Capítulo 1

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-Nunca creí que una chica que odia las alturas y le tiene miedo a las criaturas mágicas llegaría a ser mi mejor amiga.

-¿Soy tu mejor amiga, Charlie?

-Lo eres, Am, y espero que nuestra amistad dure toda la vida.

Me enrollé en las sábanas blancas y caminé hacia la puerta del baño.

-¿Por qué te despiertas tan temprano, amor?

-Quedé con Bill en el Caldero Chorreante -le sonreí desde el umbral.

-¿Bill? -puso mala cara.

-No te pongas celoso, Matt -rodé los ojos -sabes que es sólo un amigo, aparte no lo veo hace bastantes meses.

-No estoy celoso, Am -dijo con el ceño fruncido.

-Claro que lo estás.

Sin dejar que respondiera me metí al baño y me di una larga ducha. Extrañaba a Bill, ya eran casi seis meses que no nos veíamos, él le tocó trabajo en Egipto y cuando venía de visita yo estaba como loca estudiando para mis pruebas finales. Al salir del baño, Matt ya no estaba en la habitación. Me vestí rápidamente y arreglé un poco mi cabello, con la varita empecé a ordenar la habitación mientras me echaba brillo labial, cuando todo se encontraba ordenado bajé a la cocina, ahí estaba Matt tomándose un café con miles de libros a su alrededor.  

-¿A qué hora llegarás?

-No lo sé, tengo mucho que hablar con Bill -dije mientras me servía un vaso de agua.

-Bueno -levantó su vista de los libros -que no se te olvide contarle de nuestro compromiso.

Dejé el vaso agua en el lavadero y caminé hacia Matt.

-¿Es en serio, Matt?

-Sólo quiere que lo tenga claro -dijo con seriedad. 

-Él sabe que estoy contigo.

-Y ahora quiero que sepa que eres mi prometida, ¿cuál es el problema? -me quedé en silencio mirándolo con la ceja alzada -lo lamento...-suspiró.

-Está bien -acaricié su rostro -¿quieres que hagamos algo en la tarde?

-Estudiaré todo el día, el  Sanador Collins dijo que mañana tendrá un caso especial y se lo dará al que entregue un informe completo sobre las heridas mágicas, ya sabes que quiero ser el mejor -dijo con cierto tono arrogante.

-Y lo eres -acorté la distancia entre nosotros y le di un casto beso -entonces nos vemos luego.

-No llegues tan tarde, Am -empecé a caminar hacia la puerta la puerta.

-Y tú no enloquezcas con tanto estudio.

Salí de la casa no sin antes darle una sonrisa a Matt, caminé unos metros  y me aparecí afuera del Caldero Chorreante. Entré rápidamente porque ya estaba un poco atrasada, de lejos divisé a un pelirrojo pecoso que reconocí inmediatamente como Bill, llevaba su cabello largo y un pendiente en la oreja, ni me imagino como debe estar su madre por su nuevo estilo.

-Amber Dixon, pero que placer verte -dijo mientras me sentaba en la silla al frente de él. 

-William Weasley, lo mismo digo.

Nos quedamos mirando fijamente, ambos con el semblante serio, hasta que la cara de Bill se empezó a poner tan roja como su cabello por aguantar la risa. No pudimos seguir fingiendo seriedad y ambos estallamos de la risa. 

-Tanto tiempo que no te veía, Am, hasta pensaba que te estabas escapando de mí -dijo cuando pudimos controlar la risa. 

-Sabes que no -le sonreí -he estado concentrada en otras cosas, como en...

Dragones en las estrellas [Charlie Weasley] TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora