One Shots H. S. (+18)

26.

Bajando del auto de mi marido, sonreí al encontrarme con Niall, Louis y Chloe allí. Todos vestían elegantemente, como nosotros, para la fiesta exclusiva que Liam había decidido organizar ese día para nosotros. Alisando mi vestido blanco que se ajustaba en mi vientre y provocaba que se subiera un par de dedos por encima de mis rodillas, volví a sonreír al ver la mirada poco recatada que me enviaba Niall. Acercándome a ellos, besé sus mejillas con cierta parsinomia, provocando que nuestros cuerpos se rozaran más de la cuenta.- Aquí, no, preciosa. La fiesta es adentro-. Murmuró Niall antes de posar su boca caliente sobre mi mandíbula, y pasarme a su prima, que no dudó en devorar mi boca.- Solo estoy tomando un aperitivo antes de tiempo-. Sonriendo, ella me guiñó un ojo y poco después, junto a los demás, comenzamos a caminar hacia el interior de la casa. Una vez que se tocó el timbre, no pasó mucho tiempo para que Liam nos diera la bienvenida. Entrando, quedé maravillada de lo espaciosa que era su hogar pero más, cuando vi que el living estaba preparado para lo que realmente veíamos a hacer. Acercándose a una mesa, tomó un par de copas llenas de champagne y las repartió, para luego brindar por esa inolvidable noche. Bebiendo un sorbo pequeño, me dediqué a ver lo ceñido que le quedaba el traje a su cuerpo y cómo su polla demandaba atención. Mirándolo, él sonrió al captar el mensaje que dejaba traslucir a través de mis ojos- Ven, querida. Necesito que hagas justamente lo que estás pensando dentro de esa cabecita inquieta e imaginativa-. Buscando la aprobación de Harry, caminé hacia él y dejé que me envolviera entre sus brazos y me besara. Para ese momento, ya no podía responder a la lógica. Solo quería tenerlo dentro de mí, y profundamente.- De rodillas, cielo. Chuparás mi polla antes de que joda tu precioso coño-. Haciéndole caso, me acomodé en el suelo, y una vez estuvo sentando en uno de los sillones de su living, abrí su bragueta y parte de sus pantalones. Viendo cómo su pene hacía presión sobre la tela de su bóxer, lo acaricié unos segundos para luego sacarlo y engullirlo con un poco de desesperación. Comenzando a subir y bajar mi boca por toda su longitud, levanté mi mirada para ver su rostro de satisfacción. Siguiendo con mi labor, recorrí con mis labios sus testículos y luego la punta de su miembro, ganando más de un gemido. Pero cuando dos de mis dedos ingresaron a su ano, en busca de su próstata, Liam gritó de placer, y su polla se contrajo, indicando que estaba cerca. Volviendo a tomarla en mi boca, no detuve mi tortura hasta que su semen invadió mi cavidad bucal y cayó por mi barbilla y mis pechos. Sin querer desperdiciar una gota, con mis dedos tomé lo que había quedado esparcido en mi propia piel.- Has estado genial, bebé. Mereces una gran recompensa-. Besando mi cuello y luego, concentrándose en mis labios, que todavía conservaban su sabor, bajó el cierre de mi vestido y posteriormente, las mangas para encontrarse con mis pechos desnudos. Sonriendo ante la sorpresa que le generó no encontrar otra barrera, tomé la iniciativa de bajar el resto y demostrarle que abajo, tampoco había nada, solo mi vagina y mis ganas de ser duramente follada. Sentándose nuevamente en el sillón, me pidió que me acercara y sin detenerme a pensar mucho, lo hice. Poco faltó para que su boca absorbiera ávidamente la humedad que se filtraba por mis labios vaginales, en tanto veía cómo Harry se encontraba ofreciéndoles su polla a los demás, que se turnaban para tenerla en su boca.- No sabés cuánto deseé tener nuevamente tu coño a mi disposición, repleto de todo el semen que te puedo dar, aunque nunca será suficiente para ti, cielo-. Haciendo girar mi cuerpo, este alineó su pene con mi entrada, y haciendo que bajara lentamente por él, me deleité al sentir cada centímetro. Pero sin darme más que algunos segundos para que me sintiera en las nubes, comenzó un verdadero vaivén que me hizo bajar al mismísimo infierno. Solo podía gemir y hundirme mucho más en él, para tomar cada trozo, para sentirme completamente llena.- Te sientes tan bien, cariño-. Logró decirme por encima del ruido que hacían nuestras pieles al encontrarse. Cambiando de postura, al poco tiempo, acarició mis pechos y volvió a poseerme con vehemencia, golpeando sus propios testículos en mi perineo y forzando a que todo su grosor entrara hasta en el último recobejo que podía haber tenido disponible en mi vientre.- ¿Quieres mi semen en ti, tesoro? ¿Quieres que te llene tu precioso coño para que después los chicos te lo coman? Dime. ¿Qué es lo que quieres de mí?-. Susurrándole que quería todo de él, dejé que siguiera sacando toda la mierda de mí, y que luego me llenara con su propia esencia. Acariciando un poco mi clítoris, temblé de pies a cabezas, provocando que su pene se tomara todavía más y expulsara hasta la última gota. Cuando este pudo retirarse de mi interior, no tardó en decir lo encantadora que me veía.- Chicos, ha llegado su turno-. Acomodándome en el sillón, abrí mis dos piernas y las acomodé a cada lado de este, dejándome totalmente expuesta para Niall y Louis, que eran expertos en tomar el semen de mi marido de mi interior, y esta no sería la excepción. Mientras yo disfrutaba de ese servicio, Harry se encontraba tumbado en la alfombra, con Chloe cabalgando su gruesa y larga polla, y viendo cuánto disfrutaba, supe que se estaba dando un buen festín con su coño. Volviendo la atención a los chicos, jadeé al sentir los dedos traviesos de ambos, y en cuanto vi que Liam se masturbaba en otro de los sillones, viendo nuestra interacción, no dudé en mi próximo paso: follaría con ellos. Permitiendo que Niall se acomodara en nuestro sillón, me subí encima de su regazo, y sin esperar mucho, hundí su miembro en mi necesitada vagina, en tanto Louis hacía lo suyo con mi parte trasera. Poco después, arremetían con todas sus fuerzas en mi interior, besando mi cuerpo y marcando mi esbelto cuello con sus dientes.
-Dejaremos tan marcado tu cuello, que deberás usar algo para no llamar la atención de los demás, aunque no vendría mal que supieran que eres nuestra-. Besándolo a Niall, acompañé sus últimas embestidas, para luego sentir cada chorro de su semen llenar mi vientre. Pensando que Louis había hecho lo mismo, me sorprendí al verlo a un costado, frotando su miembro. Sin darme tiempo a preguntarle qué hacía, Niall sacó el suyo y girándome hacia la posición contraria, me ofreció a él, pese a que su propio semen permanecía y se escurría por los costados de mi vagina. Viendo atentamente los movimientos de Louis, mantuve mi mirada en todo momento en sus reacciones, desde que entró en mi coño, hasta cuando se deleitó de sentirse atrapado por el calor de este y la viscosidad de la esencia de su amo, y la posterior follada que me dio, antes de explotar e hinchar nuevamente mi vientre de líquido blanco. Viendo el desastre que habían ocasionado con mi cuerpo, supe que con un solo toque perdería la conciencia por tanto placer, pero cuando me disponía a hacerlo, Chloe me sorprendió al tomarme de los brazos y levantarme momentáneamente del sillón, para acostarme donde anteriormente se encontraba con mi marido.- Llegó nuestro momento, Ana-. Guiñándome un ojo, esta me recostó y posteriormente, tomó lugar encima de mi cuerpo, para comenzar a rozarlo con el suyo. Respirando entrecortadamente, le di espacio entre mis piernas y en cuestión de segundos, teníamos nuestros coños frotándose y compartiendo el semen de nuestros hombres, que aprovechaban para follarse entre ellos. Recibiendo un beso de su parte, aprovechó para levantar una de mis piernas y comenzar el verdadero juego, en el que nuestras manos no quedaron quietas ni por un momento. Fue así que nuestro propio orgasmo empujó restos residuales del semen de los chicos hacia afuera, haciendo que lo compartiremos al tener nuestros coños pegados uno encima del otro, mientras nos veníamos.
Al cabo de unos minutos, cuando los demás hombres pudieron follar a los que no habían recibido nada de atención, como Louis o Niall, ellos se acercaron para una última ronda de sexo. Sonriendo al tenerlo a mi marido nuevamente cerca, lo besé por un largo rato, sin importar si eso retrasaba el juego, pero cuando vi que nos mantuvieron en el mismo lugar, supe qué iban a hacer, y el dildo de doble entrada me lo confirmó. Dejando que las dos puntas fuera introducidas respectivamente en nosotras, me relajé al sentirlo a mis espaldas a Harry, quien sin tardarse mucho, me preparó para penetrarme, algo que también hizo Liam con Chloe. Riendo ante su expresión de puro placer al sentirlo en su coño, no me percaté que Louis se había colocado un anillo de silicona con un vibrador que se introducía en su ano, hasta que vi el de Niall. Poco después, ambos tomaron su lugar: Louis, detrás de Harry, y Niall, detrás de Liam. Y fue en ese momento, que comenzó la verdadera orgía, porque mientras yo compartía un dildo con Chloe, Harry me penetraba y a su vez, este lo era por Louis, y lo mismo, pasaba con los demás, creando una maraña de gemidos, y de cuerpos entrelazados. Y me hubiera gustado decir que duramos un largo rato, pero solo bastó cinco minutos para que todos colapsáramos, llenos de nuestra propia corrida o la corrida de nuestro compañero más cercano. Para cuando logramos separarnos, todos los músculos dolían y solo quería una buena copa de champagne y comida, algo que mi marido captó y que me trajo antes de que me durmiera entre los cuerpos de los demás. Ahora, ¿quién limpiaría el desastre que habíamos hecho? Me pregunté al ver la alfombra llena de nuestros líquidos, y apoyar mi cabeza sobre ella y dormirme.

Hola nuevamente a todos. ¿Cómo están? ¿Me extrañaron? No puedo creer que pasó tanto tiempo desde el último one shot. He estado muy ocupado y con poca imaginación para escribir, aunque ya tengo una idea clara para la próxima entrega. Les daré una pista: habrá una copa y alguien deberá beber algo de ella. ¿Qué creen que sea? 😨 Espero sus comentarios.
Por último, solo quiero darles las gracias por todo. Su apoyo vale mucho para mí.

Nos vemos dentro de poco.

Matt. x