Siempre Y Desde Siempre

Capítulo 15

Hace 11 años

Taylor estaba terminando su sándwich, Cara bebía un jugo verdoso nad antojable a su lado, estaba en alguna dieta de jugos reductivos, ella se sentía adelgazar con solo ver a su amiga, ella no resistiría ninguna dieta de ningún tipo.

Estaban sentadas en una banca del patio trasero de las instalaciones, a Taylor le gustaba ese lugar en particular porque había menos alumnos, los jardines de esa área eran los más cuidados de la escuela e inspiraban un iré de tranquilidad que no encontraba en el comedor de la universidad. Eso decía ella.

Cara creía que la fascinación por ese lugar no se debía a otra cosa que no fuera cierta chica apasionada por la fotografía que siempre rondaba esos lares con la cámara colgando de su cuello, Cara conocía a su amiga, Taylor no podía negar que siempre que entraba en su campo de visión, no podía apartar la mirada de ella.

Pero no era cierto.

A Taylor en verdad le gustaba ese sitio. La chica de la cámara había sido solo un plus del lugar.

Siempre se encontraba por ahí solitaria, Taylor al principio creyó que tal vez era una chica nueva y que no tenía amigos aun, aunque todos eran nuevos, acaban de entrar a su primer curso y ella tenía la suerte de tener a su amiga por muy idiota que fuera, pero ella, desde hace semanas que habían empezado, no la veía con nadie. Con esa misma escusa Cara la había animado a acercarse a hablarle, pero Taylor siempre se negaba, para parecer muy social, era realmente tímida, y aquella chica, para parecer muy tímida, se le antojaba intimidante.

Algunas veces si que se la topaba en los pasillos rodeada de chicos y chicas, y se dio cuenta de que la chica no estaba realmente sola. Pero eran como amistades transitorias, ambulantes, porque luego la volvía a ver sola. Y debería sentirse avergonzada por tenerla tan bien checada, pero la verdad es que no lo estaba, y le daba igual que Cara supiera sobre su nivel de interés en ella.

Pero, ¿Entonces porque en los almuerzos siempre estaba sola? Era una de las incógnitas que tenía Taylor sobre la chica. La veía pasear siempre con su cámara, estaban en el primer año de universidad, sí, coincidían en algunas materias comunes, sin embargo desconocía que justo ahí hubiera una carrera de fotografía, Taylor no estaba segura de que hubiera tampoco un club de fotografía, pero la chica siempre andaba rondando por ahí tomando capturas de lo que se le atravesaba.

Para otros podía parecer rara y fuera de lugar, pero para Taylor era interesante. Y muy muy muy hermosa.

Ese día no había sido diferente. Taylor estaba por terminar su almuerzo y aunque parecía algo distraída estaba pendiente de la llegada de la chica.

— ¿Por qué no solo vas y ya? —. Dijo Cara con aire desesperado viendo como a ella se le iluminaba la cara nada más verla, y es que a esas alturas no era un secreto que le parecía realmente preciosa.

— ¿Y decir qué? —. No tenía caso negar que estaba absorta viendo a la recién llegada. Cara podía darse cuenta.

— Yo que sé, pregúntale su nombre tan siquiera, ya me tienes harta diciendo la chica, la chica, sabes que a veces no entiendo a quién te refieres...

— No es tan sencillo Cara...—. Taylor parecía desanimada. Cara sólo rodo los ojos.

— Claro que sí, solo ve y tópate con ella accidentalmente, luego hazla tu novia y ten mucho sexo con ella...

— Quieres callarte, no sé si le gusten las chicas para empezar, y no quiero espantarla.

— Te apuesto a que sí Taylor, ¿la has visto en los pasillos? Parece muy cariñosa y amorosa, en especial con las chicas —. Cara movía las cejas de arriba abajo, exhortaba a Taylor, pero esta no cedía.