó la oportunidad,
solo debemos aprovecharla.

-Bien , te espero amigo.

-Okey.. bye.

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Jimin cortó la llamada y empezó a pensar en un buen argumento para que el papá de su mejor amigo.. que es el papá de su hermano, firmará órdenes de arresto y cateo para toda esa gente que había en el hoja.