Lily llegaba cansada ese día, la remodelación estaba en marcha, ya no era tan necesario que estuviera ahí supervisando todo el tiempo, el resto lo harían los arquitectos, sin embargo, los primeros dias eran los mas pesados porque tenía que verificar que todo fuera en orden.
Así que estaba de mejor ánimo porque ahora tendría más tiempo para pasar con Karlie mientras esperaba que ésta le enseñara la ciudad, como le había prometido una vez. Desde que habían llegado se habían sumido en las responsabilidades y fuera de esa única vez que salieron a beber ella no había tenido oportunidad de salir a conocer Miami.
Karlie no se había presentado en el edificio, no sabía exactamente que había hablado con Cara, pero estaba un poco más ida esos últimos días. No le había preguntado porque, parecía que tampoco ella quería hablar sobre eso, y decidió darle su espacio. Pero realmente deseaba poder pasar más tiempo con ella.
Lily entró en su apartamento y se encontró a Karlie en la sala frente al televisor algo perdida.
— He llegado Karls—. Hasta que Lily habló Karlie le prestó atención a su amiga y se dio cuenta de su presencia. Karlie solo le sonrió ante el saludo.
— ¿Estas bien? — Lily sabía de antemano que no, esperaba que no se irritara por la obviedad. Pero de alguna forma había que romper el hielo.
— Sí—. Contestó simplemente la ojiverde. Lily dejó sus llaves y su saco en la entrada y se dirigió al sofá donde reposaba Karlie. Se le quedo viendo detenidamente hasta que fue algo incómodo para la ojiverde.
— ¿Qué pasa Lily? — Preguntó casualmente como si en realidad no se sintiera deshecha por dentro y su amiga tuviera problema con verla tan tranquila. Pero es que estaba tan tranquila como una estatua.
— ¿Qué te pasa a ti?
— Nada.
— Siempre que dices nada, suena como si dijeras de todo—. Karlie suspiró, Lily no lo iba a dejar en paz. Y no podía culparla.
— He estado pensando. Solo eso. — Desvió la mirada hacia el frente, como si eso fuera a evitar que Lily le leyera en sus ojos sobre que estaba pensando.
— Sí, de eso me he dado cuenta—. Lily se pegó más a Karlie y ésta, la rodeó con un brazo para recibirla. Y es que aquello con Cara no había resultado como pensaba. Estaba abatida si, porque hubiera querido ver a Taylor, pero tambien estaba confundida. Algo dentro de ella se había cansado.
Tal vez el estar lejos la mantenía con alguna pizca de ilusión, pero estar ahí de nuevo, sabía que iba a doler, mas no pensó que podía empezar a sentir por la rubia algo más. Un sentimiento mas como enojo y molestia.
Porque nada había sido justo. Y no lo seguía siendo.
Al menos se sentía bien de tener a alguien tan cercano que si la quisiera, Lily estaba para ella, para Karlie era el no sentirse sola, para Lily era esperanzador.
Tampoco nada justo.
— ¿De que no te das cuenta tú, eh?—. Jugó Karlie. Girándose para encararla, estaban demasiado cerca. Pero no era algo que las incomodara.
— Eso es lo que hacen las buenas amigas ¿no?—. La castaña apretó sus labios en una línea y se tensó un poco.
— Supongo.
— ¿Dije algo malo? —. Karlie negó con la cabeza, pero resoplando.
— Yo no soy una buena amiga—. Se lamentó una vez más Karlie, dejando escapar aquella confesión que siempre la atormentaba, además, no todo era por Taylor.
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Siempre Y Desde Siempre
FanfictionSiete años es mucho tiempo. Karlie lo sabe. Siete años sin ella. Siete años sin superarla. Siete años amándola aún. Karlie está consciente de que no podrá recuperar su antigua vida, su antiguo amor. Sabe que ella no la ha perdonado y que jamás lo ha...