Oneshot's [Saint Seiya] Yaoi

Flechazo

Pareja: El Cid x Sisifo. 

- - - - - - - - - -

Sisifo jamás pensó volver a ver a ese santo de capricornio. Tras su muerte jamás deseo que los dioses lo resucitarán, puesto su misión ya había concluido.

Pero los dioses vieron algo más en él.

Hoy en pleno siglo XXI en donde la tecnología va más avanzando que anteriormente, era un cambio, Sisifo, era prácticamente uno del montón, él no tenía memoria de sus enfrentamientos, el no sabía NADA. Solamente estaba ahí, siendo una persona normal, sin saber que más allá, en lo que una vez fue su hogar se desataba la batalla, como siempre. Pero eso era otra historia.

Sisifo una caminando, tenía la opción de regresar a casa y disfrutar de una tarde con su perro, su mascota que prefería demasiado, a pesar que el castaño tenía compañía sentía la opresión en el pecho.

Como si algo le faltara.

Había días en que se sentía seguro, otros que se sentía vacío, y esos días eran esos, donde sentía un vacío extremo.

Salió a caminar como todas las tardes-noches, para que su querido amigo tuviera un poco de aire fresco, su trabajo era simple, ser entrenador de armas, sobre todo de arco, no era muy bien pagado, pero le ayudaba a vivir un poco.

Su camino fue calmado, su perro parecía disfrutar de todo su alrededor, era extraño, había pasado días desde que su hermano mencionó que iba a enviar a su sobrino, Regulus. Pero este no daba señas y su hermana mencionaba que había cosas que hacer antes de enviarlo y eso su ponía curioso al castaño.

Finalmente dio el paseo, iba de regreso, pasando por una de esas casas que antiguamente estaban a la venta. Miro a un hombre, no mayor que él, llevaba una caja, posiblemente era el nuevo vecino, sentía a verlo conocido de algún lado quedó de pie por segundos quien pronto obtuvo la mirada de ese hombre, simplemente reaccionó y comenzó a caminar, quien pronto su perro lo siguió.

Su corazón había latido. Era muy claro que ese tipo lo había visto. Posiblemente ya lo tache como un loco psicópata, camino hasta ma cocina, en donde dejo un poco de agua para la mascota y el bebió también, la caminata era calmada y ayudaba a pensar. Dejo de pensar y comenzó a hacer la comida, posiblemente sería una buena opción.

Transcurio normal, sin ninguna queja, obvio, estaba solo, sin embargo, su querida mascota estaba sentadito, esperando un poco de la deliciosa comida que su padre hacia, Sisifo se percató de aquello y surgió sus croquetas para el tomara asiento en el desayunador, después de a verse servido, estaba por dar el primer bocado cuando alguien llaman a la puerta.

Camino con cierta flojera y abrió, era su vecino.

— Buenas noches, me podría regalar un poco de azúcar, necesito un café esta noche y no tengo azúcar.

— Supongo. Pase.

Hablo son ganas. El fingía aquello, ya que su ser estaba demasiado alterado y preocupado.

— Que bonita casa.

Dijo el visitante, quería calmar la atmósfera que se había creado de una manera repentina.

— Gracias.

— Lamento si te he molestado con la azúcar, pero cuando estaba acomodando todo, la azúcar que tenía se mojó todo, creo que le cayó el vinagre, olía asqueroso.

— Comprendo, no es necesario que me expliques, para mi seria bueno poder ayudarte.

Dijo, dándole de vuelta una taza que anteriormente le había dado.