Capítulo 5: Escape a Griddy's

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Entre los ocho se habían organizado para poder escabullirse de la Academia, creyendo que no habrían sido vistos por ninguno de los adultos. La cafetería Griddy's Doughnuts se encontraba a pocas calles de la mansión, así que prontamente llegarían.

Tuvieron buena suerte de encontrar una mesa donde cabían los ocho juntos, de manera que la comunicación sería más fluida y todos serían parte de ella. El lugar era atendido por una mujer mayor muy amable, llamada Agnes, quien les tomaría el pedido.

Lejos de la mirada estricta de su padre, los Hargreeves parecían actuar tal como un adolescente normal lo haría. Sin el rigor de la mirada que siempre los juzgaba, se sentían más libres de esos prejuicios y mostraban su verdadera personalidad. Allí pudiste conocerlos un poco mejor, en particular a alguien con quien podrían llegar a ser amigos.

El tiempo se les pasaba volando, y en esa charla había salido el tema de sus misiones, y las ciudades que habían visitado debido a ellas. Te contaban estas experiencias para que empezaras a darte una idea de lo que prontamente te esperaría.

—Entonces han estado en muchas partes del mundo, debe ser increíble —comentaste con asombro, por la manera de describir cada sitio.

—Viajar y conocer otros lugares es la parte entretenida de las misiones —admitió Klaus, aprovechando la distracción de uno de sus hermanos para robarle algunas papas que todavía tenían en su plato.

Tú lo observaste con gracia, aunque solo preferiste mantenerlo como una complicidad entre ustedes, sin delatarlo.

—Pero es peligroso también —les recordó Ben, quien siempre era mucho más cuidadoso y temeroso.

Estabas fascinad@ con las historias que contaban de sus misiones, en especial una de aquellas que ocupó las portadas de más de un periódico alrededor del mundo, y todavía para muchos era un misterio. La misión de la Torre Eiffel, en París. (En parte sacado del cómic)

—Lo más impactante fue que la Torre Eiffel no era eso, sino una nave espacial —dijiste, sin poder salir del impacto que te había ocasionado que te confiaran esa verdad, puesto que para el resto del mundo era algo diferente—. Es fascinante.

—Sí, pero lamentablemente quedó plasmado como un inconveniente simple en la Torre —acotó Allison, quien no había estado muy de acuerdo con que lo ocultaran.

—El mundo no está preparado para descubrir ese tipo de realidades todavía —explicó Luther, añadiendo a la anécdota la manera en que mantuvieron oculta la verdad—. Así que solo reemplazaron la Torre, para no alertar a la población.

—Bueno, es comprensible —asentiste, aunque todavía no sabías si estar de acuerdo o no con que le mintieran a la población—. Si apenas están aceptando que hay personas con habilidades diferentes... —murmuraste, perdiéndote en tus pensamientos al respecto.

Pero, de inmediato te llamaste a silencio, pues no querías incomodar o hacer sentir mal a Vanya por ese comentario. Para ti ella era una más del equipo, independientemente de si tuviera o no una habilidad especial.

—Pero, ¿cuál es la misión que más les ha impactado? —interrogaste en general, para continuar con la plática.

Quisieras haber obtenido una respuesta, pues era un tema que te despertaba mucha curiosidad. Y probablemente ellos estaban ansiosos por compartirlo contigo, pero no fue posible. En ese momento todos pudieron sentir un sudor helado al ver ingresar a la cafetería a su padre.

El tiempo pareció congelarse, y solo se veía el movimiento de Reginald avanzando hacia la mesa donde ustedes se encontraban. Percibiste cómo tu corazón se aceleraba por el temor que su mirada severa te causaba, y a todos sus hijos.

—Desperdiciando tiempo preciado en el ocio —fue lo primero que dijo, con un tono que les anunciaba que realmente se habían metido en grandes problemas.

Un simple ademán de Reginald, fue suficiente para que todos se pusieran de pie y lo siguieran hacia la Academia. Tristemente sabían lo que vendría, un gran sermón, seguido de un eventual castigo.

Si comprendías que no debieron haber escapado, pero eso solo lo habían hecho debido a su estricto horario que poca posibilidad de esparcimiento les daba. Si tan solo les diera más de un día libre al mes...

[...]

En el próximo capítulo serán develados los 2 castigos posibles, deberán elegir uno de ellos para continuar leyendo y construyendo su historia.

Mi vida con los HargreevesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora