No me olvides Markitos Toys -Terminada- Parte I

VIII

- No quiero hablar de ese tema. - Dijo Marco a Cristina.

- ¿Y Elena sabe, todo lo que hace tu famoso primo?

- No. No es de su incumbencia.

- Pensé que eran muy amigos

- Lo somos. Pero ese tema no lo hablo con nadie.

- Todos lo saben, algún día ella también lo sabrá y se molestará por qué no le dijiste.

- Solo intento protegerla.

- ¿Mintiendole? ¿Que pasará cuando un día se de cuenta de la verdad? Cuando un día la policía vaya a interrogarla sobre cual es su conexión con Vivanco.

- Ella no lo sabrá y tu no le dirás nada.

- Claro que no, por qué es algo que no me corresponde, me da algo de tristeza que le mientas sobre este tema, pero será más divertido cuando se entere solita.

Marco la miro feo y camino hacia Enrique.

- ¡Sonrían! - Dije apuntando la cámara a Enrique y Marco.

Ambos sonrieron y el chiquete abrazo a Marco por los hombros.

Después ellos dos nos tomaron una fotos a Fer y a mí.

- Listo. - dije mirando las fotos.

- Faltan tu y marco. - Dijo Fer.

Camine algo nerviosa alado de Marco, el tímido se acercó a mí y nos tomaron un par de fotos, luego otra dónde yo tomaba las mejillas de marco para que sonriera y otra dónde él me cargaba en su hombro.

Después me bajo y quedamos frente a frente riendo.

Lo miraba directo a los ojos, cuando el "Click" de la cámara de Fer me saco de mis pensamientos.

- pudimos caernos. - Dije a Marco.

- Jamás dejaría que te pasará algo.

Lo empuje leve con mi hombro y el me abrazo por los hombros.

Volvimos al rancho para bañarnos y alistarnos.

Los hombre estaban formales con camisa, pantalón de vestir y botas vaqueras y algunos con sombrero.

Las mujeres andábamos de vestido o faldas.

El mío era un vestido suelto con un poco de escote. Planche mi cabello con unas ondas al final. Y Fer me hizo un maquillaje rosa muy bonito.

Salí colocándome unos aretes, Marco estaba fuera. Mirándome directamente.

- ¿Que te parece? -Dije riendo un poco.

- Te vez realmente hermosa. - Dijo besando mi mejilla.

Solo sonreí.

Le cantamos las mañanitas a la Nana Regina, comimos barbacoa y pastel.

Le llevaron serena ¡CON CALIBRE 50!

Tomamos, bailabamos. Todo estaba bien hasta que el primo de Marco se acercó a mí.

- Marco es un tonto por no tomarte en serio.

- ¿Disculpa?

- Vamos, seguro solo son amigos con derecho.

- En realidad, no. Ni siquiera lo he besado.

- Entonces eres un reto para él. Sigue así y será tuyo. Bueno... Hasta que obtenga lo que quiere.

Realmente me molestaron la palabras del joven así que me quite de su lado, Marco bailaba una cumbia con sus otros primos pero al ver mi rostro se acercó a mí y me saco a bailar, el ritmo cambio a algo más lento y Eden empezó a cantar su éxito "simplemente gracias"