[Volumen I] 1: Desesperación y renacimiento

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Era Hong Zheng, año veinticuatro, el invierno parecía más frío que todos los años anteriores. Fue solo hoy que dejó de caer aquella fuerte nevada.

A treinta li* afuera de la capital, un caballo negro que llevaba a dos personas, pasó galopando a una persona que buscaba el paradero de otra. Los cascos del caballo golpeaban continuamente a la tierra acumulada de nieve y la distancia aumentaba. Y poco después, volvió a nevar.

—Su alteza, el caballo no puede correr mucho más al llevarnos a los dos... Mejor déjeme aquí—. La voz de la persona sentada detrás de él ya sonaba débil, pero el tono era tan suave como de costumbre.

—No, estás gravemente herido, si te arrojo a la nieve, morirás poco después—. Jing Shao se secó la cara y luego instó al caballo a seguir galopando. Después de salir de la cárcel, se dio cuenta de que la situación no era del todo correcta. Él y su Wang Fei* herido estaban siendo presionados. Si no hubiera matado a un teniente y robado a un caballo, sospechaba que los dos habrían sido ya decapitados a poca distancia de la capital.

—Mi cuerpo ya está al límite, tarde o temprano moriré. Deberías dejarme ahora—. La persona detrás de él parecía ansiosa. El caballo era solo un potrillo, por lo que al estar siendo montado por un tiempo, naturalmente comenzaría a cansarse. Si los dos continuaban así, ninguno de ellos sobreviviría.

—No. Si morimos, moriremos juntos—. Jing Shao le dijo en voz alta contra el frío viento. Esta persona era su Primera Esposa. Toda su vida había favorecido a su Segunda Esposa y descuidado a su esposa oficial. Pero al final, quien lo acompañó en la cárcel fue esta persona, ¡a quien había descuidado durante más de 10 años!

Jing Shao fue el segundo hijo de la Emperatriz Yuan. A la edad de catorce años se unió al ejército y entró en el campo de batalla, asegurándose la victoria y ganando su título, se le permitió tomar a una esposa. Con el fin de mantener la paz dentro de la familia, existía una regla no escrita de que todos los hijos nacidos de concubinas y esposas secundarias debían casarse con una esposa masculina. Fue dado a luz por la Emperatriz Yuan, pero la Emperatriz Wu lo obligó inesperadamente a casarse con una esposa masculina, lo que arruinó sus oportunidades de heredar el Imperio. Por lo tanto, estaba resentido y nunca le dio a su Wang Fei el respeto, ni el honor que se merecía. Y también se negó a ayudar a su hermano mayor a obtener el trono...

—Jaja, ¿qué requisitos tengo yo, Mu Hanzhang, para que su alteza muera conmigo?—. La persona detrás de él se rió amargamente.

—Lo siento. Si sobrevivimos a esta terrible experiencia, te escucharé—. Jing Shao consoló a la persona detrás de él, mientras apretaba las riendas. Después de otros 5 li y que llegaran a la cuesta Wang Yue. Allí, descubrió un sendero estrecho, mientras cazaba, que podría usarse para escapar.

Porque Mu Hanzhang había hablado en el fuerte viento, no pudo evitar toser en la espalda del Príncipe. Un hilo de sangre se deslizó por la comisura de sus pálidos labios. Mientras estaba en prisión, bloqueó un ataque a Jing Shao y lesionó sus órganos internos. El dolor ya se había disminuido, pero ahora debido al frío, comenzó a toser un poco de sangre. Y no pudo evitar ofrecer una sonrisa irónica, simplemente acostado sobre la espalda de Jing Shao.

Después de tantos años, ninguna de sus doncellas o concubinas se atrevió a afrontar esta dificultad con él, no resentirse con ellas era imposible, pero esta persona había insistido en acompañarlo hasta la muerte. En ese momento, Mu Hanzhang casi se cae.

Era hijo de una familia noble, nacido de una concubina. Nunca había pedido un título, en cambio, sólo pidió la oportunidad de hacerse un nombre durante los exámenes civiles. Sin embargo, su padre y la esposa de su padre lo habían casado con Cheng Wang*, como esposa masculina un año antes de su prueba. Era un hombre, pero le habían quitado la libertad y estaba confinado a quedarse en la casa. Ya no podría lograr sus objetivos. Después de tantos años, no sabía si estar resentido con la esposa de su padre o culpar a su irresponsable marido.

El flautista y el vaqueroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora