Siempre Y Desde Siempre

Capítulo 44

— ¿Por qué no me dijiste que invitarías a Taylor? ¡Creo que al menos pudiste avisarme Elizabeth Kloss! —. Habían entrado a la cocina, Lily susurraba y no paraba de ver sobre su hombro al pasillo. Karlie frunció el ceño y entendió a que parecía tenerle miedo.

— Yo no la invité —. Dijo en voz alta a diferencia de la otra castaña.— Es decir, no está aquí, no la invité, solo mandó a las gemelas —. Vió como el rostro de Lily se relajaba a sobre manera.— No sabía que iban a venir, lo siento si te incomoda...

— No, para nada, no es eso, no tienes que disculparte por qué esten aquí, Karlie.

— ¿Por qué parecía que estabas asustada? — Molestó Karlie al ver cómo había cambiado bruscamente su semblante. La oyó hacer un sonidito y girar los ojos.

— De qué hablas —. Sabía que se estaba haciendo la descentida, ella sonreía para fastidiarla, hasta que lo admitió.—¡Por favor! Tú viste como me vio el otro día, ¡parecía que quería asesinarme!

— Claro que no —. Lily a vió con una expresión que definitivamente decía, Sabes que sí.— Bueno, tal vez poquito.

— Si, solo quería asesinarme poquito —. A Karlie le gustó el episodio celoso que mostró la rubia esa noche. — ¡Por Dios, Karlie son idénticas a ti! —. Lily estaba alucinado de pronto dejando el otro tema de lado. Karlie soltó una risita, era más impactante tenerlas en frente, así que la entendía.

— Lo sé, Taylor no me avisó que las traería. Y la verdad no sé que hago.

— ¿Solo les has dado galletas? —. Karlie cayó en cuenta que no habían comido realmente comida. Se puso roja cuando Lily vio la caja vacía y la estufa limpia.

— Apenas iba...

— Si claro Karlie —. Dijo Lily regañándola, aunque con una sonrisa. — Te ayudaría a hacer algo, pero estoy muerta, mejor invitanos a comer.

— De acuerdo.

Pasó de largo y fue directo a la sala y a las niñas, que la vieron espectante al llegar, trató de no verse tan descolocada ante el par de miradas verdosas, no podía creerlo aún. — ¿Les gustaría ir a comer algo? ¿Tienen hambre?

— ¿Hamburguesas? — Preguntó Beth con brillo en sus ojos.

— ¿MC Donald's?

— ¿Su madre las lleva ahí? ¿Les da de comer hamburguesas? —. Preguntó Karlie. Las niñas asintieron frenéticamente, no les creía del todo, pero no creía que hubiera problemas con ello, y no quería molestar a Taylor para preguntar cada cosa, debía demostrarle que podía manejar la situación por su cuenta.— Bien, pues podemos ir.

— ¡Si! — Se levantaron emocionadas y de acuerdo.

— Bien, pues vamos.

— Karlie no vas a ir en pijama —. Dijo Tate riendo y la castaña volteó a ver su atuendo, puso los ojos en blanco, podían ser casi un clon de ella, pero sin duda parecía que estaba oyendo a Taylor.

— Vamos Kloss, rápido —. Apresuró Lily para que se fuera a cambiar y resoplando lo hizo.

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Bien, Beth dale la mano a Lily, y Tate dámela a mi.

— Bien —. Tomaron a las niñas y salieron del departamento.

Karlie no podía ocultar que estaba nerviosa. Pensó en qué no podía consultar a Taylor, realmente ir a comer no tenía porque causarle problemas, y se sentía más tranquila en compañía de Lily.