💚 Primera parte de la bilogía |Draco Malfoy| 𝓐𝓷𝓲𝓵𝓵𝓸𝓼 𝔂 𝓟𝓸𝓬𝓲𝓸𝓷𝓮𝓼.
Creía que los miedos se proyectaban únicamente en los sueños... Pero, ¿quién pensaría que podrían hacerse realidad?
Desde pequeña mi madre y mi padre me rogaron que m...
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Este capítulo aporta contenido dañino para la salud, por lo que suplico no normalizar estas conductas y pedir ayuda de ser necesario. Cuídense <3
Dos semanas después, volvió a suceder.
La enorme escalera volvió a colocarse en la entrada del Gran Comedor.
Estaba de pie junto a Blaise, quien intentaba descifrar lo que decía la nueva regla de Dolores Umbridge. La escalera tambaleaba y nuevos alumnos se sumaban a nosotros.
Ahí estaba de nuevo, el fuerte golpe del gran martillo que enterraba el clavo.
Y un trueno se interpuso en el silencio del pasillo.
"Dolores Jane Umbridge sustituye a Albus Dumbledore como directora de la Escuela de Hogwarts".
—Desearía dejar de respirar —murmuré—, por los dioses.
—Vuelve a decir eso y te lanzare un Crucio —amenazó en cuanto comenzamos a caminar.
Puse los ojos en blanco y crucé ambos brazos.
—Chicos y chicas conservarán una distancia de veinte centímetros —anunció Dolores por los megáfonos distribuidos por todos Hogwarts.
—¿Es en serio?
—Aquellos que quieran unirse a las Brigadas Inquisitoriales, pueden acercarse a mi oficina.
—Pensé en unirme a la Brigada —comentó Blaise, cruzando sus brazos.
—¿Seguro? El grupo está infestado de idiotas.
—Tú estás ahí.
—Todas las Serpientes están ahí. Además, estoy metida por obligación y porque tengo que alejarme de ciertas personas. ¿Crees que es divertido perder la dignidad por un sapo rosa?
—¿La estabas perdiendo? Creí que no tenias de eso llamado "dignidad" —se rio.
—Deja de hablar de ti mismo —lo empujé.
—Si no quieres, no estés en la Brigada.
—¿Crees que no lo intenté?
—Se interrogarán a alumnos por actividades ilícitas. Todo estudiante que no obedezca, será expulsado.
—Oye, ¿has comido algo?
Había bajado tres kilos en las última semana. Y por más que intentara comer más de dos bocados, las náuseas volvían a atacar.
—Sí.
—Chiara —se detuvo.
—Ya he comido. Ahora no tengo hambre.
—He intentado ayudarte, pero si no comes algo hablaré con Snape.
—Está bien, pero ya te dije que he almorzado —mentí.
