Oneshot's [Saint Seiya] Yaoi

Lluvia de estrellas

Aioros siempre veía a Saga muy estresado, nunca dejaba su puesto, a pesar de tener los mismos deberes, Saga tenía ese semblante de estresado.

Un día, el santo de Sagitario, pensó en algo, puesto el gemelo mayor ya demostraba ojeras, señas de no dormir bien en las noches.

Le comenzaba a preocupar, puesto el gemelo no comía, simplemente los deberes como santo de Géminis lo estaban atormentando.

Los chicos habían mencionado cientos de ideas, a principios eran algunas malas, otras no tenían nada que ver y finalmente había ideas buenas, una de ellas fue la mencionada por Milo.

— Deberías llevar a Saga a ver la lluvia de estrellas. Ustedes pueden verlo mejor cerca de la estatua de Athena, no creo que nuestra diosa se moleste.

— Bueno...

Dudo, no era porque Athena se molestará, era por el hecho de nervios, pensar que aquello sería mal visto por Saga, puesto sus queridos "niños" que ya eran adultos, indicaban que era una salida, una cita en pocas palabras.

— Creo que sería una excelente idea, ya saben, la noche es tan misteriosa, sobre todo cuando hay estrellas que sobrevuela sobre nosotros. Sería tan romántico.

Afrodita suspiro, mientras demostraba una sonrisa y sujetaba su rosa con cierta firmeza.

— ¡Milin! No quieres ver conmigo las lindas estrellas.

De nueva cuenta el santo de Piscis, hablo, coqueteando con el bicho, quien no pasó desapercibido por cierto francés quien al poco rato lo jaló, mencionando que ya tenían planes.

Afrodita se disgusto, aunque a final de cuenta tenía a DeathMask y Shura.

Aioros fue quedándose solo, puesto cada santo iba por su rumbo, Aioria y Shaka fueron los únicos en quedarse, mirando con cierta pena como su hermano la estaba pasando.

— Realmente ¿quieres hacer eso?

— No creo que Saga lo tome de esa manera, posiblemente piense que abusare de su amabilidad.

— Es entendible, más cuando no hablas mucho con él.

— Lo se. Aunque no soporto verlo así, se estresa mucho y su cuerpo lo resiente.

— Debes intentarlo hermano, así nunca sabrás lo que Saga pueda pensar, posiblemente sea algo bueno y logres hacer que duerma.

Aioria me sonrió a su hermano, dándole ánimos, en cambio el mayor miro, calmando sus sentidos, dando un suspiro en derrota, pronto camino con calma en dónde estaba Saga.

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Aioros estaba de pie, enfrente de la puerta madera oscura, dudando si debía hacerlo, la noche se acercaba con rapidez y el tenía que hacerlo pronto, tomo valentía de quién sabe dónde y tocó varias veces a la puerta, a principio no obtuvo una respuesta, pero al final, un "pase" indico todo lo contrario.

Cuando entró miro a Saga quien llevaba unos cuantos documentos en mano, listo para acomodarlos en una de las estanterías. Aioros noto aquello y se acercó a ayudarle, mientras el gemelo mayor colocaba uno por uno cada documento, con ayuda del sagitario.

— ¿A qué se debe su visita Aioros?

— ¿Eh? Bueno... Solo quería saber si quieres ver la lluvia de estrellas conmigo.

Saga no dijo nada, seguía acomodando esos documentos, mientras sus ojos detonaba cierto toque de sorpresa, aunque no sé atrevía a ver al castaño.

— Irán los demás ¿No es así?

— No, solo nosotros, a menos que quieras a alguien más, los chicos tienen sus propias salidas.