Jin ha tenido un fin de semana bastante tranquilo. El chico se ha puesto al día con sus deberes académicos, por lo que ha podido destinar una parte de su tiempo al cuidado y aseo del apartamento. Hacerlo no le toma demasiado. Después de todo, el espacio es pequeño. Es una de las pocas cosas buenas que puede destacar de vivir allí.
Comienza por ordenar los cajones de su ropa, sacando las prendas una por una para doblarlas y ubicarlas pacientemente en el espacio. Hace lo mismo también con los del escritorio, especialmente con aquellos que se han llenado de papeles en los últimos días. Después de ello, la limpieza del exterior comienza. Jin se encarga de limpiar el polvo del escaso mobiliario con el que cuenta, tomándose un tiempo considerable en cada uno de los pequeños objetos que reposan sobre las superficies. Barre el suelo del apartamento, siendo minucioso con la cocina y con el recibidor, en donde la suciedad de la calle que se queda adherida en las plantas de sus zapatos, parece acumularse con más frecuencia. Luego trapea el suelo, procurando llenar el espacio con aromatizante. Esperando que al menos de esa manera el lugar huela a algo, que supla el aroma que él desde hace mucho tiempo dejo de emitir.
De regreso a su habitación, cambia las sábanas por unas limpias con olor a suavizante y organiza su cama tanto como puede, ubicando los pequeños cojines de manera simétrica sobre la colcha y pasando las manos repetidamente sobre ella para eliminar las arrugas de la tela.
Afuera, el cielo es gris y anuncia un posible chubasco. Las esponjosas nubes grises parecen llamarlo, así que es una suerte que él no deba salir en lo absoluto. Que no deba cambiar su ropa por algo más abrigado y cargar con un paraguas mojado.
Jin se felicita mentalmente cuando recuerda que también se encargó de hacer las compras respectivas de la semana el viernes, para no tener que ir más al supermercado. Es bueno, es como una pequeña victoria personal.
Finalmente, cuando cada rincón del apartamento ha sido limpiado, se da un baño y dedica tiempo para sí mismo, para humectarse la cara, cepillarse el cabello y exfoliar la aspereza de sus manos. La pijama suave con olor a aromatizante que se ha puesto es la ropa adecuada para ver alguna serie o simplemente recostarse sobre la cama y dormir una siesta.
Sin embargo, su celular está sonando en algún lugar del apartamento. Jin lo encuentra en la cocina después de un pequeño y rápido recorrido, pero lo que le espera en la pantalla, acaba con la efímera tranquilidad de la soledad.
—Espero no haberte interrumpido. —La voz de Junghyun es divertida del otro lado de la línea, pero no le produce gracia. En lo absoluto.
El omega se pregunta si alguna vez el sentimiento va a poder transformarse en algo menos desagradable, más llevadero.
—No —responde, observando la cocina impecable. El mediano refrigerador luce brillante ante sus ojos, recordándole el tiempo que usó para limpiarla de manera adecuada. Es claro que el castaño está orgulloso de su jornada de labores domésticas—, no lo haces.
—¿Cómo va todo? —pregunta el alfa interesado. A Jin le cuesta diferenciar lo real de lo fingido cuando se trata del otro, por lo que prefiere no creer en nada de lo que sale de sus labios. Es mejor de ese modo—. ¿Estás portándote bien?
Le gustaría mandarlo al diablo y decirle que lo que sea que haga, no debería importarle ni un poco. Está cansado de la actitud constante que asumen frente a él, como si aún fuera un niño tonto que no posee la suficiente racionalidad para tomar decisiones y asumir posturas. Sin embargo, va más allá de eso. Jin no espera que ellos entiendan que está haciendo las cosas bien cuando en el pasado no lo hizo. Las manchas purpúreas sobre su piel están allí para recordarle eso.
Sus pies se arrastran con pesadez hasta su cuarto para contemplar en silencio el orden de la habitación, el modo en que cada cosa parece en su lugar allí. Tan en contraste con lo que siente, con la infinidad de cosas que retumban en su cabeza.
ESTÁS LEYENDO
El amor es el silencio más fino - Namjin (omegaverse)
FanficKim Seok Jin es un omega que ha aprendido a conformarse con aquello que le fue enseñado si con ello asegura el futuro que otros siempre han deseado. Sin embargo, le gustaría poder deshacerse de la pesadilla constante que representa habitar su cuerpo...