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23

Donghyuck llegó unos minutos tarde a clase pero tuvo suerte ya que el profesor aún no había llegado.

-Menos mal que e llegado. Por un momento pensé que me iban a cerrar la puerta en la cara- dijo sentándose a mi lado mientras intentaba respirar bien. Al parecer fue corriendo al Instituto.

Yo no dije nada. Sabía que si decía una mísera palabra todas mis lágrimas saldrían sin control.

-Irish, ¿te encuentras bien?- dijo, le miré y asentí, después volví a mirar al frente -¿Ha ocurrido algo mientras yo no estaba?-

Fue cuando empecé a ver borroso. Las lágrimas nublaban mi vista.

-No quiero hablar de ello- dije mientras intentaba controlar mis llantos. No quería llorar, quería poder concentrarme en la clase.

-Está bien, como tú quieras. Pero quiero que sepas que estoy aquí para cualquier cosa- estaba claro que Donghyuck era un amigo espléndido.

Sonreí por lo que dijo y después llegó el profesor.

Dos horas después sin poder concentrarme en las clases, Donghyuck y yo fuimos al patio y nos sentamos en uno de los bancos que había en este.

-Es mi abuela- dije.

-¿Otra vez?- bajé la mirada.

-Estoy empezando a pensar que tiene razón en todo- dije aguantando las lágrimas.

-Irish, no digas eso-

Puso su mano en mi barbilla e hizo que le mirara.

-Nada de lo que dice es verdad. Tú eres su familia ahora, tiene que aceptarlo y vivir con ello-

Quitó su mano de mi barbilla y me quedé mirándole.

-Mi familia está peleando por mi culpa. Antes de venir al Instituto hice llorar a Jisung- dije dejando salir mis lágrimas.

-¿Tú le hiciste llorar o fue otra persona?- dijo.

-Yo era la razón por la que Jisung lloraba. Soy el agujero negro, Donghyuck- dije y él me abrazó, correspondí sin dudar.

-Estáis muy cariñosos ¿qué a pasado?- dijo Renjun.

Donghyuck y yo nos separamos del abrazo y le miré a Renjun. Cuando Renjun me miró pude verle preocupado.

-¿Qué a pasado?- dijo agachandose para quedar a mi altura.

-No es nada. Estoy bien- dije secandome las lágrimas.

-No lo creo- dijo Renjun secandome las lágrimas con sus pulgares.

-No quiero hablar de ello. Al final voy a parecer un zombie de tanto llorar- dije soltando una risa.

-Irish, si te ocurre algo siempre puedes contar conmigo, lo sabes, ¿verdad?- dijo Renjun sentándose a mi lado. Asentí.

Unos minutos después de estar hablando nos fuimos a clase.

Faltaban cuatro horas para volver a casa y la verdad es que yo no tenía ganas de ir allí. No quería encontrarme con mi abuela y que mi familia peleara de nuevo por culpa de mi persona.