XI

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Me levanté tarde y tenía que ir a trabajar, así que corrí directamente al baño a bañarme y arreglarme.

Fer no paraba de gritar que era tarde mientras se alistaba también en su cuarto.

Le dije que saliera y baja el edificio y fuera pidiendo un uber, que yo cerraría el departamento.

Hice una inspección rápida a mi mochila y parece que no olvidaba nada.

Me la colgué en los hombros y cerré la puerta para correr al elevador pero mi cabello me nublo la vista un segundo y choque con alguien.

Sentí como en cámara lenta como mi cuerpo regresaba hacia atrás.

- Perdón. - Dije intentando quitar el cabello de mi cara que aún nublaba mi vista.

- Más cuidado, niña - Dijo un joven con una sonrisa linda y una barba adornando su rostro. Sus ojos profundamente negros inspeccionaron ni cara, lo cual me provocó muchos nervios. - Soy nuevo. - Dijo explicando. - Soy Daniel. - Dijo estirando su mano. Por un momento sentí que todo se calmaba, mi mundo estaba tranquilo.

- Un placer, Daniel. Soy Elena y de hecho, soy tu vecin... - Mi teléfono vibrando como loco me interrumpió.

"Ferputa" apareció en toda la pantalla de mi celular.

Daniel solo sonrió divertido.

- Me tengo que ir pero fue un placer Daniel. - Dije con una sonrisa caminando rapido hacia el elevador.

Después de escuchar los gritos de Fer que el Uber ya estaba abajo. Corrí a la entrada del edificio y me subí al Uber.

- ¿Que te entretuvo tanto?

- Nada. - Dije sin importancia.

Fue un día largo en el trabajo, Fer y yo trabajamos en el mismo edificio pero diferente área. A la hora de salida le envié un msj si ya había salido.

Me dijo que había salido hace una hora y se había ido con Enrique.

Perfecto, seguro no entrara a clase y le irá de la chingada en el último semestre.

Después hablaría con ella de eso.

Cuando iba llegando a la prepa mire la camioneta de Marco estacionada.

Extrañada camine a mi salón. Y lo mire a lo lejos platicando con algunas de mis compañeras, solo sonreí y negué con la cabeza.

Me senté en mi lugar viendo mi celular hasta que llegó alguien y me lo arrebato para después besar el espacio entre mi nariz y mi mejilla. Y después mi mejilla.

Todos en el aula nos miraban disimuladamente.

Sonreí un poco incómoda mirándolo.

- Hola, ¿Que haces aquí?

- Tenía ganas de verte, ¿vamos por algo de comer?

- Me gustaría, pero tengo clase, Marco.

- Claro que no. Revisa el grupo.

Él extendió su brazo para darme mi celular y yo extrañada lo tome, efectivamente el profe acaba de poner que por motivos personales no daría las primeras dos horas de clase.

- ¿Cómo sabías?

Él quito su vista de mis ojos y giro a su cabeza a la puerta de salida.

- Escuché a tus compañeros hace unos segundos.

Achique mis ojos mientras lo miraba, no sé por qué no le creía, pero también era muy estúpido creer que él había tenido algo que ver en esto.

No me olvides Markitos Toys -Terminada- Parte IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora