Abrí mis ojos lentamente, se sentían pesados, no quería abrirlos, pero no sentía el cuerpo de Charlie a mi lado, ni su mano acariciando mi cabello, ni su respiración en mi cuello.
Estaba sentado a los pies de la cama, tenía sus codos apoyados en sus muslos y sus manos unidas apoyadas en su barbilla. Miraba a la pared detenidamente, sin decir nada, sin moverse, parecía una estatua, aunque estaba segura que por su cabeza estaban pasando mil cosas.
Aunque fue una mañana tormentosa y llena de verdades, me sentía bien, me iba a ir a Noruega con Charlie, él iba a ser el padre del bebé, incluso si no fuera de él, y estaba a mi lado. Aunque todo el pasado doliera, me sentía bien.
Pero sabía que él no.
Cuando mis ojos se estaban cerrando para dormir, pude ver su expresión de impotencia. Le había prácticamente suplicado que no fuera a enfrentar a Matthew y aunque se negó mil veces, terminó aceptando. Sé que aceptó únicamente por mí, porque si dependiera de él ya se hubiera ido hace rato a golpearlo... o a matarlo. Pero entiende que desde ahora, que él sabe toda la verdad, quiero paz. Nada más que paz.
Se giró y se dio cuenta que había despertado. Una pequeña sonrisa se formó en su rostro.
-¿Te sientes mejor?
-Sí -contesté, devolviéndole la sonrisa.
Es que me sentí horrible físicamente después de haberle contado todo. Me empezó a doler la cabeza y el cuerpo en general.
Me incorporé en la cama y él se fue a sentar cerca de mí, quedando al frente.
-¿Cómo te sientes tú? -pregunté.
-Bien... -en su voz se notaba que no estaba bien -pensando un poco.
-¿En qué?
-En Noruega -soltó un suspiro -mi madre estará de muerte.
-Sí -hice una mueca -está muy interesada por el bebé.
-Dragoncito es su primer nieto, Am, es lógico.
¿Por qué sonrío cada vez que dice Dragoncito? Tal vez es su voz, cuando dice esa palabra ocupa un tono tierno.
-Charlie... -murmuro.
-¿Sí?
La sonrisa desaparece de mi rostro al pensar en los Weasley.
-¿Y si... si se parece a él? -no pude evitar preguntar -sé que las posibilidades son muy pocas, pero no puedo parar de ponerme en ese caso. ¿Qué pasará si tiene los ojos verdes? ¿Qué dirá tu familia? ¿Qué... qué sentirás tú?
-No pienses en eso, Am -su mano la llevó a mi mejilla y la acarició -Yo ya te lo dije todo, lo que piense el resto no me importa. Lo único que me importa es que tú estés tranquila... y es bastante difícil porque es como si tú misma quisieras impedir eso.
Lo miré apenada, era cierto, mi mente sola me hacía pasar una mala jugada. Charlie se acercó un poco más a mí y besó mi frente. Tenerlo tan de cerca hizo que un cosquilleo recorriera mi interior, y no era Dragoncito, estaba segura de eso.
Y pensando en eso, no entiendo como he aguantado tanto tiempo viviendo bajo el mismo techo que él y no besarlo. Realmente me cuesta entenderlo, mis hormonas se alborotan de vez en cuando y aunque no hay besos en la boca, sus labios sí hacían contacto con mi piel, ya sea en mi mejilla, en mi frente o en mi hombro. Y sus brazos... sus brazos siempre estaban alrededor de mí...
-¿Me estás escuchando?
Claramente no lo estaba escuchando, mis ojos estaban en sus labios.
Basta, Amber, basta.
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Dragones en las estrellas [Charlie Weasley] TERMINADA
FanficLA NOVELA PUEDE TENER CONTENIDOS DE VIOLENCIA. -¡Yo estaba dispuesto a quedarme por ti! - gritó - ¡solo te pedí una cosa, Amber! Me quedé en silencio aguantando las lágrimas. -Solo tenías que pedir que me quedara - murmuró mientras tomaba mi rostro...