- ¿Pero quién es?
- No lo sé, intentare perderlos, pero intentaré no salir de la ciudad.
- ¿Y si le marcamos a Marco?
- No. - Contesto rápido. Él está ocupado. Yo resolveré esto.
Mire por el espejo lateral y era una camioneta pick up muy grande color negro que no para de seguirnos y acelerar.
- ¿No crees que hace eso para apurarnos y guiarnos a algun lado? ¿Y si entras por callesitas.
- Podría acorralarnos. Aparte es más posibilidad que disparen si no estamos en parte céntrica.
Las palabras de Enrique me revolvieron por completo el estómago. ¿Dispararnos?
- Solo intenta no seguir por este boulevard. - Dije
Enrique dió una rápida vuelta a la derecha en otro boulevard pero más pequeño, el monstruo negro de cuatro ruedas que venía tras nosotros empezó a dar unos golpes en la parte de atrás de la camioneta de Enrique como indicandos que no íbamos en la dirección correcta.
Cuando tuvo la oportunidad, la bestia se emparejó a Enrique de mi lado y empezó a acercarse como si fuera a empestirnos.
Enrique giro rápido a la izquierda en otro pequeño boulevard. Y la camioneta lo siguió rápidamente, pasamos unas cuadras y este no nos golpeaba.
- Te lo digo, nos esta guíando a la salida de la Ciudad.
Enrique rapidamete giró nuevamente a la derecha y después de un rato la bestia hizo el mismo movimiento.
- Tienes razón.
- ¿Y si le ponemos una trampa?¿Y si llamamos a la policía?
- No, no podemos involucrar a la policía.
- ¿Enrique, haces algo ilegal?
- ¿En serio quieres hablar de eso, ahorita?
Me límite a no contestar.
- ¿Y si le hablamos a Marco, repetí?
- Será lo mejor.
Yo marque pero Enrique me arrebato el celular.
- ¿Que paso, la dejaste en el departamento? Necesito tu ayuda aquí. - Escuché la voz de Marco atareado
- Marco tenemos un problema
- ¿Que pasa?
- Samuel, me viene siguiendo.
Entonces Enrique si sabía quién lo seguía.
- ¿Que quiere el hijo de la chingada? Deja que te siga hasta acá, aquí lo voy a dejar como coladera.
- Tenemos un problema.
- ¿Cuál?
- No alcance a dejar a Elena, ella viene aquí conmigo.
- Maldita sea.
Derrepente otro impacto en la parte de atrás de la camioneta nos hizo movernos bruscamente provocando que Enrique perdiera el control un segundo y yo lanzará un grito agudo.
-¡¿QUE FUE ESO?! ¡¿Enrique?!
El chiquete un poco atarantado tomo fuerte el volante y yo busque mi celular y puse el alta voz.
- Nos viene golpeando, nos dirige a la salida norte.
- Retrasalos unos minutos nos iremos todos para allá, te marco cuando sea seguro que vayas.
ESTÁS LEYENDO
No me olvides Markitos Toys -Terminada- Parte I
Science FictionCuando a Elena Alcaraz alcanzó una edad madura los más jóvenes la miraban como alguien a quien respetar, alguien madura, con cientos de buenas historias las cuales no se cansaban de escuchar. "Es una pena" pensaban todos al verla. Pero había una his...